Zong Jinghao estaba sorprendido.
-Tú...
En cuando dijo estas palabras, se escuchó el timbre de la puerta. Frunció el ceño, pues escuchar eso lo hizo sentirse molesto porque alguien estuviera llamando a la puerta justo en ese momento; cuando se levantó, vio el delicado y plano vientre de Lin Xinyan, que estaba expuesto debido a que el dobladillo de su blusa se había enrollado. Así, estiró su mano para acomodarle la ropa y la miró.
—No te estaba molestando en serio. ¿Por qué lloras? —Lin Xinyan se incorporó y, todavía enfadada, volteó la cabeza al negarse a hablar con él; Zong Jinghao suspiró-: Iré a abrir la puerta.
No tenía puesta la camisa, ya que no podía seguir usándola; entonces, tomó una bata y se la puso en el baño antes de ir a atender la puerta. Al abrir, se encontró con una mujer que usaba un vestido bodycon color morado que revelaba sus delgados muslos. Su cabello era rubio y ondulado, también llevaba puestas unas zapatillas negras. Cuando ella vio al hombre que estaba detrás de la puerta, recorrió su cabello con las manos y abrió sus labios rojos, diciendo:
-Me llamo You. -Y de inmediato, entró en la habitación-. No te preocupes, soy muy hábil, y sin duda, voy a complacerte.
Parecía que la mujer estaba acostumbrada a ese tipo de situaciones, puesto que caminó hacia la mesa y se sirvió una copa de vino tinto, del cual después tomó un sorbo. Miró al hombre que era atractivo en extremo, pensando que se había ganado la lotería y que estaría dispuesta a dormir con él gratis; sin mencionar que, de lo contrario, ganaría mucho dinero, lo cual hizo que se entusiasmara aún más.
-También puedo cumplir con cualquier petición especial que tengas, ya sea oral o... —Antes de que pudiera continuar, abrió los ojos de par en par cuando vio que Lin Xinyan iba saliendo de la habitación—. ¿Tú quién eres?
«¿Será posible que haya llamado a otra mujer además de mí?» Con eso en mente, la mujer juzgó a Lin Xinyan, quien llevaba una vestimenta conservadora y no estaba maquillada; a pesar de que era hermosa, no tenía el mismo aspecto coqueto que ella. «Si queremos divertirnos, desde luego que tendremos que conseguir a alguien que sepa cómo hacerlo.» La mujer miró a Zong Jinghao.
—¿Vamos a hacer un trío? —preguntó.
No hubo respuesta de parte de él y en vez de eso, su expresión se oscureció por completo.
-¡Largo de aquí!
La mujer no logró comprender lo que estaba sucediendo; por ende, solo respondió sonriente:
-No me molestaría hacer un trío.
Lin Xinyan también pudo ver lo que esa mujer estaba haciendo, y pensó: «¿Entonces este servicio no es gratuito?» Y entonces, sintió que un escalofrío recorría todo su cuerpo. «De verdad cuentan con este tipo de
servicios en todos lados. Ni siquiera hay excepciones en un hotel de cinco estrellas como este.» Miró a Zong Jinghao, y le dijo con un tono presuntuoso:
-Esto es algo bueno, ¿por qué estás tan pesimista? Los dejaré solos.
Al escuchar esto, You se emocionó ya que no quería tener que compartir con otra mujer a un hombre tan alto y guapo que además, se veía fuerte. Fue normal que se pusiera contenta cuando escuchó que Lin Xinyan se ¡ría y en su rostro había una mirada de felicidad. Zong Jinghao la miró disgustado, y también miró a Lin Xinyan.
—Vete, si te atreves -advirtió.
—¿Acaso eres un bandido? —respondió Lin Xinyan mirándolo.
-Si tú lo dices. -Zong Jinghao se aproximó a ella y después de ponerse de pie a su lado, se inclinó—. Esto lo hiciste tú, así que tú lo resolverás.
Lin Xinyan se quedó muda y apretó los dientes. You vio que Zong Jinghao entraba a la habitación y lo siguió, pero en el instante en el que llegó a la puerta, Lin Xinyan la alcanzó y la detuvo.
-Disculpa, pero ya puedes retirarte. No necesitamos tus servicios.
La expresión en el rostro de You cambió y levantó sus delicadas cejas.
—¿Y entonces qué? ¿Estás tratando de quedarte al cliente para ti sola?
El semblante de Lin Xinyan también se distorsionó. «Yo no estoy aquí para hacer lo mismo que tú.» Y entonces, levantó la cabeza en una manera impositiva.
—Puedes irte por tu cuenta o puedo llamar a la recepción. -Lin Xinyan hizo una pausa-. Aunque si eso resulta desagradable, no sería algo bueno para ti.
You estaba renuente a irse, pero pensó que un hombre que podía pagar una suite como esa, debía ser rico y respetable; además, a juzgar por la actitud que tomó antes, a él tampoco gustaba de ella. Esa había sido la única ocasión que la habían rechazado y por ende, se malhumoró.
—Esta botella tiene un medicamento tópico que se debe aplicar con el atomizador en la herida; estos se deben tomar por vía oral. Suminístrele este rojo para la fiebre si le da de nuevo. Asegúrese de que beba mucha agua por la noche, pues debido a la fiebre, es necesario que se mantenga hidratado.
-Está bien.
Lin Xinyan acompañó al doctor a la puerta, y después de cerrar, regresó a la habitación y permaneció a un lado de la cama, suspirando; se quedó a cuidarlo a regañadientes, ya que no podía hacerse responsable en dado caso de que algo le sucediera.
En la noche, Zong Jinghao dijo, aturdido:
-Agua... agua... -Su voz era seca.
Como Lin Xinyan seguía despierta, le sirvió un vaso de agua cuando lo escuchó; entonces, lo ayudó a incorporarse y acercó el vaso a sus labios.
-Es agua.
Ella inclinó el vaso para que le fuera más fácil beber el agua y cuando Zong Jinghao sintió el líquido, lo engulló, aliviando la sensación de sequedad en su boca. Al terminar, Lin Xinyan colocó el vaso en la mesa que estaba junto a la cama y lo ayudó a recostarse de nuevo.
-Como te estoy cuidando de todo corazón, te pido que ya no me causes problemas después de que te recuperes.
Sin embargo, Zong Jinghao no pudo escucharla porque ya estaba dormido. Lin Xinyan sabía que él debía regresar a China a casarse, mientras ella se quedaba a hacer su vida allí, sin interferir el uno con el otro.
La mañana siguiente, Lin Xinyan decidió ir a ver a sus hijos, puesto que no había regresado a casa en toda la noche; así, buscó el teléfono de Zong Jinghao y llamó a Cuan Jing para pedirle que fuera al hotel. No obstante, Cuan Jing era muy listo y sabía que aquellos dos debieron haber pasado la noche juntos, pues su jefe tampoco había regresado en toda la noche y Lin Xinyan estaba usando su teléfono para llamarlo esa mañana. Si iba para allá, le estaría arruinando las cosas a Zong Jinghao. Cuan Jing no era estúpido.
-Tengo algo que hacer, no puedo ir -respondió.
-Hotel Versailles, habitación 888. Depende de ti si quieres venir o no, ¡pero yo no me haré responsable de Zong Jinghao si se muere aquí!
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