Vendiendo mi virginidad... AL CEO romance Capítulo 157

PDV Teresa

—Bien Vincent, vamos, hagamos lo que dices a ver si ya no vuelves a ser una tontería similar a esto que hiciste.

—Sígueme.

—Esperen ustedes 2, escúchenme un momento, ustedes no pueden…

Antes de terminar lo que iba decir, vi como Tomas y Vincent se iban de la oficina, los llame, pero ninguno se detuvo.

Al final salieron de la oficina de Vincent mientras yo los miraba, estaba algo frustrada.

— ¡Teresa! ¡¿Vienes o te que quedas?! —me grito Tomas.

Este último y Vincent ya había salido de su oficina…

Me quede viendo en su dirección unos momentos, pero al final los seguí… tuve curiosidad por ver que iban a ser este par, cuando ambos estaban juntos no parecían ser exactamente normales.

Tomas, Vincent y yo salimos de la empresa de este último, nos montamos en el auto de Tomas, no sé qué hablaron ellos 2 mientras yo no estaba cerca, pero Tomas empezó a conducir a penas nos montamos los 3.

En el camino quise decir algo, pero estos 2 se la pasaron interrumpiéndome, cada vez que pensaba que se habían quedado callados e iba aprovechar para hablar, uno de los 2 terminaba por interrumpirme diciendo cosas que personales que solo debían saber ellos 2, por lo que me perdí en su conversación inconstante.

Mientras más pasaba tiempo con ellos 2, más me preocupaba… su forma de discutir los haría ver como si tuvieran algo más entre ellos que solo “amistad”…

Duramos en el auto un tiempo hasta que llegamos a cierto lugar, parecía ser una especie de gimnasio, pero estaba vacío.

Los 3 caminamos por el gimnasio hasta que llegamos a una zona llena de colchonetas en el suelo, los 2 tomaron unas ropas que estaban colgadas por allí, no pude soportarlo más y alce mi voz para preguntarles por este lugar.

Resulto que era un gimnasio privado que les pertenecía a ambos, venían aquí desde hacía años cuando lo compraron, cuando se les antojaba venían aquí ya sea solos o acompañados por conocidos.

Después de que me dijeran esto ambos se fueron a cambiar y se pusieron una especie de traje de lucha libre… aunque más bien parecían una especie de mallas, ambos se fueron a una de las colchonetas del lugar y empezaron a verse.

Parece que iban a luchar por puntos, y el que sumara más ganaba, aunque más que luchar, lo único que hicieron fue verse mientras giraban por la colchoneta, decían tonterías o cosas personales mientras hacían este absurdo frente a mí.

En algunos intentos trataban de decir cosas “amenazantes”, quizás para intimidarse, pero no sé, el ambiente que daban ese par cuando estaban juntos hacia que no pudiera tomar mucho de lo que decían serio.

—Espero que estés listo para todo esto, Tomas, mi hermana puede que no lo sepa, pero mi papa es tremendo mafioso, y me entreno para poder ser igual a él —Vincent se señaló su cuerpo mientras decía esto.

— ¿Y crees que eso me va a asustar? Yo practique karate Vincent.

—No jodas Tomas, si me contaste que siempre te ibas antes de terminarlo, ni siquiera llegaste a cinta amarilla.

—Pero aun así lo practique.

—Y yo vi Karate Kid Tomas, te apuesto que lo hago mejor que tú.

—Por que veas una película no significaba que lo puedas hacer Vincent.

— ¿Ah sí? ¿Y quién lo decidió?

—Me pregunto que hará la gente normal en un sábado como este —pensé, mientras veía a este par seguir haciendo… lo que sea que hacían.

No hubiera sido tan malo si de verdad se hubieran puesto a hacer lucha libre como se supone que debieron haber hecho desde un principio, pero este par en lugar de pelear lo único que hicieron fue caminar en círculos mientras se veían y se decían cosas.

A veces eran leves insultos, otras veces cosas personales y las otras veces solo se decían cosas tontas, fue estúpido verlos de ese modo.

Termine por llamar a Daisy a ver si me ayudaba aquí, había tratado de hablarles pero ninguno quiso escucharme.

Ambos parecieron que estaba dispuestos a resolver las cosas entre ellos sin siquiera preguntarme a mí que quería, no parecían tener intención de escucharme, sola quizás no lograra nada, quizás con Daisy a mi lado podría hacer las cosas más fáciles.

Daisy llego al poco rato, entro al gimnasio y no tardó mucho en encontrarme, camino hacia a mí, y de inmediato me pregunto qué era lo que estaba pasando aquí.

— ¿Por qué no le preguntas al Chavo y al Chapulín colorado que están allí? —le dije mientras señale a Tomas y Vincent.

Ambos habían estado haciendo esa tontería que hacían durante 1 hora, puede que más.

Que pasaba con sus cabezas, eso no lo sabía.

— ¿Cómo? —murmuro Daisy, mientras giraba su vista hacia el par delante nuestro.

Estaba perdida, le explique con detalle todo lo que pasaba, y no tardó mucho en regañarme por permitir que pasara esto en primer lugar.

