Esposa falsa de Simón romance Capítulo 186

Ella miró solemnemente a Simón y respiró por la nariz, -No quería venir. Alguien usó afrodisíaco en mí. Lo viste.-

Simón estaba desconcertado por sus palabras.

Ella estaba explicando a él.

Después de explicar, Frida no se quedó, pasó a Simón. Rafael preguntó a ella apresuradamente, -Frida, ¿qué vas a hacer?-

Frida siguió caminar sin decir una palabra.

Óliver se quedó allí, apretó los puños, aguantando la impulsividad de ayudar a ella. La razón de aguantar era por los ojos demasiados tenaces de Frida. Si él iba a ayudarla ahora, todo esfuerzo de Frida estaría en vano.

Toda gente estaba muy confundida y sorprendida.

Las más confundidas y sorprendidas eran Estefania y Talía.

Las dos vieron que Frida había sido degradada, estos días usaban todo tipo de manera para atrampar, aunque nadie tuvo éxito, pero esta vez... pusieron Frida en una situación muy mala.

¡Y...ella era...la esposa de Simón!

¡La esposa!

¡Nadie había pensado este título! Por un momento, todas ellas tenían el sentido de que iban a perder todo.

Naomí se quedó atónita como si hubiera sido puesto magia.

Después de un rato, de repente pensó en algo, se dio la vuelta y corrió hacia la dirección que Frida fue.

-Rafael.-

Rafael fue llamado por Simón, lo entendió de repente, empujó Simón para cambiar la dirección y persiguió en la dirección dónde Frida fue.

Frida apoyó la pared y caminó hacia adelante, todo lo que vio era de doble imagen, y varias veces iba a caer hacia adelante.

-¡Frida!-

Naomí corrió al lado de Frida y la sostuvo, -¿Estás bien?-

-¿Naomí?- Frida escuchó su voz y explicó en voz baja, -Lo siento, esta noche...no te tomé una foto.-

-¿Por qué dices esto ahora?- Naomí sostuvo su brazo, -Estás caliente por todo el cuerpo. Ese maldito Carlos se atrevió a usar afrodisíaco a ti, su cara fea es como cerdo, ¿no ha mirado en el espejo para verse? Aguanta un poco más, te llevaré al hospital ahora mismo.-

-Vale...- Frida asintió con la cabeza, su cuerpo se inclinó hacia Naomí. Naomí acabó de salir del agua, su cuerpo no estaba seco, por lo que la piel de todo el cuerpo era fría, era muy cómoda de pegar con ella.

Frida se sintió mejor, -Gracias.-

Naomí sintió que todo su cuerpo estaba caliente como se fuera el fuego, no se adaptaba por el caliente pero la preocupaba mucho, -De nada, vámonos.-

-Esperen un momento.-

Después de caminar un rato, Rafael empujando la silla de ruedas de Simón, las persiguió.

- Frida, te llevaré al hospital.- Rafael dijo.

Frida estaba caminando hacia adelante con el apoyo de Naomí, vio que Simón todavía no tenía expresión facial, por lo tanto no respondió.

-Párate.- Simón finalmente abrió la boca.

Frida no se paró, pero Naomí se paró subconscientemente.

De toda forma, ella se rindió al prestigio de Simón.

- Frida, ¡o sea... dejamos que Simón te lleva al hospital!-

-No.- Frida sacudió la cabeza y rechazó su petición, -Vamos.-

-Frida, ella se viste así, creo que ella no pueda llevarte al hospital.-

De escuchar eso, Frida se dio cuenta de que Naomí estaba vestido bikini, con este vestido la llevaba al hospital, de hecho era...

Naomí también cambió el rostro, -Maldito, vine a rescatarte corriendo, olvidé tomar la ropa. Espérame aquí un minuto, ¡volveré en pronto!-

Se quedó sorprendida durante mucho tiempo, al fin se rascó la cabeza.

-Probablemente... fue llevada por Simón.-

-Ya que... ellos dos son pareja, ¡no tengo que preocuparme de Frida!-

Simón llevó Frida a subir en el coche forzosamente, Frida no tenía fuerza, y su cuerpo caliente fue abrazado por Simón fijamente, no podía moverse. Y el olor claro de hombre de Simón la envolvió fuertemente, este tipo de olor la hizo codiciosa, dejó que ella quería alargar las manos para abrazarlo.

Frida sabía que ella realmente... tenía sentimientos por este hombre que la abrazaba.

Estaban juntos día y noche.

Aunque él hablaba con palabras malvadas, y todo lo que dijo era muy dañado como se fuera cortar su corazón e hígado, pero las cosas que había hecho por ella antes eran ciertas.

Nadie la trataba tan bien como él.

Ella se conmovió al fin, pues su corazón se tocó por él sin intención en ese momento.

Los sentimientos eran realmente una cosa muy tirana, se surgió sin razón y sin explicar por qué.

Surgió en su corazón un brote y creció lentamente...

Hasta ahora, profundamente arraigado.

Después de que la puerta del coche se cerró, Simón de repente escuchó un sollozo.

El corazón de Simón se dolió, miró hacia abajo a Frida, quién estaba en sus brazos, soltó la mano y pellizcó su barbilla, vio que Frida tenía la cara llena de lágrimas.

Las lágrimas lo dejaron trastornado.

-¿Por qué lloras?- alargó la mano y le limpió las lágrimas en las esquinas de los ojos.

Debido a que el movimiento era demasiado fuerte, la piel de las esquinas de los ojos de Frida fue rozada de repente en roja.