PDV Teresa
El tiempo había pasado rápido, habían pasado 3 meses desde la celebración en el restaurante y en ese tiempo pase al siguiente semestre de mi universidad, seguía teniendo una mala fama, pero ya me había acostumbrado, mis notas bajaron un poco por tantas cosas que pasaron, mi mama me regaño mucho por eso y me hizo prometer que este semestre lo haría mejor.
Había salido junto con Tomas todo este tiempo, y me fue algo difícil cuadrar mis tiempos, nunca había salido con alguien por tanto tiempo, por lo general mis relaciones de antes nunca duraban mucho, esto era nuevo para mí.
No sé cómo le hacía Daisy, de algún modo ella podía mantener un promedio bastante bueno en sus notas a pesar de lo “activa” que era, fue bastante sorprendente.
La familia de Tomas seguía sin dirigirme la palabra, también logre acostumbrarme a eso en cierta manera, pero hubiera querido que fuera diferente.
Mi relación con los Saint era bastante buena a diferencia de mi relación con Miller, cuando no estaba en la universidad, o con Tomas, o con Daisy, pasaba gran parte de mi tiempo con Vincent y Mía, en especial con esta última.
A Daisy por alguna razón seguía sin agradarle Mía, había estado tratando de acercarlas, pero al final no sirvió de nada, y tenía que dividir mi tiempo entre las 2 lo máximo posible.
El nuevo año ya pronto se acercaba, y los festejos ya estaban empezando, los centros comerciales estaban llenos de adornos navideños, e incluso ya habían colocado el árbol en todo el centro.
Mientras la gente se preparaba para la navidad y después de eso el año nuevo, yo me estaba preparando para otra cosa.
En estos últimos 3 meses, había estado pensando que hacer con el dinero que Tomas me había dado por el contrato que habíamos cumplido hacía tiempo, tenía en total más de 700.000 dólares en mi cuenta bancaria y aun no lo había utilizado del todo.
Solo había estado haciendo pequeños gastos en este tiempo, más que todo comida y cosas pequeñas, había estado guardando ese dinero hasta que supiera en que invertirlo.
700.000 dólares parecía ser mucho, pero en realidad, a largo plazo, no era nada, si de verdad me lo proponía gastar, podría terminar por gastarlo todo en 1 o 2 años como mucho, por eso había estado teniendo cuidado y no lo sacaba de mi cuenta.
Las palabras que la madre de Tomas me dijo durante la fiesta de los Saint, me afectaron, Clara a mi edad ya había logrado más que mi madre en toda su vida, por hablar de mí, lo máximo que había hecho hasta ahora era el contrato que hice para Vincent y la armería con la cual se asoció, así como también el otro contrato con la empresa de aseo urbano, en la cual me ayudo Mía.
Si quitaba mi trabajo para los Saint, lo máximo que había hecho en mi vida era trabajar de mesera, mientras que la ex de Tomas ya era gerente de varios restaurantes y negocios, necesitaba empezar a despertar y moverme más.
Mi situación actual era buena, mi madre estaba sana y ya no teníamos serios problemas económicos, por lo que tenía tiempo para ver que hacía, lo primero que pensé fue buscar la ayuda de Tomas para ver en que podía invertir el dinero que me dio por el contrato y lo que gane en el baile de Mía.
Él había ayudado a Clara a llegar a donde estaba, debía tener experiencia en estas cosas y podría ayudarme a despegar como lo hice con ella, fue mi 1 opción, pero después decidí que no.
Si Tomas se metía en medio, lo más probable era que le diera más motivos a su familia para hablar a mis espaldas y decir varias cosas de mí, no quería darles más razones para criticarme, por lo que en lugar de ir con Tomas, fui con Vincent y Mía.
Estos 2 no tuvieron problemas en aconsejarme, e incluso fueron más allá de eso, y decidieron presentarme a su padre y ver si podían lograr que me vendiera una parte de alguna de sus empresas.
Según ellos iba a ser buena inversión, y daría frutos en el futuro, Clara también se había asociado con ello de esa forma.
Después de salir de la universidad, Tomas me busco y nos pusimos en marcha para mi reunión con los Saint, en el camino este último no perdió la oportunidad para tratar de convencerme de me asociara con él en lugar de ir con la familia de Vincent.
Habíamos tenido esta discusión ya varias veces.
—Teresa, aun estas a tiempo de cortar la reunión con el padre de Vincent, solo tienes que darle una llamada, no, de hecho, yo puedo hacerlo por ti.
—No voy a hacer eso Tomas, ya todo está arreglado, y ya le dije a Vincent y Mía que iba a asociarme con ellos.
—Si no hay nada escrito, no hay nada que te impida cortar las cosas ahora Teresa, vamos.
— ¿Por qué no quieres que me asocie con ellos?
—Te ofrecí invertir conmigo y tú no quisiste, ¿Por qué no quieres asociarte conmigo?
—No quiero darle más razones para que tu familia hable más de mi Tomas.
