PDV Tomas
— ¿Cómo sabes que estoy en casa?
—Tranquilo cariño, en esta ocasión no eh usado cámaras para poder saberlo, no te preocupes por eso.
—Dime.
—Tomas, solo abre ¿Quieres? Hay que hablar, ¿Quieres que este aquí todo el día esperándote?
—… Bien, entra, que sea rápido.
Después de decir eso último, oprimo los botones de forma que Clara pudiera entrar a mi casa… no tenía intención de que pudiera hablar con el personal, no quería que se repitiera la misma situación que con Sarah, así que fui a recibirla yo misma.
Poco después de llegar a la puerta, Clara toco, le abrí, y ella entro, trato de recibirme con un beso, pero yo la aparte.
— ¿Por qué siempre tan frio? —me dijo.
—Ve al punto Clara y terminemos con esto.
—Bien, bien, sigues siendo muy malo conmigo a pesar de todo.
Clara fue hacia la sala después de decir eso último, yo la mire unos momentos antes de cerrar la puerta.
— ¿Y bien? ¿Qué es lo que quieres aquí?
—Necesito hablar contigo sobre ciertos temas, la información debe estar en tu computadora, vamos allá —me dijo Clara antes de empezar a subir rápidamente las escaleras hacia arriba.
La mire por unos momentos antes de seguirla, subimos juntos las escaleras en un relativo silencio, y justo cuando estábamos a punto de llegar a mi habitación, recordé cierto asunto.
Ese asunto era que las cosas de Teresa se habían mezclado con las mías en mi habitación…
—Espera —le dije a Clara, justo cuando ya tenía su mano en la perilla.
— ¿Y eso por qué?
—Por qué…
Antes de poder terminar lo que iba a decir, Clara abrió la puerta sin tardar ni 1 segundo, ni siquiera le importo lo que le había dicho, eso me hizo fruncir el ceño y más por que no espero ni un momento antes de entrar.
Le dije unas palabras por eso, pero Clara se detuvo no mucho después de avanzar, su mirada se mantuvo fija un instante antes de recorrer la habitación con sus ojos de forma muy rápida.
No tardo mucho antes de girar su vista hacia mí.
—Tu cuarto luce diferente a lo usual —fue lo que me dijo tras mirarnos.
—Sí, lo sé.
— ¿Por qué?
—Teresa se ha mudado aquí.
Clara no me dijo nada en el momento en que se lo dije, tarde 1 segundo antes de volver a abrir la boca.
— ¿En serio? —me pregunto mientras caminaba por la habitación.
—Sí, ahora salgamos de aquí para hablar afuera.
—No, te dije que debemos buscar unas cosas en tu computadora Tomas, vamos, ven y enciéndela.
Camine poco después de que Clara dijera esas palabras, encendí mi computadora, y poco después empezamos a trabajar, me incomodaba un poco el tenerla aquí en estos momentos, pero al final lo ignore.
Clara de vez en cuando seguía girando la mirada alrededor la habitación, quizás estaba asimilando lo que le dije, en el exterior parecía estar muy bien.
Después de un pequeño rato, logramos terminar lo que teníamos que hacer aquí y luego de eso nos fuimos a la sala, no había mas razones para permanecer en mi cuarto.
Nos sentamos, y hablando unos momentos más antes de que por fin decidiera irse.
—Tomas ¿Hace cuánto se mudó Teresa? —me pregunto mientras estábamos en la puerta.
—Se mudó hoy.
— ¿Hoy? No pensé que fuera tan reciente.
— ¿Por qué te interesa en eso?
—Por nada, solo curiosidad, nos vemos después, tengo cosas que hacer —me dijo Clara antes de irse.
Me le quede mirando unos momentos antes de cerrar la puerta, técnicamente fue una reunión de negocios, pero el ambiente que Clara me dio era raro por alguna razón.
No pude quedarme tranquilo hasta que regrese en mis pasos, vi todo lo que hice con Clara… no había motivo para pensar que pudiera haber hecho algo.
Desde que Clara hizo eso lo del embarazo e instalo cámaras sin mi consentimiento en mi casa, decidí que era mejor tener cuidado de ella, no quería que se repitiera la misma situación.
PDV Clara
Poco después de Salir de la casa de Tomas, me monte en mi auto, y luego de eso Salí, en el camino suspire.
Todo salió mejor de lo que espere.
Termine deteniendo mi auto, y luego de eso revise mi bolso para verificar algunas cosas.
Todo lo que me había llevado estaba en su sitio.
El que Teresa se haya mudado me resulto conveniente, facilito mucho las cosas para mí.
