Vendiendo mi virginidad... AL CEO romance Capítulo 41

PDV Teresa

Así que era por eso, Saint había pasado hambre en su niñez y eso había

causado que le disgustara que aquellos a su alrededor llegaran a pasar hambre,

eso tenia sentido, pero…

Èl también habia dicho que no le gustaba que aquellos en quienes se habían

interesado pasaran hambre, siendo esa la razón por la cual se enojó tanto con

mi antiguo jefe cuando descubrió que me había dejado sin comer durante más de 7

horas.

Era agradable que alguien se preocupara por ti de esa forma, pero la

persona en cuestión que se había preocupado por mí, era Vincent, a quien no

conocía realmente y que había pagado por una virginidad que nunca llego a

tener.

Además de eso, también dijo que estaba interesado en mí, eso me pone algo

nerviosa ¿Exactamente que va a hacer a partir de ahora?

Me preocupaba un poco lo que Vincent podría hacer con respecto a mí, es

cierto que me había protegido y ayudado 2 veces, pero esa ayuda había venido

por el interés que tenía en mí, y dicho interés venia porque yo técnicamente lo

rechace la noche de ayer.

¿Qué llegaría a pensar si descubre que estuve con otro hombre la noche de

ayer cuando debí estar junto con él? ¿Se pondrá celoso? ¿Su actitud cambiara?

¿O empezaría a ser malo conmigo?

La duda me mataría si siguiera estando junto con él, si llegaba descubrir

lo que de verdad hice anoche, quien sabe lo que podría hacer.

—Por cierto Terea ¿Qué piensas hacer a partir de ahora? —me pregunto

Vincent mientras me miraba a los ojos con una sonrisa.

¿Qué iba a hacer a partir de ahora? ¿A qué se refería?

— ¿A qué te refieres Vincent? —le pregunte mientras lo miraba con

curiosidad.

—Me refiero con respecto a tú vida —me dijo Vincent.

— ¿Mi vida? ¿Puedes tratar de ser más específico?  —le pregunte a Vincent.

—Bien, Teresa, acabas de renunciar a tú trabajo y a pesar de que tomaste

algunos billetes de ese viejo verde, eso no es suficiente para pagar el

tratamiento a largo plazo de tù madre, necesitas otras fuentes de ingresos así

que dime ¿Qué piensas hacer a partir de ahora? ¿Vas a conseguir otro trabajo?

—me pregunto Vincent mientras me miraba con curiosidad.

Ya veo, es cierto, había renunciado a mi empleo, y a pesar de que tome algunos

dólares, eso no quitaba el hecho de que aún tenía muchas cuentas que pagar,

sobre todo el tratamiento de mi madre.

Vincent se dio cuenta de mis dificultades y desde su punto de vista solo

era una chica sin trabajo, por lo que quizás se estaba compadeciendo de mí.

A pesar de que perdí mi empleo, no estaba tan nerviosa, aun contaba con mi

otra trabajo en la tienda de comestibles donde trabajaba, donde me encontré con

Tomas por segunda vez, y además de eso, también estaba el acuerdo con este último.

Según ese acuerdo, yo podría ganar una gran cantidad de dinero todos los

días, y eso sin mencionar un pago al finalizar el acuerdo, aún no había firmado

nada, pero tener esa buena opción detrás de mí me daba seguridad y comodidad.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Vendiendo mi virginidad... AL CEO