¡Jefe, Mis Gemelos, Tu Problema! romance Capítulo 149

Gabriela había publicado en Facebook condenando a Sabina por lastimar a su hija y estaba furiosa por su negativa a disculparse, el escándalo había estallado en el círculo de los famosos. Incluso la gente del Club de la Musa comenzó a chismorrear sobre el tema.

Abril admiraba mucho la serenidad de Filemón, a pesar de ser el protagonista principal de ese incidente, se comportaba como si solo fuera un observador externo. En ese momento, él estaba sentado a su lado, contando historias a sus hijos, haciéndoles educación prenatal. Mientras ella ‘comía’ palomitas viendo los comentarios en internet.

[¿Quién se quedará con la posición de la señora Galindo? No está tan claro]

[Si Natalia todavía estuviera viva, la posición seguramente sería suya. No es imposible que Fiona tome el lugar de su hermana]

[Sabina tampoco es tonta, después de todo, es de la realeza, ¿qué no sería capaz de hacer?]

[Es cierto, la muerte de Natalia fue extraña, como si se hubiera evaporado]

[Quizás alguien la mató]

[Si no tienen pruebas, no digan tonterías, tengan cuidado de no desaparecer ustedes también]

…

Un escalofrío recorrió la espalda de Abril. ¿Podría ser que Natalia fue asesinada? Según la línea de tiempo, el accidente de Natalia debió haber ocurrido cuando Filemón fue víctima de un intento de asesinato y estaba en el hospital.

¿Podría ser que alguien aprovechó que Filemón estaba herido y no podía protegerla para matarla?

Inconscientemente, ella giró la cabeza y echó un vistazo a Filemón. El miedo en sus ojos fue percibido por él.

"Las mujeres embarazadas no deben ver cosas aterradoras".

Ella rápidamente cerró su celular, él debía pensar que estaba viendo videos de terror. No podía permitir que supiera que estaba chismorreando. "Estoy cansada, quiero dormir un rato".

La mirada de Filemón cayó sobre sus mejillas, se detuvo un momento, una expresión indescriptible emergió de sus ojos, como si un lago helado se estuviera derritiendo ligeramente, creando un ligero ondulado. Pero solo duró un instante, y rápidamente volvió a congelarse.

Bajó la mano, tomó un sorbo de agua de la mesa de café.

"Ya que es educación prenatal, tú también deberías participar". Su tono era deliberadamente neutro.

Ella asintió en voz baja, entendiendo que su gesto anterior solo pretendía que el bebé sintiera el amor de ambos padres.

"Voy a dormir un poco más". Ella cerró los ojos, escondió su mano en la almohada en silencio, aún podía sentir el calor de su mano en la suya.

Sin embargo, ella sabía que, su calor nunca sería para ella.