-Espera, por favor -miró a Simón con desgana.
-Simón, no sé cuándo nos volveremos a ver, y puede que me resulte difícil verte en España. ¿No estás un poco triste de esto?
Simón le miró fríamente, -No, vete.
-¡Qué! Escucha, Simón, hoy te perdono por el bien de Xenia.
Xenia tomó el brazo de Simón y sonrió a Anthony.
-Anthony, Lolita, Dylan, estoy segura de que nos volveremos a encontrar pronto.
-Está bien.
Anthony apartó la mirada y Xenia le vio llorar en silencio.
Anthony es realmente un buen bombón.
Simón miró a Anthony y finalmente habló.
-Anthony.
Anthony giró la cabeza para mirar a Simón con sorpresa, -¿Sí?
-Gracias por todo lo que has hecho durante todo este tiempo.
Sin esperar la respuesta de Anthony, Simón se dio la vuelta y se alejó.
Xenia le devolvió la sonrisa y siguió a Simón.
Anthony pensó incrédulo: "¿Es esto una alucinación, que Simón haya dado las gracias?"
-Anthony.
Lolita lo llamó. Pero Xenia y Simón ya se habían alejado y Anthony intentó seguirlos, y Lolita lo detuvo, -¿Qué haces? Van a pasar por seguridad.
-Has oído a Simón darme las gracias, ¿no? -dijo Anthony con entusiasmo.
Lolita asintió, -Sí, pero ¿por qué estás tan excitado?
Simón, que nunca fue muy bueno con las palabras, le dio las gracias a Anthony, lo que de repente le hizo sentir que era un amigo que valía la pena.
Pero olvidó lo más importante.
-Pero, ¿dónde está Bernabé? He venido a verle.
Lolita miró en dirección a Xenia y Simón, y Benarbé no estaba con ellos.
-Es extraño, estaba con ellos hace un momento.
-¿Lo has visto?
-Dylan.
Muy conocida, y Dylan se giró para ver al pequeño Bernabé.
-Bernabé, ¿qué haces aquí? ¿Dónde has estado? Vamos, el avión está a punto de despegar.
Dylan cogió la mano de Bernabé, pero éste no se movió, -¡Camino equivocado! Dylan, por aquí.
Bernabé señaló hacia el exterior del aeropuerto, Dylan no entendió, -No, Bernabé, por aquí.
-Ya he llevado las maletas a tu coche.
Dylan no podía hablar.
Bernabé siempre fue muy inteligente, ¿qué quiso decir con eso?
¡Dylan, he decidido quedarme aquí con el bisabuelo!
-¿Qué?
-Mamá y papá han dicho que sí, vamos a casa.
Dylan había venido a despedirlos, pero no esperaba...
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