PDV Teresa
El festejo de celebración duro varias horas después del discurso de inauguración que dije en el escenario, después de conversar con el padre de Vincent, muchos otros socios de Tomas vinieron a hablar conmigo.
Tuvieron diferentes actitudes, aunque hubo algunos que directamente pensaban que si era una cazafortunas o algo parecido, y me enviaron indirectas para decírmelo, Tomas los aparto de inmediato y provoco que se fueran del lugar, se enojaron, pero eso a él no le importo.
Vincent y Daisy siguieron sin aparecer durante el resto de la fiesta, ni idea de a donde se fueron, cuando llego el momento de irse fue que pudimos encontrar a Daisy.
Todos los invitados hace tiempo que se fueron, ya era más de las 12 de la noche, estábamos cerrando cuando Daisy apareció, se veía desarreglada, pude imaginarme lo que había hecho mientras estábamos en la fiesta.
—No jodas Daisy ¿Incluso en mi inauguración de lo mío no pudiste contenerte? —le pregunte a esta mientras iba con ella.
—No es mi culpa Teresa, el tonto de Vincent no se aguantó y ya sabes que tengo que mantener mis ingresos sin importar que —me dijo ella.
— ¿Dónde está ese idiota? —le dijo Tomas.
—Sí, de eso quiero hablarles, necesito que vengan conmigo.
— ¿Qué sucedió?
—Un accidente, no puedo abrirlo.
— ¿Qué no puedes…?
—Solo vengan conmigo.
Daisy se giró después de eso, Tomas y yo intercambiamos una mirada, pero luego la seguimos juntos, términos por llegar al lugar donde me equivoque de corredor y termine en la habitación de Tomas el año pasado.
No pude evitar pensar algo allí, Daisy se fue hacia la izquierda, no me acordaba que dirección tome yo el año pasado ¿Fue izquierda o derecha?
— ¿No pudieron irse a su casa?
—No, Vincent quería que fuera aquí, ¿Y por qué no remodelaste esta zona?
—Planeaba usarlo para algo más.
— ¿Para que ibas a usar habitaciones Teresa?
—No sé, ya pensaría en algo, sería una lástima perder todo esto, quizás un hotel pequeño por si el otro negocio no funciona.
—Mmm, si por alguna razón terminas por volverlo un club, yo te puedo conseguir muchas vírgenes para vender.
—No hare eso Daisy.
—Era una sugerencia nada más… ¿O no?
—No.
Llegamos a la puerta, entramos y vi a Vincent colgado de cabeza encima del techo.
Me quede con los ojos en blanco la verlo, y más cuando me saludo estando colgado, estaba medio desnudo, estaba colgado desde 1 pie pies y dando vueltas, termino por asomar su trasero frente a nosotros.
No tenía nada allí… antes de que pudiera ver más, pude sentir como alguien me jalaba desde atrás, debió ser Tomas, para cuando me di cuenta tenía los ojos tapados y estaba en su pecho.
— ¿Qué haces?
—Es mejor así Teresa.
—No seas bobo Tomas, ya ayúdenme a bajar de aquí, la tonta de Daisy perdió la llave… llevo más de media hora colgado —nos dijo Vincent.
— ¡No la hubiera perdido si no me hubieras hecho hacer los juegos enfermos que querías!
— ¡¿Qué yo quería?! Abusaste de mi como quisiste aprovechándote de mi inocencia, Teresa, aléjate de esa mujer, tú debes saber lo loca que esta, tienes que buscar justicia por mí, mira todo lo que me hizo aprovechando la situación… mis nalgas tienen…
—Teresa no necesita escuchar tu sarcasmo Vincent —le dijo Tomas.
—Pero quiero oír.
—No necesitas, espera afuera mientras bajamos a ese idiota.
— ¡Pero…!
—Espera afuera.
Tomas me saco de la habitación en poco tiempo y la cerró, quise entrar pero cerraron por dentro, golpee la puerta, escuche como un fuerte golpe en el interior de la habitación, Vincent dijo algo, luego escuche otras cosas además de esa.
— ¡Teresa! ¡Me estas matando! ¡Quieren “abusar” de mí! ¡Help me!
…
— ¡No me dejen afuera!
Golpee la puerta y finalmente se abrió, entre y vi a estos 3, Tomas de alguna forma perdió su saco, estaba tirado lejos, Daisy seguía desarreglada, justo en el momento en que entre ambos parecían querer ponerle ropa a Vincent.
Este último tenía su mano en el trasero de Tomas…
— ¡Vivan los tríos carajo! —dijo Vincent en cuanto me vio.
— ¿Qué…?
Movió su mano en el trasero de Tomas, este último soltó un ruido, decidí hacer como que no vi nada, Daisy golpeo a Vincent pero este también termino haciéndole lo mismo a ella.
—Que bien, premio doble.
Salí de allí y cerré la puerta, volví a escuchar varios ruidos, Vincent volvió a pedir mi ayuda, no entre, y ellos salieron después de un tiempo, estaban muy desarreglados.
