Esposa falsa de Simón romance Capítulo 862

Mientras las familias de Carlos y de Espinar la buscaron ansiosas a Zoe, Xenia no lo supo nada, porque tenía algo más importante, que la tía de Simón, Raquel, iba a visitarles.

Se lo dijo cuando le llamó por teléfono durante el almuerzo, que le sorprendió a Xenia al principio, pensando que no iba a venir porque había pasado mucho tiempo sin nada respuesta suya.

Entonces le contó brevemente a Raquel sobre los sucedidos recientes y la situación actual de Simón.

-Venid vosotros los dos recibiéndome en el aeropuerto -dijo Raquel después de un inmóvil silencio.

-Pero Simón no ha recuperado la memoria, ni te conozco de nada. ¿Le vas a contar la verdad? -preguntó Xenia preocupada.

-No te preocupes. No se lo diré nada de momento. Soy su tía, y quiero verlo en persona -contestó Raquel tranquila.

Siendo Raquel su tía, no le iba a hacer ningún daño, entonces Xenia no dijo nada.

“¿Pero si Simón la conoce de algo? Porque Raquel es también Raquel Carlos, ¿si había oído hablar de este nombre en su familia?” pensó Xenia preocupada, pero después de una inmóvil reflexión, decidió dejarlo como tal.

El tiempo pasó rápido. A punto de salir del trabajo, la preguntó Giuliana curiosa, -Últimamente sales del trabajo en el mismo tiempo en que sale nuestro señor.

Atónita por sus palabras, Xenia asintió.

-¡Qué rápido es el desarrollo de vuestra relación! No me digas que habéis vivido juntos -sonrió Giuliana.

Con su actitud que trató con Zoe, y con lo recta que era, Xenia sabía que Giuliana no era del tipo escandaloso ni tampoco le traicionaría, entonces le respondió -No es exactamente así.

-Entiendo ya -dijo Giuliana sonriendo.

Por su respuesta, pudo confirmar que estaban viviendo los dos juntos.

-Lo que me sorprende más es que nuestro señor, cuando llegó a su cargo, trataba con todo el mundo, sobre todo con las mujeres, tan indiferente y altanero, ¿quién hubiera pensado que … -murmuró Giuliana saliendo de la oficina.

Antes de salir del trabajo, Xenia miró la oficina de Simón recordando que llegaría Raquel a las siete por la noche.

Caminando Xenia distraída y llegó Simón a su lado en silencio.

Entonces Xenia se metió al coche pensando cómo le iba a explicar lo de la llegada de Raquel.

-¿Pasa algo? -preguntó Simón.

-¿En qué estás pensando? -dijo Xenia.

Hasta entonces Simón recuperó sus miradas y subió al coche.

Luego Xenia abrió el bolso y de él sacó un trozo de torta con crema.

De hecho, antes no le gustaban nada los dulces, sobre todo las tortas los panes.

Pero a su hijo le gustaban mucho y la obligaba a comerlos.

Cada vez que rechazó Xenia, Bernabé la preguntó, -Mamá, tanto las frutas como los dulces contienen azúcar que es necesario para la salud, pero no los comes casi nada, ¿cómo vas a suplementar el azúcar?

Entonces bajo la custodia de su hijo, iba acostumbrándose a comer los dulces y las frutas. Además, no quería desmayarse cuando le faltaba el azúcar.

Con un mordisco a la torta, ya se le pegó la crema alrededor de sus labios.

Mientras Simón la observó a través del espejo en silencio.