PDV Teresa
Tomas y Mía
continuaron bailando un tiempo más hasta que los músicos terminaron la canción,
después de eso, Mía hizo algunos gestos y algunas parejas se adelantaron y se
colocaron en medio de la pista, y en medio de eso Tomas se separó de Mía y
volvió a nuestra mesa.
— ¿Ya van a
empezar el evento Tomas? —le pregunto Clara justo cuando Tomas llego junto a
nosotras.
—Si —le respondió
secamente, sentándose a mi lado.
—Vamos a
participar cariño, no seas malo conmigo, ya bailaste con Mía, ¿Por qué no
puedes hacerlo conmigo?
—Mía, es Mía, tu
eres tú, no esperes que vaya a participar en ese evento contigo Clara —le dijo
Tomas.
No pude evitar
pensar en las palabras que me dijo Clara con respecto a Mía, se había metido en
mi cabeza y ahora no podía quitarme el pensamiento sobre que estará pasando por
la cabeza de Mía en estos momentos.
Hasta ahora se
comportó bien… pero ya no sé qué pensar.
— ¿Y con quien
participaras entonces? ¿No iras a participar con Teresa? ¿O lo estás pensando?
—le pregunto Clara, mientras miraba a Tomas con una cara de falso terror.
— ¿Qué tiene de
malo que lo haga conmigo Clara?
El tono con lo
cual dijo fue muy burlista.
—Teresa, no te
ofendas, ¿Me prometes que no lo harás?
—Solo habla y ya.
—Bueno, estos
bailes son bastante complicados y no espero que puedas hacerlo bien, no quiero
que mi esposo pase vergüenza si terminas pisándolo o cayéndote encima de él por
no saber dónde mover tus pies.
— ¡Eh estado
practicando mucho en el último mes todo esos bailes de etiqueta, Clara! ¿Quién
eres para decir que no lo puedo hacer y que hare que Tomas pase vergüenza?
—Teresa, ¿Sabes
quién fue la ganadora del baile del año pasado? —me pregunto Clara, mientras se
señalaba a ella misma colocando su dedo por encima de su cabeza.
—Eso fue hace 1
año Clara, no puedes usar eso ahora.
—Claro que puedo
Teresa, yo gane el año pasado y de seguro podría hacerlo este año también,
bueno, si mi esposito por fin se decide en ser bueno con su propia esposa,
ambos podríamos ir y ganar ese evento.
—No podrás bailar
con Tomas, él y yo participaremos juntos le dije a Clara, en un impulso que
tuve.
— ¿Vas a
participar en serio? —me pregunto Clara, su mirada parecía bastante sorprendida.
—Sí, quédate aquí
sentada sola mientras nos ves bailar —le dije a Clara, mientras tomaba a Tomas
del brazo y lo jalaba para que se fuera conmigo.
Tomas me miro con
algo de sorpresa, pero al final me hizo caso y se levantó conmigo.
— ¿Estas segura
de esto Teresa? —me pregunto Tomas mientras caminábamos hacia la pista, donde
ya habían varias parejas listas para empezar.
—Si… eso creo…
Me deje llevar
por un impulso y ahora me metí en esto, mientras avanzaba de verdad hacia la
pista, no pude evita tener un par de dudas, pero y había llegado muy lejos y si
me retiraba, Clara se iba a burlar de mí.
Y ahora que lo
pensaba, puede que ella me hubiera provocado para ir a bailar con Tomas, quizás
pensara que no lo iba a hacer bien y me provoco para que fuera a bailar sin saber
cómo hacerlo.
No pensé en esto
antes, pero quizás era posible, pero de nuevo había llegado lejos en esto, y no
podía retirarme a estas alturas.
Cuando llegamos a
junto con las demás parejas, muchos de los hombres allí nos observaron, sus
miradas debieron haber sido para Tomas, él fue el ganador del año pasado junto
con Clara y eso sin mencionar que cuando bailo junto con Mía, llamo mucho la
atención.
Mía también nos dedicó
una mirada, parecía algo sorprendida, pero poco después la aparto y volvió a la
normalidad.
El evento
finalmente empezó y tuve los nervios al límite, pude sentir como mi corazón latía
frenéticamente, pero Tomas apretó mi mano y me relaje un poco, gire mi vista
hacia Clara, y esta solo nos miraba sin mucha emoción, no sabía que pensaba.
Cuando Mía dio la
señal, todas las parejas empezaron con los suyo, empezaríamos por rondas, cada
ronda tenía 2 parejas y la pareja que ganara avanzaría a la siguiente ronda y así
sucesivamente hasta llegar a la final.