Del cuarto de Tomas me termine llevando un par de sus objetos personales, tales como labial y demás.
No fue lo único, yo no planee esto, solo tuve buena suerte, pero en el sofá donde me senté con Tomas, se encontraba el teléfono de Teresa allí tirado sin vigilancia.
No me resistí, fue difícil tomarlo sin que Tomas se diera cuenta, pero lo tenía, y por suerte no lo manche.
Tome mi propio teléfono e hice una llamada.
—Hola, necesito ver a su jefe.
— ¿Por qué motivo?
—Quiero que haga un rápido análisis de huellas dactilares, mientras más rápido mejor, esto es muy importante, dígale que le pagare mucho dinero si puede tener los resultados lo más rápido posible.
PDV Teresa
Mía después de hacerme despedir de Tomas, me monto en su auto y junto con ella fui a un sector del grupo empresarial de los Saint.
Según ella, en este sector era donde iba a empezar a trabajar bajo la dirección de Vincent, el cual sería algo así como mi mentor a medida que siguiera integrándome al grupo.
Este sector no era tan grande como el que dirigía el padre de Mía, pero aun así era bastante llamativo.
Ambas entramos juntos, y luego de eso fuimos a los pisos más altos.
Cuando llegamos cerca de una sala con un cierto número de personas, Mía se giró hacia mí y empezó a hablarme.
—Bien Teresa, este va a ser tu grupo a partir de ahora —me dijo Mía.
— ¿No te lo llevaste contigo?
—No, puedo jurar que no.
— ¿Cuándo fue la última vez que lo tenías?
—Bueno, creo que cuando nos reunimos con Mía aquí abajo, debió caerse en el sofá, pero no lo encuentro.
—… ¿En el sofá?
PDV Clara
— ¿En cuánto tiempo cree que lograra obtener los resultados? —le pregunte al especialista frente a mí.
—En poco tiempo señorita, de eso puede estar seguro ¿Puedo preguntar por qué tanta prisa?
—No, no puede, son asuntos personales, solo asegúrese de darme los resultados rápidos y le daré una buena cantidad de dinero.
—Bien, usted manda.
—Llámeme cuando tengas las huellas, quiero un informe detallado de estas.
Después de decir eso, me gire y abandone el lugar rápidamente.
Me monte en mi auto y fui a mi casa, tome un par de cajas, allí se encontraba toda la información que había podido recopilar hasta ahora.
Se encontraba el video, y los medicamentos que me habían enviado y los informenes que había hecho hacer, solo faltaba un par de cosas más.
Estaba ansiosa por sacar a Teresa de la casa de Tomas, ver sus cosas mezclada con las de este no me gustó nada.
PDV Daisy
El viaje hacia el volcán de la isla fue algo agitado, estaba junto con Sasha y Vincent, de entre los 3, este ultimo era el mas emocionado.
Habia mas turistas de los que pensaba aquí, despues de un tiempo logramos llegar al punto de reunión y despues de eso ya era hora de iniciar la excursión.
Yo todavia no estaba segura de hacer esto.
No es que fuera cobarde, sino que ¿Qué tenia de atractivo este lugar? ¿Valia la pena el riesgo?
A veces Vincent era muy loco, y mira que eso lo pensaba alguien como yo.
—¿Qué esperas Daisy? Ya vamos a iniciar, ven aca conmigo —me dijo Vincent.
—Ya voy, ya voy, no presiones tanto, no es que tenga muchas ganas de ir en primer lugar.
— ¿Por qué esa cara? Anímate un poco, vas a ver cosas que pocas personas pueden llegar a ver en sus vidas.
—Mirar volcanes no me resulta muy placentero, ¿Por qué tenemos que hacer cosas como estas? Preferiría estar en la playa, hasta te dejaría hacerme morbosidades en medio del mar y con el riesgo de que nos miren.
—No, ya hemos ido a la playa antes Daisy, necesitamos experiencias nuevas y más fuertes, este tipo de cosas sirven para mucho, ya sea malos recuerdos o por ejemplo borrar de tu mente algunas malas acciones —me dijo Vincent en tono chistoso.
— ¿Malas acciones? ¿Cuáles? ¿Qué has hecho? Vamos, cuéntame.
—No seas chismosa, y además ¿Por qué me preguntas eso a mí? Yo soy un santo, mi pureza esta entre las más altas del mundo, ¿Qué cosas malas podría hacer como yo?
—No lo sé, tú dime.
—Ninguna Daisy, vamos, empecemos con esto, estoy ansioso por ver como resulta.
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Los comentarios de los lectores sobre la novela: Vendiendo mi virginidad... AL CEO