El hombre cayó pesadamente al suelo, sin poder levantarse por un buen rato.
Miró a Valerio con una mirada llena de furia —¿Qué haces metiéndote en los asuntos entre mi novia y yo? ¿Acaso quieres robármela?—
Valerio soltó una risa burlona, sacudiendo su mano —Vuelve a decir algo, y te golpeo de nuevo.—
Los ánimos entre los dos se encendieron, y el hombre, tambaleante por el alcohol, se levantó del suelo y se lanzó hacia Valerio.
—¡Vamos, quién te tiene miedo!—
Valerio le lanzó otro puñetazo rápido, preciso y fuerte, haciendo que el hombre gritara de dolor, a punto de caer nuevamente.
Ser golpeado así frente a una chica era una vergüenza.
Se trataba de una cuestión de dignidad, no se daba por vencido y con ojos rojos de furia se abalanzó sobre Valerio, agarrando su puño con fuerza.
Los dos comenzaron a forcejear.
—¡Ah, te voy a morder hasta matarte!—
Al hombre le faltaba habilidad en la pelea, abrió su boca ampliamente e intentó morder el cuello de Valerio.
En el último instante, Amanda se interpuso poniendo su delicado brazo en el cuello de Valerio.
—¡Ayyy...!—
Un dolor sordo se hizo presente en su brazo, y Amanda casi suelta lágrimas de dolor.
Viendo esto, Valerio pateó entre las piernas del hombre, quien soltó un grito y cayó al suelo, agarrándose la entrepierna.
—Ya basta. —Amanda rápidamente separó a los dos, agarrando la manga de Valerio, —Si sigues golpeándolo, él llamará a la policía, y al final el perjudicado serás tú.—
—Yo estoy haciendo lo correcto, ¿qué voy a perder?—
Valerio bufó con desdén, echándole un vistazo a la marca de mordida en el brazo de Amanda, dos profundos surcos con trazas de sangre.
Parecía que ella le había salvado de la mordida del hombre.
Frunció el ceño, abrió la puerta del coche —Qué molestia, sube.—
—¿Para qué?—
—¡Para vacunarte!—
Amanda entendió inmediatamente su intención, al ver la sangre en su brazo también entró en pánico y sin más se metió en el coche.
De repente, se giró hacia el hombre en el suelo.
Valerio la miró, con un tono de voz poco amigable —A tu edad, ¿para qué tienes novio?—
Amanda le respondió en voz baja —Ya no soy tan joven, tengo 22 años.—
—Hasta los 25, la gente no madura, especialmente en temas de amor y matrimonio. Necesitas tener suficiente juicio claro y experiencia para saber lo que realmente quieres, todavía eres joven, ¿para qué la prisa?—
Valerio no pudo evitar darle algunos consejos más, y viendo su aspecto ingenuo y tonto, añadió otra frase.
—Hazme caso, espera hasta después de los 25 para enamorarte.—
Amanda dudó y negó con la cabeza —Eso es demasiado tarde.—
¿Tarde?
Valerio se quedó sin palabras —Los 25 son la flor de la juventud, con toda la energía, ¿no vas a vivir más allá de los 25?—
—Sí, no viviré más allá.—
Amanda asintió seriamente.
Pensándolo bien, agregó una frase más —Solo viviré hasta los 23 años, desde ahora hasta el día de mi muerte solo me falta once meses y nueve días.—
Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: Receta para robarle el corazón al Dr. Farel
Hola ya no hay más capitulos...
Llevo mucho tiempo revisando dia a dia para ver si actualizaron y nada😪😪...
Muchos dias sin subir capituños y nos vamos a quedar sin saber que pasa con los protagonista. Que pereza....
Para el buen lector es de muy mal gusto esperar por alguien para darle continuidad a una buena e interesante lectura, son muchos días de espera....
Por favor más capitulos😢😢...
Hola por favor que pasa capitulo...
Quiero más capítulos por favor me tiene triste ver como esta berto😔😔...
Hola amiga más capítulos...
Más capitulos vale...
Quiero más capítulos para ver que pasa con la salud de berro...