PDV Teresa
Tarde un tiempo
en poder contarle a Tomas toda mi situación, le dije bastantes cosas, y después
de terminar finalmente, me quede en silencio, esperando a ver qué es lo que decía
Tomas ante lo que le dije.
—Entiendo tu
situación Teresa… pero ¿Qué quieres que haga? —me pregunto Tomas a través del teléfono.
Aquí vamos.
—Quiero… quiero
que me des un adelanto de mi remuneración diaria, necesito… unos 2 meses de
adelanto —le dije a Tomas, me fue bastante difícil decir esto.
Eso de pedirle
dinero después de cómo nos despedimos la última vez fue bastante difícil, no sé,
pero me sentía muy mal, y más porque cuando dije esto de que me diera una
adelanto, recordaba las palabras que Daisy me dijo.
Se supone que ese
contrato era una especie de trampa para mí, Tomas quería darme ese dinero para
que lo gastara y después trataría de que el acuerdo quedara invalido… entonces
terminaría con una gran deuda que pagarle.
Aun no había ni
firmado el acuerdo, pero ya estaba a punto de gastar ese dinero, Daisy me lo
advirtió pero no tengo otra opción, mi madre necesita su tratamiento y nos
estamos quedando sin tiempo, ni siquiera podía firmar el acuerdo y dejar que
los 3 meses pasaran para poder obtener ese dinero sin temor a nada, ya que el
tiempo corría.
Cada mes que
pasara, provocaría que mi madre tuviera menos probabilidades de poder
sobrepasar su enfermedad, por lo que no podía darme el lujo de esperar,
necesitaba ese dinero ahora, no podía esperar ni siquiera 1 mes para obtenerlo.
—Ya veo, pero
para poder hacer eso Teresa, necesito que hagas algo primero —me dijo Tomas.
— ¿Qué Necesitas
que haga? Siempre y cuando no sea excesivo puede hacer cualquier cosa —le dije
a Tomas por el teléfono.
No estaba
bromeando, siempre y cuando no fuera algo exagerado podría hacerlo sin
problemas.
—No es nada del
otro mundo Teresa, solo necesito que firmes el contrato que te envié —me dijo
Tomas.
— ¿Solo eso? —le
pregunte sorprendida.
Pensaba que me
pediría algo más.
—Sí, solo eso, no
puedo darte un adelanto de una remuneración que no te doy, primero necesito que
firmes el contrato para poder hacerlo Teresa —me dijo Tomas.
—Ya veo —murmure.
— ¿Lo vas a
firmar? —me pregunto Tomas.
—Sí, lo firmare
—le respondí a Tomas.
—Bien, te enviare
el dinero después de que reciba el documento con tu firma —me dijo Tomas.
—No es necesario
esperar, lo firmare justo ahora —le dije a Tomas.
— ¿Ahora? ¿En
estos momentos? —me dijo Tomas, parecía sorprendido.
—Sí, no quiero
perder más tiempo, firmare ahora, espera unos momentos, lo hare en enseguida
—le dije a Tomas.
—Bien, esperare
tu llamada Teresa —me dijo Tomas antes de colgar la llamada.
Después de que
Tomas colgó la llamada, use mi teléfono para poder abrir mi correo electrónico,
busque rápidamente el contrato que Tomas me había enviado vía digital, lo
encontré y lo abrí, lo observe por unos momentos mientras recordaba las
palabras que Daisy me dijo.
Ya estaba a punto
de firmarlo, y estaba a punto de gastarme una gran cantidad de dinero, y si el
contrato terminaba por romperse, entonces terminaría con una gran deuda con
Tomas, necesitaría tener cuidado como Daisy me aconsejo sino quería que las
cosas se complicaran.
Son solo 3 meses,
solo es ese tiempo.
Suspire, y
entonces firme el documento por medio de la vía digital, después de estar
listo, me llego una notificación en la cual se me decía que el contrato fue
firmado y que a partir de ahora tendría que cumplir con las obligaciones
legales firmadas.
Además también me
dijo que el contrato firmado se enviara al remitente que me lo envió, por lo
que Tomas sabría al instante en el momento en que termine de firmar.
Ya había firmado,
y Tomas debió haberle llegado el documento, por lo que todo estaba hecho.
Después de
firmar, tenía la intención de llamar a Tomas, pero este último se me adelanto y
me contacto antes.
—Ya está todo
listo Teresa —me dijo Tomas por el teléfono.
—Sí, ya está todo
listo, te daré mi cuenta de banco para que…
—No me entiendes
Teresa, dije que ya estaba todo listo, ya te transferí el dinero que me pediste
—me dijo Tomas, interrumpiendo lo que iba a decir.
¿Qué fue lo que
dijo? ¿Ya me había transferido el dinero?
¿Tan rápido?
Normalmente las transferencias bancarias tardaban un tiempo, ¿Cómo lo hizo tan
rápido?
Es más… ¿Cómo
supo mi cuenta de banco?
No podía creer
que fuera cierto, pero Tomas no tenía ningún motivo para mentirme.
— ¿Es en serio
Tomas? —le pregunte de forma involuntaria.
Las cosas pasaron
muy rápido para poder creerlas.
—Sí, te transferí
180.000 dólares a tu cuenta —me dijo Tomas.
¡180.000 dólares!
Eso era
equivalente a la remuneración diaria que recibiría por 3 meses según el
contrato y le dije que solo necesitaba 100.000, ¿Por qué me transfirió 180.000 dólares?
—Tomas, te dije
que solo necesitaba 100.000 dólares solamente, ¿Por qué me transferiste
180.000? —le pregunte.
—Bueno Teresa, ya
que pediste un adelanto considere oportuno simplemente darte toda tu
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