Yo, una Actriz Bien Relacionada romance Capítulo 248

"¡Eh, qué temperamento! Me gusta", el maleante no aprendió la lección y aún quiso enfrentarse a Julieta.

Justo en ese instante, Julieta agarró su muñeca y le dio una patada en su entrepierna con la rapidez de un rayo. "¿Estás sordo? Les dije que bajaran el volumen y no me escucharon. ¿Querían llegar a las manos?"

"¡Me encanta esa actitud!" El maleante rio. "¡Muchachos, atrápenla!"

Tan pronto como terminó de hablar, un grupo de personas salió corriendo de la habitación.

Julieta flexionó sus codos, preparándose para pelear, cuando las puertas de las habitaciones cercanas se abrieron de golpe. Viento y un grupo de guardaespaldas salieron corriendo, y en un par de minutos habían golpeado a los jóvenes.

Los hombres miraron aterrados a los guardaespaldas y dijeron humildemente, "Perdón, perdón..."

"Voy a apagar la música ya mismo, lo prometo, no haremos más ruido."

Diciendo esto, el maleante se arrastró de vuelta a su habitación para apagar la música, caminando de puntillas, temiendo hacer cualquier ruido.

Julieta sabía que su hermano había dispuesto guardaespaldas alrededor de ella, pero no esperaba que fueran tantos. "¿Todos en este piso son tus hombres, excepto estos maleantes?"

"No." Viento negó con la cabeza, señalando una puerta cerrada. "El dueño vive allí, es el propietario de todo el edificio."

Tener un edificio en el centro de la ciudad lujosa era algo que solo un rico haría.

No, quizás un rico viejo.

"Ustedes descansen, yo también me voy a dormir." Julieta bostezó, presionó el botón del ascensor, y luego escuchó un fuerte ruido a lo lejos.

Todos miraron hacia la puerta del dueño.

Luego, un olor extraño se filtró desde adentro.

Olía como algo quemado...

Al ver esto, Viento se apresuró a tocar la puerta. "¿Hay alguien ahí? ¿Estás bien?"

Este hombre desvergonzado.

¡Había estado planeando esto desde hace mucho tiempo!

Bruno salió tosiendo. Al ver la puerta abierta y a Julieta en la entrada, estaba un poco avergonzado. Tenía la intención de cocinar algo delicioso para Julieta y Joan, pero la olla estaba muy llena y estalló...

Que la olla haya explotado no es lo importante.

Lo importante es que la identidad del dueño quedó al descubierto.

Al ver la mirada de Julieta.

Bruno sintió un escalofrío en la espalda.

Esto no pintaba bien.