— ¿Desde cuándo te importa tanto lo que ellos piensen? Ignóralos Teresa.
—Como si fuera tan fácil, ¿Qué vamos a hacer en las reuniones importantes? Dime, ¿Con quién vas a celebrar el día de acción de gracias? ¿Conmigo o con ellos? ¿Con quién vas a ir?
—…
— ¿Ves? Si sigo llevándome mal con ellos, este problema se seguirá presentando en el futuro, después de esto es navidad, ¿Con quién pasaras la fiesta? ¿Con quién pasaras año nuevo Tomas?
—Está bien, está bien, entiendo Teresa, ya entiendo tu punto.
—Que bien, quiero demostrarle a tu madre que puedo ser independiente por mí misma, déjame probar eso.
—Bien, pero sigue sin gustarme, ya me rechazaste 1 de las propuestas que te pedí Teresa, ahora dime ¿Vas a rechazar lo otro que te propuse?
Mi cuerpo tembló un poco al escuchar eso último.
Tomas me había propuesto recientemente que me mudara con él a su casa.
Nunca antes había vivido por mi sola, y la idea de vivir con él me daba algo de miedo.
Según Daisy, vivir en pareja era difícil, y si no lográbamos hacerlo bien, entonces todo se iba a arruinar.
No quería eso, me daba miedo, por eso aún no le había dado respuesta.
—Sigo pensándolo —le conteste a Tomas, mientras giraba mis ojos hacia la ventana.
No quería verlo directamente.
—Ya van varios días Teresa, tienes que darme una respuesta —Tomas me agito por los hombros mientras decía eso.
— ¿No te parece que es muy pronto todavía?
—Pensaba que no ibas a llegar Teresa —me dijo Vincent mientras me abrazaba.
—No llegue tan tarde.
—Pero de todas formas se tardaron más de lo debido ¿Qué estuvieron haciendo? No habrá aprovechado para tener un rapidin en el auto —me dijo Mia.
Vincent frunció un poco el ceño como un niño al oír eso, me apresure en negarlo.
—Vamos, te está esperando Teresa, estas 5 minutos tarde y no es bueno hacerle esperar —me dijo Mía antes de tomarme de la mano y jalarme con ella.
—Tú te quedas aquí Tomas.
Vincent nos persiguió después de decir eso último, me gire y pude ver que Tomas se quedó donde lo deje, pude ver que me deseo suerte con los ojos a su manera.
Gire mi vista y me concentre en lo que iba a hacer a partir de ahora.
Bajo la guía Vincent y Mía, entre en la oficina de su padre, si recordaba bien, se llamaba Eliseo, un hombre raro, ellos 2 me habían contado sobre èl, Tomas también lo hizo, fue uno de los primeros socios que tuvo en sus comienzos, y en la actualidad era su principal aliado comercial.
Se parecía a Vincent, era de mediana edad, pero se veía atractivo a pesar de eso, giro su mirada en mí, y fue intimidante, tarde unos instantes en poder acostumbrarme a su mirada y poco después fui hacia él.
El padre de estos 2 se veía más intimidante de cerca, era incomodo estar cerca de èl.
Nos saludamos, su voz tenía un cierto porte en ella, me pregunto varias cosas, la mitad de ellas ni siquiera las entendí, eran muy complicadas, al final Mía tuvo que ayudarme y le paso la propuesta a su padre.
Este último solo la ojeo, y no tardo en decirme que de no ser por la recomendación de Vincent, él no estaría aquí conmigo, su sinceridad fue demasiado directa, me pego un poco de curiosidad el que no nombrara a Mía, de todas formas seguimos hablando un poco.
Al final dijo que aceptaría que yo invirtiera en su grupo empresarial… otros empresarios matarían por conseguir inversores para sus grupos… pero él “aceptaría” que yo invirtiera en él suyo.
Vincent se encargó del resto, y todo marcho bien, su padre me dio varios documentos y los firme, me dijo después de firmarlos, que el contrato principal se firmaría después de que pasara por el periodo de prueba y pudiera comprobar algunas cosas.
Después de eso me despidió a mí y a sus hijos, según tenía muchas cosas que hacer…
Al salir de su oficina, finalmente me relaje, el papa de ellos 2 era muy intimidante para mí y hacia que las personas se sintieran tensas a su alrededor, al menos así era según mi impresión, después de eso, vino la alegría.
Grite en voz baja con cierta emoción, estaba emocionada por como resultaron las cosas, Vincent y Mía me felicitaron, vi a Tomas acercarse a mi mientras celebrara.
Debido al impulso que sentía, termine por abrazarlo y darle 1 beso por la emoción, después de separar nuestros labios, le conté emocionada lo que había pasado.
Tomas se alegró por mí, y me dijo que debíamos celebrar la ocasión, aunque pronto el tema se desvió hacia otra parte.
— ¿Qué te parece si nos vamos de viaje un tiempo Teresa? Así tu mama podría acostumbrarse desde ahora a no tenerte en casa todas las noches y sentir que ya estas grande.
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