—Una pena que no hayas participado Teresa —me dijo Vincent.
—No volverás a este lugar, nunca más Vincent.
—Vamos Tomas, no seas egoísta, ¿Por qué son tan duros conmigo? Nadie nunca es amable con Vincent.
—Sera por una razón, llévate esas cosas que usaron en esa habitación con ustedes, no las quiero aquí con Teresa.
— ¿Temes que podría utilizarlas con ella en una visita que le haga mientras está trabajando? Tranquilo Tomas, no te enteraras.
Tomas le dio un golpe en la cabeza.
—Auch.
—Ya es tarde, vámonos.
Después de que Tomas dijera eso, los 4 salimos del lugar, mañana tendría la universidad y luego iría al negocio, Vincent y Daisy se fueron por un lado y Tomas y yo por otro, después de llegar a su casa, casi nos fuimos directo a la cama.
Me recosté en el pecho de Tomas mientras imaginaba varias cosas.
— ¿Sigues despierta? —me pregunto este.
—Si.
—¿Estas nerviosa por tu primer dia?
—Algo, las palabras del papa de Vincent y los otros me dejaron asi.
—No les prestes atencion a ninguno, Vincent me conto de cuando trabajas para èl, y dijo que hiciste las cosas bien… mas o menos.
—¿Cómo que mas o menos?
—Fueron sus palabras Teresa, si logras manejar eso con ese jefe, entonces no tendras problemas con la sucursal, lo haras bien —me acaricio ligeramente mi cabeza mientras me decía esas palabras.
Me deje llevar por lo que dijo y me relaje, la noche se fue rápido y al dia siguiente me levante temprano para poder ir temprano a la universidad como siempre.
Tenia ganas de dejar la universidad para dedicarme por completo a la sucursal, pero ni Tomas ni mi madre quisieron oir algo de eso, querían que terminara la carrera.
—¿Iras directo a la sucursal despues de salir de aquí? —me pregunto Tomas mientras me dejaba en el estacionamiento de la universidad.
—Si, me ire directo alli.
—Quizas vaya despues de salir mi oficina, aunque será tarde, me esperas para poder llevarte de regreso, no quiero que te vayas sola en mitad de la noche.
—No lo hare, no lo hare, tranquilo.
Tomas se despidió de mi y luego de eso se fue, gire la mirada y note las miradas de mis compañeros sobre mi, habia varios que me acompañaron en el semestre anterior, seguía siendo mas o menos famosa entre ellos.
Camine sin mirarlos mucho, Tomas me traía y algunas veces Mia venia y no ayudaba a olvidar lo que paso el año pasado, ya no me importara mucho lo que pensaran sobre mi, aunque a veces los rumores eran molestos.
Llegue a mi clase y me sente a esperar a que el profesora comenzara, aun no habia llegado, estaba en los últimos asientos y no vi cuando llego, mis compañeros empezaron a murmurar algo, el salón era grande y el eco se hacia sonar, los ignore y me quede observando lo que habia abajo desde la ventana.
—¡Teresa! ¡Mira para aca!
Al escuchar esa voz me gire y pude ver a Vincent parado a un lado de la profesora, mis ojos se quedaron en blanco al verlo, me recupere tras unos segundos.
¿Qué hacia èl aquí?
—¿Qué…? —murmure, pero no termine de hablar.
La profesora no me dejo, alli fue cuando me entere de que Vincent de algún modo se habia transferido para estudiar conmigo en mi misma carrera… no supe como hizo eso ni me importo… lo que me dejaba preocupada es que ahora iba a estar en mi clase conmigo todos los días…
Eso era demasiado Vincent para mi.
La profesora termino dar la presentación, despues les explico a los estudiantes que hizo eso porque Vincent lo quiso asi…
—Espero que todos ustedes se lleven bien conmigo, en especial las chicas de aquí, ahora, con permiso.
—No vengas aquí, no vengas aquí —pensé.
Vincent termino llegando a mi lado, le dio 500 dolares a la personas de al lado para que se le diera el asiento, luego de eso lo arrastro para quedar mas cerca de mi.
—Entonces… ¿Qué cuentas Teresita? —me pregunto.
…
—¿Por qué estas aquí?
Tome mi cuaderno y le di un leve golpe en la cabeza.
—¿Por qué me recibes asi? Esperaba una sonrisa y un beso ¿No lo merezco?
—¿No deberias estar trabajando?
—Tu misma lo dijiste… “Deberia” pero aquí me tienes.
—Vincent…
—Teresa…
—¿Por qué viniste? Tienes casi 30 años ya, ¿No te sientes fuera de lugar aquí?
—¡Pero si solo tengo 28, no 27 años! ¡Aun ni estoy cerca de los 30! ¡Me das justo en el corazón Teresa! Justo aquí ¿Lo ves? ¿Por qué eres tan cruel conmigo?
