Un esposo para Elizabeth (COMPLETO) romance Capítulo 29

Narrador.

—Ustedes están mal informados, la señorita Paulina Rossini y yo hemos anulado nuestro compromiso — le respondió Gregory a los periodistas y Elizabeth no pudo contener su emoción, mostrando una amplia sonrisa— hoy quiero presentarle formalmente a mi novia la señorita Elizabeth Marít — les anunció Gregory sorprendiendo a Elizabeth quien se puso nerviosa al escuchar a Gregory a pesar de que él le había comentado que la presentaría cómo su mujer, ella pensó que eso era una estrategia de Gregory para poder tranquilizarla.

Salieron del restaurante evadiendo miles de preguntas con las que los periodistas los bombardearon.

Miami florida

¡¡Maldita sea que tonto fui al aceptar la propuesta de Samantha!! Se reclamaba Alex sentado en su oficina y es que Alex no ha podido sacarse aquella rubia de la cabeza, aunque no recuerda el acto sexual recuerda lo hermosa que se veía esta enojada, él sentía atracción por lo prepotente que se mostró Samantha.

—Será que me estoy enamorando de la hermana de ese desgraciado — exclamó Alex confundido ahora ya no tenía claro sus sentimientos.

Ahora se debatían entre Samantha y Elizabeth.

Italia.

Narra Elizabeth.

Llegamos al puerto para estrenar mi nuevo yate como me lo propuso Gregory, caminé a su lado o mejor dicho él me llevaba agarrada de la mano siendo sumamente cariñoso, sé que Gregory y yo somos muy diferentes, pero me gusta este hombre tan opuesto a mí, hasta hace poco me sentía muy molesta, pero he pensado que si quiero ser feliz tendré que dejar pasar muchas cosas para estar a su lado, quiero ser su mujer, su dueña y su esposa voy a luchar por Gregory no lo perderé porque con él me siento completa, es momento de que yo sea feliz, olvidaré mi venganza contra Edward y le pediré el divorcio para casarme con Gregory.

— Tierra llamando a Elizabeth — comentó Gregory ofreciéndome su mano para ayudarme a subir al hermoso yate.

— ja, ja, ja Gregory excúsame — le dije apenada mientras subía al yate, sintiendo el corazón latir tan fuerte que pensé que se me saldría de la caja torácica.

¡¡Vamos Elizabeth tú puedes¡¡Me animaba, pero mi cuerpo no estaba dispuesto a cooperar porque empecé a temblar como un pollito mojado.

—Vamos mi niña yo estoy aquí no tengas miedo yo siempre te voy a proteger — Gregory me cargó para llevarme a unos muebles sentándome en su regazo.

—Shss, ya no tengas miedo amor — siento vergüenza al saber que me estoy comportando como tonta.

—Ya estoy mejor gracias — le dije dándole un beso casto en los labios.

—No tienes por qué agradecerme, te admiro eres una mujer muy fuerte— lo miré confundida sin saber a qué Gregory se refería — yo te vi aquel día que conociste a mi hermano — me confesó Gregory acomodando unos mechones rebeldes detrás de mi oreja.

—¿Por qué nunca lo mencionaste? Me paré de su regazo poniendo cierta distancia — ¿Qué es todo esto Gregory? ¿Este siempre fue tu plan? — yo tenía tantas preguntas por hacerle.

¡¡No fue casualidad o cosa del destino!! Pensé sonriendo con ironía.

¡¡Que bruta Elizabeth te ha vuelto a enamorar de la persona equivocada!! Gregory conoce mi historia, de seguro quiso experimentar con una mujer enferma, para sumarme a su colección.

—Mami estás suponiendo cosas que no son — dijo Gregory y me tomó del mentón con delicadeza para que volteara a mirarlo, abrí la boca para volver a preguntarle, pero seguidamente fui silenciada por él cuando posó un dedo sobre mis labios.

—Ese día tenía deseos de ver a mi hermano y por casualidad te vi, pero en ese momento no sabía quién eras y aunque me llamó la atención ver a mi hermano con una chica, no te investigué cómo esa cabecita tuya está calculando — con su mano libre acariciaba mi cabeza, por momento siento que Gregory me trata como si yo fuera una niña — al día siguiente de haberte conocido en ese centro comercial, tuve que viajar para acá por motivos de trabajo y 2 meses después Dante me llamó para informarme sobre el escándalo en el cual Paulina se vio envuelta junto a Edward y fue en ese momento que yo te mandé a investigar porque sentí dudas por conocer a la persona que se había atrevido a hacer público tal noticia que de cierto modo me implicaba, Dante me envió toda tu información y no te puedo negar que en el primer momento que te vi sentí curiosidad por conocerte, sé de tu enfermedad y de todo el daño que te han hecho tu familia y Edward—

— ¿qué sentiste el día que me viste en el centro comercial?— no sé por qué quería escuchar su respuesta pero sentí curiosidad.

— solo vi una chica muy hermosa con ropa no adecuada para su edad — me respondió Gregory y no sé por qué en cierto sentido su respuesta no me simpatizó sé que en realidad me veía horrible.

¡¡Qué mentiroso!!

— eso quiere decir que el día que Dante te envío mis datos tú te propusiste meterme a tu cama como una más de tus amantes y no acudiste a mí por qué estabas enamorado — Gregory sonrió al escuchar mis dudas.

— Elizabeth yo no me enamoré de tu belleza si eso es lo que te molesta, yo me enamoré de tu personalidad de la Elizabeth rebelde que me retó sin conocerme, de esa chica que estando ebria se quedó dormida en mis brazos — Gregory acortó nuestra distancia deslizando su mano por mi cadera acercándome más a él, haciéndome sentir su pecho duro — me gustaste desde que te vi en esa foto, pero en ese momento no te amaba o quizás sí, solo que en ese momento no lo sabía o no lo quise reconocer ¿sabes por qué? — yo negué moviendo la cabeza para los lados — porque dejé todo botado aquí solo para ir a Miami a conocerte, ese día estaba ansioso y mandé a preparar mi avión privado, seguido este aterrizó en suelo americano tomé mi coche y me fui directo a tu casa a buscarte — me dijo Gregory sonriendo como si ese recuerdo le causara gracia y a mí me encantó escuchar su confesión, me pareció romántica.

Narrador.

—Ahora que yo aclaré tus dudas yo también quiero hacerte una pregunta — Gregory tenía una duda que le rondaba en su cabeza desde hace tiempo y aunque él siempre ha sido un hombre seguro de sí mismo con Elizabeth tenía cierta duda.

—Dale, pregúntame lo que quieras— Elizabeth estaba sumamente tranquila dispuesta a responder cualquier pregunta que Gregory le hiciera porque ella no tenía nada que ocultar o eso pensaba.

¡¡Yo soy un libro abierto!! Pensó Elizabeth.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Un esposo para Elizabeth (COMPLETO)