VENDIDA (COMPLETA) romance Capítulo 54

NARRA RAQUEL

Erick se marchó y entré al edificio. Saludé al vigilante y caminé al ascensor, este se abrió al instante, entré y apreté el botón del quinto piso, segundos después se abrió. Salí del elevador, saqué de mi bolso las llaves del departamento, abrí la puerta y pase.

 

Subí las escaleras y caminé a mi cuarto, cuando entré me senté en la cama y dejé mi bolso encima de la mesita de noche, luego comencé a quitarme los zapatos. Y una canción de Harry Styles empezó a sonar.

 

Saqué mi celular del bolso y atendí la llamada

 

— ¿Bueno? —contesté.

 

Xx: ¿Cómo estás, hermosa? —Habló Nicolás.

 

—Bien, gracias —respondí. — ¿Y eso que me llamas?

 

Nicolás: Quería saber cómo estabas y hacerte una invitación, pero si estas ocupada olvídalo. —Dijo él, de fondo se escuchaban algunas voces y música muy alta, apenas podía escucharlo a él. Parecía estar en una fiesta

 

—No lo estoy, tranquilo. ¿Una invitación a dónde? —pregunté y levanté una ceja.

 

Nicolás: A la despedida que me hicieron unos amigos, mañana por la tarde viajaré a Canadá

 

— ¿En serio? — pregunté sorprendida. — ¿Y eso? —Fruncí el ceño.

 

Nicolás: Si, cuestiones de mi trabajo y me quedaré definitivamente allá. Por eso quería saber si puedes venir

 

— Ahm, es que estoy can... —Dije, pero él me interrumpió

 

Nicolás: Por favor, hazlo por mí. Nada me encantaría más que estuvieras aquí

 

. –Suspiré—. Está bien, pásame la dirección del club y en media hora estaré ahí

 

Nicolás: De acuerdo, ahora te envió el mensaje. Te espero, preciosa. —Habló, luego el sonido de la línea muerta se escuchó tras la bocina.

 

Separé el celular de mi oreja y lo dejé en la cama, segundos después recibí un mensaje con la dirección del club donde él estaba.

 

No tenía ánimos de nada, lo único que quería era acostarme a descansar, pero a pesar de eso quise ir por la amistad que tenemos y porque probablemente no volveré a verlo por un largo tiempo.

 

Me levanté y me dirigí al closet, tardé varios minutos buscando que ponerme hasta que encontré un vestido precioso de color rojo, echo con lentejuelas y un poco suelto; deje el vestido en mi cama, agarré una toalla limpia y pase al baño de mi cuarto

 

Me bañé y me cambié rápidamente, después de colocarme el vestido me puse unos tacones negros no tan altos. Me maquille solo un poco, tampoco quería parecer payaso, planche mi cabello y lo dejé suelto, me eché perfume y tomé mi bolso con mi celular adentro, luego salí del cuarto.

 

Antes de bajar pase por la habitación de Joel, él no debe de saber ni siquiera que llegué, toqué la puerta dos veces, pero no me abrió nadie, quizás no esté ahí sino en la sala. Así que decidí bajar.

 

— ¡Joel! —Lo llamé después de bajar las escaleras y no verlo en la sala.

 

Joel: ¡Aquí estoy! —Gritó desde la cocina.

 

Caminé hasta la cocina, cuando entré pude ver a Joel con un delantal puesto picando algunas papas.

 

— ¡Joel! —Lo llamé después de bajar las escaleras y no verlo en la sala.

 

Joel: ¡Aquí estoy! —Gritó desde la cocina.

 

Caminé hasta la cocina, cuando entré pude ver a Joel con un delantal puesto picando algunas papas.

 

Joel: ¿Acabas de llegar? —preguntó al verme entrar a la cocina.

 

—No, llegue hace como media hora

 

Joel: Ah, y por como vistes supongo que saldrás otra vez

 

—De hecho, sí. Saldré con Nicolás

 

Joel: Oh, que bien —sonrió.

 

A Joel le hacía mucha ilusión que yo rehiciera mi vida, pero lejos de Erick. Para él era perfecto que saliera a divertirme ya sea sola o con alguien más que lograra hacer que me distrajera ya que pensaba que así podría olvidarme de una vez por todas de Erick y quizás conocer a alguien más que si me valorara, y me quisiera.

 

Joel: Por cierto, ¿no me dirás cuál fue el resultado del examen? —pregunto, luego lanzó el resto de las papas que había pelado y cortado al sartén con aceite.

 

—No, te cuento mañana mejor, se me hace tarde

 

Joel: Como quieras, sólo no llegues tarde y cuídate, por favor —me pidió. —Cualquier cosa me envías un mensaje o me llamas.

 

—Está bien, adiós. —Sonreí y besé su mejilla

 

Salí del departamento y me subí al elevador, apreté el botón de PB y cuando se abrió salí del edificio. Afuera espere unos minutos hasta que llego el taxi que llame, me subí en la parte trasera y el señor comenzó a manejar mientras le decía a donde quería ir.

 

Minutos después

 

El taxista se detuvo en el club y me baje después de pagarle. Mire detenidamente el lugar y entré, el lugar estaba repleto de muchas personas borrachas, unos bailaban, otros se besaban como si no hubiera un mañana y otros simplemente estaban sentados conversando. Busqué a Nicolás entre la multitud, pero no lo encontré así que decidí enviarle un mensaje de texto

 

RAQUEL

 

¿Dónde estás? Acabo de llegar y no te veo.

 

NICOLÁS

 

Justo frente a ti, en la barra

 

Rápidamente mire al frente y él me miraba desde la barra con una sonrisa, le sonreí, guarde mi celular en mi bolso y me acerqué a él.

 

—Hola Nicolás —Le sonreí dejando un beso en su mejilla

 

Nicolás: Hola —sonrió. — Estas realmente hermosa —Dijo mirándome de pies a cabeza

 

—Oh, gracias —Hablé un poco sonrojada. — ¿Dónde están tus amigos? —pregunté sentándome a su lado en una silla de la barra.

 

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: VENDIDA (COMPLETA)