Una vez dentro me lleva hasta la cama, se apoya ligeramente sobre ella, y desciende lentamente, sin dejar de besarme apasionadamente, mis brazos enredados en su cuello, sus manos a ambos lados de mi cuerpo, para sostener nuestros pesos y no dejarnos caer de golpe, mi cabeza toca la suave sabana debajo de mí, sus labios dejando un reguero de besos húmedos en la línea de mi mandíbula, bajando por mi cuello, susurra contra mi piel.
- amo el olor tu piel, como ardes cuando te toco... cuando te beso... eres infinitamente mía Asier...-
mientras habla de mis labios se escapan pequeños jadeos, sus labios están apenas separados de mi piel, por lo que cuando habla hacen un ligero contacto con ella que la eriza, me estremezco, y el vuelve a sonreír, continua con sus besos, chupando, mordiendo suavemente aquí, allá, yo ya no soy yo, no soy más que un manojo de sensaciones placenteras, excitantes que me llevan cada vez más arriba.
Una de sus manos se introduce por debajo de mi blusa, acariciando mi abdomen, subiendo lentamente hasta mis pechos, los cuales acaricia sobre mi sujetador, los masajea y aprieta sin dejar de besar mi cuello y mis hombros, pasa de uno al otro, mis manos viajan por su espalda, sintiendo como sus músculos están tensos por la fuerza que hace para mantenerse ligeramente suspendido sobre mí con un solo brazo, tomo el dobladillo de su sudadera y la levanto, subiéndola con desespero, anhelo, ansió el contacto de nuestra piel, de piel con piel, de su cuerpo duro, fibroso y musculoso sobre mi cuerpo suave.
Sus labios se despegan de los míos por un momento para dejar pasar su sudadera, que paso por su cabeza, pierdo de vista un segundo su rostro cuando volvemos a encontrar nuestras miradas, el sonríe con calidez y deseo, vuelve a besarme con cariño, mis manos descienden por sus hombros, su espalda.
él se estremece con el contacto de mis manos, dejando escapar un jadeo en mi boca que me hace poder un poco más, la mano que estaba hace unos instantes sobre mis pechos esta nuevamente fuera de mi blusa subiendo a mi nuca, donde el tira ligeramente para levantarme y sentarme sobre la cama, aun sin dejar de besarme, sujeta le borde de mi blusa y me la quita de un tirón.
Vuelve a mi boca con rapidez y sin perder tiempo deshace el moño sobre mi cabello, soltándolo, desliza sus manos por mi espalda hasta el broche de mi sujetador el cual también suelta con rapidez, desliza sus manos hasta mis hombros, deja resbalar las tiras para pasarlas por mis brazos y despojarme de el una vez sin él, rodea mi torso con sus brazos y me pega a él, a su pecho, a su piel ardiente, sin despegar nuestros labios que se besan con necesidad, con ansias, con cierta desesperación.
- dios como amo sentir tu piel pegada a la mía...-
dice contra mi boca y vuelve a besarme, mis manos suben y bajan haciendo presión y dejando sentir mis uñas sobre la piel de su espalda, el gruñe en mi boca, se tira hacia atrás llevándome con él, se pone de pie sin perder el contacto de nuestros labios y me ayuda a ponerme de pie junto a él, mis manos viajan desesperadas al botón de su pantalón que deshago y tiro de el hacia abajo junto a su bóxer, él se ríe pegado a mi boca y se separa y susurra divertido
- alguien tiene prisa...-
lo miro con una sonrisa pícara y le respondo con fingido tono de fastidio
- no molestes y continúa besándome...-
el vuelve a besarme mientras saca sus pies del pantalón, siento su miembro erecto chocar contra mi vientre y una escalofrío me recorre, él se ríe nuevamente en mi boca y hace lo propio, desliza sus manos por mi cuerpo, quemando allí donde pasa, su boca también se desliza de mis labios hasta mi cuello, de mi cuello hasta mis hombros y continua hasta mis pechos, mientras sus manos desabotonan mi jean y lo bajan, dejándome solo en bragas, sus labios están distraídos en regar y dejar besos húmedos en mi abdomen, deja un beso en mi ombligo, y continua su camino hasta esta agachado frente a mí, sus manos en mis muslos subiendo y bajando con delicadeza, bosa su boca sobre mi entrepierna y besa suave, se ríe y susurra
- estas tan húmeda y caliente que se siente por sobre tu braga...-
introduce sus dedos en el borde de mi braga y tira de ella hacia abajo, dejándome completamente desnuda ante él, sin perder tiempo mete su cabeza entre mis piernas y comienza con la delicada y deliciosa labor de darme placer, su lengua experta vieja en círculos alrededor de mi bultito hipersensible, de arriba, abajo, llenándome de un placer indescriptible, chupa y muerde suavemente sobre el mientras sus manos acarician mis pechos, mis manos están enredadas en su cabello dando pequeño tirones que lo hacen gruñir aprobando lo que hago.
