Si, acepto el contrato (COMPLETO) romance Capítulo 31

Narra Jackson

Volver a casa sin el resultado que esperaba fue fatal, hasta ahora me doy cuenta de muchas cosas, se me hace más fácil manejar a las mujeres en cuatro paredes y semidesnudas, quizás cuando conocí a estas chicas estaba muy tomado, no había compartido en un lugar tranquilo con ellas hasta las citas que tuvimos, fue fatal. Quizás comprendo un poco a Chanel, ella me vio estar con esas y muchas más mujeres, en sus ojos me vería como un completo bandido que andaba con modelitos que no valían la pena, son todas superficiales, yo siendo ella también habría rechazado mi propuesta, gracias a Dios que luego de ese momento tan triste para mí, Chanel en el aspecto laboral continua con normalidad, ella es muy profesional ¡Ash! Esta mierda me va a volver loco, ya no sé qué más hacer, quizás deba ir con el abuelo y arrodillarme o mejor ir a un banco a pedir un préstamo, considero que sería más fácil vender mis órganos que hacer cambiar de parecer a mi querido abuelito.

El Lunes llega más rápido de lo esperado y me dirijo a la oficina, los problemas nos siguen estancando pero estamos pidiendo tiempo para resolver las cosas, la suerte que hemos tenido es que las personas han sido empáticas, comprende la situación que atravesamos, pero en algún momento todo cambiará, los negocios son así, las personas se mueven por las cifras, no por la empatía.

- Buenos días – dice un hombre entrando a la oficina

- Buen día – respondo al saludo reparándolo, ¿Por qué no me notificaron que alguien vendría?

- Soy Carlos Ponce, era amigo de su padre Nicholas – dice entrando con pasos lentos

- Oh claro, dígame ¿en qué le puedo ayudar?

- Vengo para entregarle el acuerdo firmado por mi empresa

- ¿El acuerdo? – pregunto sin saber de lo que habla

- Si, bueno, no sé si su padre le contaría, hace un tiempo estábamos acordando un negocio, el me estableció una serie de condiciones y tras pensarlo lo hemos aprobado.

El hombre extiende una serie de documentos y entre esos hay uno muy particular, menciona a Grace Henderson.

- Podría explicarme más sobre este documento, por favor – digo levantando la hoja que lleva el nombre de mi secretaria

- Claro, su padre me había comentado la situación de esta persona, en el acuerdo que hicimos para validar el proyecto, estaba el reducir al cincuenta por ciento la deuda de la hipoteca que esta persona tiene con nuestro banco.

¿Qué carajo está pasando aquí?

- ¿Mi padre haría un acuerdo de negocios con usted, solo si el banco reducía las deudas de Grace?

- Es correcto

¿Qué tipo de negocio es ese? ¿Mi padre se estaba volviendo loco acaso?

- Bien, como sabe algunas cosas han cambiado un poco tras el fallecimiento de mi padre, si quiere me da un tiempo para revisar lo que ha traído y luego le doy una respuesta, la verdad no estaba enterado de esto y quisiera empaparme más antes de darle una respuesta

- Oh, ya veo, pero no se preocupe, cuando tenga alguna duda o quiera decirme algo puede llamarme, le dejaré mi tarjeta.

- Claro, me parece perfecto.

El caballero de traje color gris, sale de la oficina dejando mi cabeza con un mar de dudas, por lo que espero a la implicada para que me dé una explicación.

- Señor Jackson, buenos días, lamento llegar tarde, es que…

- No me de excusas, porque desde que existen las excusas la gente no queda mal

La mujer se detiene a mitad de camino y me observa con rareza

- ¿Pasa algo? – pregunta

- ¿Desde cuándo mi padre tenía que interferir en sus asuntos personales? – cuestiono sin pelos en la lengua

- ¿A qué se refiere?

Me ofendió un poco sus palabras, pero vuelvo a mi escritorio, estoy seguro que puedo encontrar una secretaria en menos de diez minutos, se cree la gran cosa esa maldita estúpida, pero ni crea que dejaré que ese acuerdo la favorezca; empiezo a buscar la tarjeta que el hombre me ha dado, quiero llamarlo para que cancele esa mierda, que pague o que le quiten su puta casa, ese no es mi problema; miro por todos lados y no doy con el papel, ruedo mi silla para mirar el piso y no sé dónde carajos está, me tiro al suelo y noto que la tarjeta ha caído debajo del escritorio, la tomo y antes de ponerme de pie, me percato que el ultimo cajón de la mesa de madera tiene un seguro, no me había dado cuenta de ese cajón, ¿Por qué tendría llave? Reviso en el resto de gavetas si hay una llave para ese cajoncito, pero no hay nada, empiezo a forzarlo un poco pero ningún intento es favorable, no tuve más opción que ir hasta la sala del conserje y pedirle unas pinzas o algo que me sirviera para abrir esa gaveta, en ultimas el mismo hombre sube conmigo y termina forzando la cerradura para abrirlo.

Una vez me encuentro solo en la oficina, saco una serie de carpetas que se encuentran allí, las abro una a una y veo los expedientes de los trabajadores, era toda la información de las personas que trabajan en la compañía ¿Por qué mi padre tiene esto? Paso las carpetas y me detengo en una en especial, era la de Grace.

- Grace Henderson, tiene veinticuatro años de edad, es de Los Ángeles, vivía con su madre y dos hermanas – sigo pasando las hojas y me topo con un historial clínico, al parecer pertenece a su madre quien tenía leucemia, sus hermanas estudian becadas en un excelente colegio, por lo que veo mi padre le ayudó con esas becas ¿Por qué tanto interés en ayudarle a esa chica? Conmigo nunca hizo algo así. En otro de los documentos encuentro la información de la hipoteca, al parecer son dos propiedades, una es propia y la otra una herencia de su madre, ¿Qué razones tendrían para hipotecar sus casas? Sigo pasando y encuentro un informe, creo que mi padre le pagaba a alguien para indagar sobre sus empleado; el informe valida el uso del dinero para pagar tratamientos médicos particulares para una mujer llamada Amalia, quien sufría de Leucemia Mieloide Aguda, ¡Dios! Ella tiene esas deudas por pagar los tratamientos de su madre, por un momento me siento un poco mal.

- Ahora le encuentro un poco de sentido a las cosas

Más tarde me encuentro en casa, mi madre se ha limitado a hacer preguntas relacionadas a la situación de la compañía, entiendo que lo hace para no estresarme más de la cuenta.

- ¿Qué te parece la cena? – pregunta ella sonriente, hace mucho no la veía así

- Es deliciosa – respondo llevando un bocado de las pastas a mi boca

- El abuelo estuvo preguntando por ti, se quedó un largo rato pero luego tuvo que irse – dice mi madre algo curiosa

- Oh, el me esperaba porque le comentaría algo de la compañía, cosas de futuros proyectos

- Ya veo, con razón tenía algo de desespero por verte

- Si… Oye mamá, ¿Qué sabes sobre Grace? Creo que mi padre tenía un interés especial por ella ¿sabes por qué? – cuestiono como si fuera un tema de poca importancia

- Claro, tu padre le tenía mucho aprecio, siempre se identificaba mucho con ella, me refiero a las cosas duras que la pobre chica tuvo que vivir, desde el día que le hicieron la entrevista de trabajo supo que sería casi como su mano derecha, en todo lo que ha podido le ha tendido la mano, a ella y su familia, además que la chica es de sus mejores empleadas.

Asiento con la cabeza sintiéndome como la mierda más grande.