Por suerte no fui
la primera y pude ver como los demás lo hacían, los bailes que hacían era
famosos entre los de la alta sociedad, bailes de etiqueta y de gala, Tomas me
los había enseñado en el último mes, habíamos dedicado varias horas al día
junto con nuestra profesora para que pudiera dominar esos bailes de forma
correcta.
Después de un par
de rondas, llego nuestro turno, estuve nerviosa, pero Tomas me tranquilizo,
recordé en mi mente como fue que practicamos juntos en ese salón de baile y
también en su casa, cuando dieron la señal empezamos.
Tuve nervios al
principio, pero pronto, las otras personas desaparecieron de mi vista y me
enfoque por completo solo en Tomas y en lo que estábamos haciendo, ya no podía
ver a los que nos rodeaban y solo podía ver a Tomas.
Nuestros movimientos
juntos fueron muy fluidos, aun más que cuando practicamos con nuestra
profesora, todo salió de forma natural, me sentí muy bien al bailar de forma
oficial junto con Tomas por primera vez ante el público.
Para cuando me di
cuenta, nuestro baile había terminado, estaba un poco sudada y los brazos de
Tomas, me sostenían, pero estaba bastante contenta, supe que lo habíamos hecho
bien, y más cuando nos hicieron pasar a la 2 ronda.
Seguí bailando
junto con Tomas durante el resto del evento de la misma forma, cada vez que
empezábamos, mi atención solo se enfocó en él y lo que hacíamos, y perdía de
vista a los demás, solo podía volver a mirarlos después de terminar.
Fue bastante
divertido participar en este evento, podía sentir como la adrenalina invadía mi
que Mía fue tacaña con los premios… quizás fuera cierto.
Aun así, 100.000
dólares no eran nada para él, pero eran mucho para mí, no me sentía muy cómoda
en aceptarlo todo yo sola.
—Ya tómalo y ya
Teresa, en una de mis tarjetas que tengo en estos momentos tengo más que eso,
solo consérvalo y ya, no es nada —me dijo Tomas mientras me colocaba el cheque
de Mía en mis 2 manos y me hacía cerrarlas.
Parecía que no
iba a ceder en esto.
—Bien Tomas, pero
te debo un favor entonces.
—Te tomare la
palabra y me lo cobrare más tarde.
Maldición… creo
que no debí apresurarme tanto.
Tomas y yo
llegamos a nuestra mesa y Clara no nos dijo nada, pensaba que me diría algo por
quedar en 2 lugar, pero solo se quedo callada unos momentos antes de empezar a
hablar con Tomas otra vez de cosas sobre las cuales no estaba familiarizada.
No me importo
mucho Clara en estos momentos, estaba algo emocionada por el dinero que obtuve
por bailar en ese evento, con ese dinero podría pagar la hipoteca de mi casa,
de esa forma mi madre después de curarse podría volver a una casa sin deudas,
eso me alegro bastante.
Me alegro que
Clara me haya incitado a participar en esto, de no ser por ella, quizás no
hubiera participado, la pase bastante bien y además de eso gane bastante, fue
una gran ocasión.
Mía regreso
pronto con nosotros, y fue seguida de un pequeña horda de seguidores, pronto
íbamos a cantar cumpleaños y ahora la cumpleañera estaba recibiendo cada vez
más atención.
Los meseros se la
pasaban rodeándonos y entregándonos bebidas y comida, y según escuche el pastel
iba a ser uno muy grande, uno digno de alguien como Mía.
Había muchas
personas desconocidas a mi alrededor y hablaban de temas que yo no conocía, y
eso sin mencionar que me dejaban un poco de lado, a fin de cuentas yo era la
menos conocida aquí, de no ser por Tomas de seguro no llamaría la atención.
Nuestra mesa se había
llenado y por la falta de asientos muchas personas estaban paradas a nuestro
alrededor, era algo sofocante estar de ese modo, pero pronto le cantarían
cumpleaños a Mía y no podía retirarme antes de eso.
PDV Saint
— ¿Estás seguro
de que quiere ir señor? —me pregunto mi chofer mientras me montaba en mi auto.
—Sí, vamos, no
tengo nada mejor que hacer, creo que iré a arruinarle un poco el cumpleaños a
mi hermanita, ya deben estar por cantarle cumpleaños, conduce rápido, quiero
ver su expresión al verme en su fiesta —le dije al chofer mientras me reía un
poco.
Después de decir
esto último, el chofer empezó a conducir, Mía no me había invitado a su fiesta
de cumpleaños, pero al final como era yo, decidí ir sin invitación y hacerle
pasar un mal rato a mi hermana.
De seguro hará un
puchero cuando me veía justo mientras le canta cumpleaños felices.
Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: Vendiendo mi virginidad... AL CEO