—No te hagas el tonto, ya estas muy grande para la gracia, ya vete a trabajar o a estar con tus novias o lo que sea.
—Pero Teresa ¿No dijiste que estabas sola en la universidad?
—Si, pero…
—¿Y no dijiste que no pasábamos mucho tiempo juntos como antes?
—Bueno… si… pero…
—Yo encontré la solución a ambos problemas Teresita, y mírame aquí, yo soy la solución a todos tus problemas… vas a tener a lo que siempre has querido, Vincent hasta que te hartes.
…
—No puedo creer que de verdad hicieras esto…
— ¿Por qué no lo haría Teresa? Estabas lejos de mi… y tú Ya sabes, que yo… yo soy tu amigo fiel.
…
No, no por favor aquí no.
—Ven, vamos únete.
—Tengo que trabajar.
—No te hagas de rogar.
—Bien, no, no, debo regresar.
—¿Por qué tan seria Teresa?
Regrese a mi oficina, el dia se fue volando y llego la hora de cerrar.
Mis empleados me contaron sobre muchas cosas que hizo Vincent y me preguntaron si debía o no correrlo, al final les dije que lo ignoraran, pero hizo demasiado y uso mi nombre para salir impune.
Regrese con ellos al final, Vincent y Daisy estaba bebiendo, Mia tambien, pero estaba un poco alejada de ellos, pero de vez en cuando su hermano iba a molestarla y los 2 empezaban a pelearse como niños.
—Ya paren los 2, parecen niños —les dije a ambos mientras evitaba que se cachetearan entre si.
—¡El empezó Teresa! —me dijo Mia.
—No me importa quien empezó Mia.
Tomas llego mientras regañaba a los Saint, se sorprendio al verlos a ellos conmigo.
—¿Qué haces ustedes 2 aquí? Te dije que no te queria ver en este lugar Vincent.
—Pues mal por ti, por que la jefa ya me dio carta blanca para hacer lo que quiera.
—Nunca hice eso.
—¿En serio? Por que baile todo el dia por aquí y no veo que hicieras nada para detenerme.
…
—¿Cómo que te la pasaste bailando?
—Eso no importa Tomas —le dije.
—Bueno, bueno, olvidemos mis espectaculares pasos de baile que de seguro veras en Youtube mas tarde, ¿Cómo te rindió el dia? ¿Sacaste ganancias?
—Si.
—¡Que bien! ¡Hay que celebrar!
Vincent corrió hacia algún lugar, tomo su teléfono tecleo en èl, hizo algunas ruidos y se fue.
—¿A dónde va?
—No se —me dijo Daisy.
Regreso poco despues con mi mama y mi hermano, mientras estaba ocupada en la oficina, Vincent los habia llamado para que vinieran aquí para estar conmigo.
Todos estabamos reunidos, Vincent saco unas botellas de vino de alguna lugar junto con unas copas, empezó a servir junto con Daisy a todos, me quede junto con Tomas mientras eso pasaba.
Este ultimo mientras Vincent servia las copas, hablo conmigo, queria saber como me habia ido en mi 1 dia.
—Todo marcho de maravilla Tomas, aunque hubiera sido mejor si Vincent no hubiera estado aquí acosando a la clientela.
—Me encargare de èl… más tarde.
…
Vincent termino de servir las copas y luego nos juntó a todos en un pequeño círculo.
—Muy bien, antes de brindar ¿Alguien tiene algunas palabras que decir para felicitar a Teresa? —pregunto Tomas.
—Ah bueno, me alegro que lo digas y si tanto insistes yo…
—No, tu no Vincent, que hablen los demás.
—Pero…
—Que no.
—Eres malo.
Mi mama y mi hermano fueron los primero en decir algunas palabras para mi, en especial ella, Daisy solo dijo un par de palabras simples, a ella no se le daba bien mucho eso, luego fue Mía, Vincent al final no pudo hablar por Tomas.
Aunque ganas no le faltaron.
—Muy bien, muy bien, todos acérquense, así, juntitos para chocar las copas con la mía, mira que yo debo ser el del centro de atención —nos dijo Vincent.
Le hicimos caso y nos juntamos.
—Bien, a la cuenta de 3, ¿Deberia comenzar por el 3… o debería comenzar por el 1? —murmuro Vincent.
—Solo hazlo.
—Okey, bien, 3, 2, 1 ¡Por Teresa! —grito Vincent
— ¡Por Teresa! —gritaron los demás.
Todos se bebieron sus copas al instante, yo también, justo después de terminar, Tomas me dio un beso, duramos asi uno segundos antes de separarnos.
—Muy bien Teresa, ahora dame 1 para mi.
—Tu no te acerques Vincent.
—Pero Tomas, solo será un “pico” nada más.
— ¡Que no!
Vincent trato de avanzar, Tomas lo impidió, me puse detrás de este y junto con los demás me reí de la escena que armaron estos 2 sin importarles nada.
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