Según ella me hubiera ahorrado 1 hora de mi tiempo si hubiera detenido a esos 2 antes de salir de la oficina de Vincent y dejar clara mi postura.

Lo decía como si fuera tan fácil.

— ¿Crees que no lo eh intentado Daisy? ¿De verdad piensas que no trate?

—Si de verdad lo hiciste ¿Por qué estamos aquí Teresa? ¿Por qué esos 2 están allí entones si quisiste dejar clara tu postura?

—No es tan fácil Daisy, trate de hacerlo, trate de hablarles, pero ese par no quiso escucharme, lo trate varias veces pero no me hacen caso.

—Eso es porque eres muy blanda y boba Teresa, tienes que ser más firme ¿Lo entiendes? Ponerles la mano dura a ambos.

— ¿Y cómo hago eso?

—Bueno… déjame ver…

Daisy miro un par de veces alrededor del lugar, se detuvo al poco tiempo.

—Bueno mira esto.

Daisy tomo un tubo que se encontraba en el lugar donde estábamos y después camino hacia Tomas y Vincent los cuales seguían dando círculos en la colchoneta, cuando llego les dio a ambos un golpe rápido detrás de sus cabezas, eso llamo su atención.

— ¡Sera mejor que se detengan ahora mismo!

— ¿Y qué haces tú…? —murmuro Tomas.

— ¡A mi será mejor que no me contesten porque si no les voy a meter este fierro por el culo para que sepan finalmente lo que sentimos nosotras cuando nos la meten por allí atrás! ¡A ver si siguen con ese fetiche que ambos tienen! —Daisy los miro a los 2 mientras les mostraba el tubo que tenía en sus manos.

Estos 3 podían armar un buen trio entre si…

— ¿Y se supone que eso debe asustarnos? —el tono de Vincent era burlesco.

—Ten cuidado como me hables Vincent, mira que yo no soy Teresa, y yo si te voy a dar tus buenos golpes si te pasas, no me gustó nada esa molesta broma que le hiciste a esa boba.

— ¡Ya cierren la boca! —grite.

Otra vez estos 2 habían vuelto a interrumpirme, 1 vez no era problema, pero ya lo habían hecho una y otra vez y eso ya me canso.

Vincent y Tomas se giraron para verme cuando dije esto.

—Bueno, yo no estoy al tanto de todo, pero hasta donde tengo entendido, todo esto paso por un tal video de Tomas y Teresa juntos ¿Cierto? —pregunto Daisy.

—Cierto —dijo Tomas.

—Pues bien, y el problema es porque Vincent vio a Tomas y Teresa juntos en ese video ¿Verdad?

—Pues si —dijo Vincent.

—Ya veo… ¿Puedo ver ese video?

—Daisy…

—Vamos Teresa, necesito una mejor compresión de todo.

No sabía si mostrárselo o no…

—Como sea, este es el video que me enviaron —Vincent le mostro su teléfono a Daisy después de decir esto último.

Daisy miro con atención el video, y mientras eso pasaba, me miro de forma constante a mí, sus ojos estaba abiertos como platos.

—Joder Teresa, eres más atrevida de lo que pensé, ni yo he hecho eso, y mira que te lo digo yo.

— ¿Ahora entiendes el por qué me enoje Daisy? Imagínate el recibir esta cosa en plena reunión, nada más imagínate eso.

— ¿Y porque te enojas  por un video privado y personal entre ellos, Vincent? que yo sepa, tú y Teresa aun no tienen nada formal todavía y no hay ninguna clase de engaño aquí… ¿Cierto?

—Pues si… pero… Tomas y ella saben que él y yo aún hemos decidido para quien será y me enviaron un video de este tipo mientras trabajaba, ¿Cómo no me iba a disgustar?... al menos se debió esperar a ver que decidíamos él y yo.

—A ver a ver Vincent, vamos a analizar un par de cosas, y empecemos con eso de la decisión, ¿Cómo es eso de que tú y Tomas son los que tienen que decidir con quién debe estar Teresa? ¿Si sabes que la decisión debe ser suya?

—Pues sí, pero… no entiendes, es algo entre nosotros.

—Como sea, no importa a que arreglo lleguen ustedes 2, al final no importara si Teresa no comparte el resultado al cual llegaron, ¿Entiendes eso Vincent? no importa que hagan si ella al final no sigue su decisión, lo primero que debieron haber hecho es preguntarle a ella y que ella decida, se hubieran ahorrado tanto problema si hicieron eso… por suerte podemos resolver eso ahora.

— ¿A qué te refieres Daisy? —le pregunto Vincent mientras la miraba fijo.

—Bueno, aquí están los 3 involucrados, y podemos resolver esto ahora, vamos Teresa, di, ¿Con cuál de este par de raros te vas a quedar? —me pregunto Daisy mientras se giraba.

—Oye ¿Eso de donde salio?—dijeron ambos al mismo tiempo mientras miraban a Daisy.

Solo duro unos instantes, ya que poco después la mirada de ambos se giró hacia mí, en especial la de Vincent.

Vacile un instante, pero después fije mi mirada en este último.

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