Se separa de mí y mi cuerpo gime y tiembla por la falta de contacto, vuelve a mi boca y me besa, dejándome saborearme en su beso, sus manos están recorriéndome entera, decididas a allanar y adueñarse de mi piel que anhela y pide a gritos su posición. Empuja su cuerpo contra mí y volvemos a tumbarnos sobre la cama, sin dejar de besarnos, sin dejar de tocarnos, sin dejar de sentirnos, gimo en su boca de desesperación y sin poder evitarlo le ruego
- p-por favor Andrew... quiero...-
no puedo terminar la frase, el sonríe mientras besa mis pechos y susurra
- que quieres nena, dímelo...-
mis manos tiran de su cabello para indicarle que lo quiero besando mis labios, cosa que hace de inmediato sonriendo, y una vez nuestros labios se juntan mi mundo vuelve a desvanecerse, vuelvo a perderme en mí, vuelve a anularme, me separo y le susurro
- te quiero a ti dentro de mí... cada puto día del resto de mi vida, te quiero siempre conmigo Andrew...-
Andrew sonríe en mis labios, ampliamente y responde, mientras se va deslizando en mi interior
- cada puto día del resto de nuestras vidas...-
y vuelve a besarme con pasión, nuestras manos se mueven sobre nuestra piel, asegurándose de marcar y quemar aquí y allá donde aún no lo hayamos hecho, encargándose de dejar la huella de que nos pertenecemos infinitamente.
*****
Estamos tendidos en la cama, desnudos bajo las sabanas, después de haber hecho el amor como nunca lo habíamos hecho hasta ahora, afirmándonos y confirmándonos que nos pertenecemos que somos el uno del otro por el resto de nuestras vidas. Sus manos acarician uno de mis brazos y la otra sobre uno de mis muslos, estoy acostada de lado con medio cuerpo sobre él, tengo los ojos cerrados, escuchando latir su corazón, amo el ritmo de este corazón, amo el ritmo de nuestros corazones latiendo al mismo ritmo. Recuerdo la pregunta que me hizo mientras cenábamos y lo llamo.
- Andrew?-
- mmmm?...-
responde bajo
- por qué quieres que salgamos este fin de semana?...-
se la respuesta a eso, pero necesito que el comience hablar al respecto, necesito que se abra un poco más a mí, respecto al accidente.
- tu sabes por qué...-
responde, en tono bajo, somnoliento.
- no vamos a salir este fin de semana...-
le respondo, esperando que reaccione mal y se moleste, pero solo suspira sonoramente y me pregunta
- por qué no?....-
sonrió porque no se haya cabreado y le respondo
- tengo algo planeado para el sábado...-
siento como su cuerpo se tensa y susurra
- no quiero ir al homenaje Asier...-
niego con la con cabeza y le respondo
- lo sé... no iremos allí, pero no me parece justo que estés lejos de aquí ese día...-
su cuerpo sigue tengo, por lo que volteo a ver su expresión, pero apenas si ha cambiado, sigue con los ojos cerrados.
el sonríe y susurra divertido
- pensé que no lo ibas a decir otra vez...-
comienzo a reír y le respondo
- yo no he dicho nada...-
es su turno de reír y contesta
- cierto... -
ambos reímos, mientras en la puerta Maya comienza a rasgarla para que la dejemos entrar, Andrew se ríe un poco más y me susurra
- creo que alguien te echa de menos...-
sonrió y asiento y él contesta entre risas
- entonces párate y ábrele la puerta...-
me rio y niego con la cabeza y el responde aun divertido
- dentro de poco deja de seguirme a mí y se muda contigo la muy traidora...-
Maya continúa rasgando la puerta con sus patas y lloriqueando, Andrew me apremia
- ve que la pobre le dará algo si no te ve pronto...-
pongo mis ojos en blanco, descubro mi cuerpo y me separo de él, me bajo de la cama y camino desnuda hasta la puerta, cuando estoy por llegar, me giro porque siento la pesada mirada de Andrew sobre mí, cuando lo hago, Dios me quedo sin aliento, esta recostado a la cabecera de la cama con una enorme sonrisa en los labios muero lento, la sonrisa tonta vuelve a mis labios y me dice divertido...
- te gusta lo que ves? porque lo yo veo me vuelve loco...-
sonrió nuevamente, me pongo de espalda respondiéndole al mismo tiempo que dejo pasar a Maya, que lame mis pies haciéndome cosquillas, se queda en el umbral de la puerta mirando a Andrew, está esperando que le dé permiso de entrar, Andrew asiente y da una palmada sobre la cama, basta para que Maya se lance corriendo sobre esta y caiga sobre él, lamiendo y besando todo el rostro de Andrew como si tuviera siglos sin verlo, camino riendo hasta ellos y le digo divertida
- me voy a poner celosa...-
Andrew comienza a reír y me responde
- lo siento nena, pero Maya llego primero...-
ambos reímos mientras nos tendemos los tres en la cama.
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