Esposa falsa de Simón romance Capítulo 912

El tiempo pasó por minuto y segundo, sonó el móvil de Xenia, ella la echó un vistazo, resultaba que fue Raquel quien la estaba llamando.

Al ver el nombre de Raquel, cambió un poco la cara de Xenia. Porque era el último día del año nuevo chino, por eso Raquel quería comer la cena con ellos juntos. Por fin, ella había ido a la casa hacia mucho tiempo,ella y Simón todavía no habían llegado.

Era posible que estará ansiosa por la espera, por eso la llamó por teléfono.

Xenia arregló un poco su emoción y contestó el móvil.

-¿Xenia, a qué hora es ya? ¿No es que Simón dice que te recoje salida del hospital? ¿Dónde estáis ahora?

Xenia miró alrededores, dijo sin remedio, -Estamos en el hospital.

-... no es que, ¿qué os pasa? ¿Por qué se tarda tanto en hacer la alta? ¿Habéis salido por mucho tiempo y todavía no lo termináis? ¿Es hoy un día especial y hay mucha gente?

-Tía... -la llamó Xenia y explicó, -la alta ya está hecho, pero... volvemos otra vez.

Raquel, -...

No oyó nada desde otro lado del móvil, Xenia apretó los labios y se volvió a mirar a Bernabé y otros que no estaban lejos de su lado. Se volvió otra vez.

-Además, está aquí Bernabé.

***

El doctor había acomodado a Simón cuando Raquel llegó al hospital.

El doctor dijo que Simón sólo se desmayó, no tenía problema su cuerpo. Pero Xenia no podía aguantar a preguntar con las cejas fruncidas, -¿No tiene problema? Pues por qué se desmayó de repente? Le vi sudando el sudor frío cuando llegó, además su cara no estaba bien.

El doctor asintió con la cabeza y preguntó la situación de aquel momento.

De todas maneras, el resultado de chequeo era que no tenía problema grave el cuerpo. Respecto a la razón de perder el conocimiento, había que combinar la situación de aquel momento para ver.

Una vez preguntó la situación, Xenia, Naomí y Rafael estaban dentro de la casa.

La persona que estaba con Simón fuera de la casa sólo era Bernabé.

Xenia miró hacia Bernabé y le agitó la mano,-Bernabé.

Bernabé había esperado casi medio día, no le abrazó una vez la mamá. Después de llegar al hospital, ella estaba esperando antes de la puerta ansiosamente, no le parecía como tuviera ninguna sorpresa de su llegada.

Al principio, sólo tenía un poco de injusticia, ahora vio que mamá sólo se recordaba de él cuando escuchó lo que dijo el médico. Bernabé sufrió más injusticia en la corazón.

-Ven. -Xenia se estaba puesta en medias cuclillas y hacía señas a Bernabé para que viniera.

Bernabé pensó detenidamente, creía que era mejor que no se enfadara con mamá en público. Por fin los que se sentían vergonzosas eran mamá y sí mismo. Así que él caminó hacia el lado de Xenia obedientemente, Xenia le cogía en los brazos con una mano y levantó otra mano a pelizacar su cara, la voz era mucho más suave cuando hablaba.

-Buen Bernabé, ¿qué le pasó a tu papá cuando estabáis fuera de la casa antes? ¿No estaba bien cuando salió? ¿Por qué se desmayó de repente?

Bernabé pestañeó, recordaba la situación de aquel momento.

Simón le abrazó de repente aquel momento, él estaba hablando con papá.

-Gem, no creas que me abrazas, ¡y te voy a perdonarte fácilmente!

Después de decir eso, papá tampoco parecía raro, le soltó después de abrazarle y luego sobaba su cara levemente con la mano grande, los ojos llevaban más color de calor.

Bernabé gimió y batió su mano.

Entonces, la cara de papá cambió. Las cejas estaban fruncidas fuertemente, parecía que estuviera doloroso. Al principio Bernabé creía que él estaba fingiendo, pero Bernabé se dio cuenta de que él estaba desmayado después de que Simón cayó al suelo.

Entonces Bernabé contó todo lo que pasó detalladamente.

Raquel les encontraron por fin, vino corriendo desde el pasillo. Vio que Naomí, Rafael y Bernabé todos estaban aquí, quedó atónita y caminó adelante en seguida.

-Tía -Xenia la llamó.

Naomí y Rafael no tenía mucha relación con ella, sólo podían asentirla con la cabeza.

-¿Qué le pasó a Simón? ¿Qué dice el médico? -Raquel preguntó,

Xenia dijo a Raquel lo que dijo el médico recientemente.

Raquel asintió con la cabeza después de oír eso, -Menos mal que esté bien.

Luego vio al chiquito que estaba al lado, preguntó,-¿Bernabé, por qué no me llamas abuela Raquel?

Bernabé pestañeó los ojos mojados.

Por fin alguien le presentó la atención.

-Abuela Raquel. -Bernabé la llamó lastimosamente.

Esta llamada entró en la corazón de Raquel directamente, ella le contestó y extendió las manos a abrazar a Bernabé, -Este niño es muy bueno, mi corazón se derretiría por la llamada.

-Abuela Raquel -Bernabé vio que ella estaba contenta, y la llamó otra vez.

Raquel lo escuchó y los ojos llenaba de risa y mino, pelizacó su cara suave, -No quedas en el país en invierno, ¿y qué haces en el país extranjero?

El chiquito adelante se parecía lo mismo a Simón. Raquel parecía que viera a Simón de pequeño cuando le vio.

Su corazón estaba tierna totalmente.