—Parece que Farel, con esa cara de hielo, puede decir cosas tan sugestivas, ¿cómo no van a tener una buena relación?— Félix asintió en acuerdo a su lado.
—Lástima que Valerio no vino, su cara agria y celosa habría sido muy interesante de ver.— En su silla de ruedas, Tomeo le echó una mirada y habló con indiferencia.
—Cierra la boca, no eres mucho mejor que él.—
Había muchos invitados ese día.
Para hacerle honor a Evrie, Tomeo también había traído a sus hijos a la celebración.
A Giselle le gustaba bastante Evrie, y como Evrie era una chica con un gran talento y una buena personalidad, no le importaba que estuvieran juntas.
—Giselle, hablando de eso, ya tienes la edad, si hay alguien que te interese, recuerda decírselo a papá.— La voz de Tomeo se suavizó mucho cuando miraba a su adorable hija.
Por un momento, había visto un destello de anhelo en los ojos de Giselle.
Félix escuchó y siguió la conversación de su padre. —Oh sí, hermanita, ¿tienes a alguien que te guste? Dinos quién te interesa y dejaremos que nuestro padre organice tu boda también.—
Para que Giselle no se sintiera cohibida, añadió:
—Elige con confianza, elige con audacia, con nuestra posición, ¿quién se atrevería a no unirse a nuestra familia?—
Giselle bajó las pestañas suavemente.
¿Una persona que le gustara?
De hecho, había una.
……
La ceremonia de la boda había concluido.
El ambiente estaba lleno de alegría.
Llegó el momento de lanzar el ramo de novia, y muchos jóvenes se acercaron emocionados a participar.
Blanca y Berto, como dama de honor y caballero de honor, eran esenciales en la ocasión.
Cuando Evrie cerró los ojos y lanzó el ramo, Berto lo interceptó con agilidad.
Se escucharon risas y burlas.
—El padrino es un perro soltero, ¿de qué sirve que atrape el ramo? Más bien debería elegir a alguien aquí mismo.—
Berto sonrió perezosamente. —Elegir a alguien, no sería mala idea.—
No quería arruinar el ambiente en un día tan feliz para su amiga, así que dijo con una sonrisa: —Claro, claro, soy yo quien se adelantó, pido disculpas a Berto, este ramo te lo devuelvo, yo no merezco tenerlo. Si quieres cortejar, por favor, gira a la izquierda y lanza el ramo hacia tu círculo de admiradores.—
Después de hablar, sacó sus auriculares para ponérselos y continuó con su trabajo en un rincón.
No le dirigió una sola mirada.
—Curioso, la dama de honor resulta ser una adicta al trabajo. Berto, parece que te han rechazado esta vez.— Alguien bromeó a su lado.
Berto se quedó parado en su lugar, con una ligera sonrisa.
—Hermosa y capaz, me gusta.—
—No te emociones.— Farel intervino, —Ven a brindar conmigo.—
Berto se despertó de sus pensamientos y lo miró. —Tienes buena tolerancia al alcohol, ¿no puedes ir tú solo?—
—No, tengo que estar disponible para mi noche de boda.—
Berto se quedó en silencio.
Comprendo, estaba torturando al soltero.
Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: Receta para robarle el corazón al Dr. Farel
Hola ya no hay más capitulos...
Llevo mucho tiempo revisando dia a dia para ver si actualizaron y nada😪😪...
Muchos dias sin subir capituños y nos vamos a quedar sin saber que pasa con los protagonista. Que pereza....
Para el buen lector es de muy mal gusto esperar por alguien para darle continuidad a una buena e interesante lectura, son muchos días de espera....
Por favor más capitulos😢😢...
Hola por favor que pasa capitulo...
Quiero más capítulos por favor me tiene triste ver como esta berto😔😔...
Hola amiga más capítulos...
Más capitulos vale...
Quiero más capítulos para ver que pasa con la salud de berro...