Él la agarró por los hombros, apoyándola contra la pared, "¿Quieres tener una guerra fría conmigo?"
Ella estaba un poco sorprendida.
¿Guerra Fría? ¿Se atrevería ella?
Si se trataba de ser frío, ¿quién podría superarlo?
"Te equivocas, solo pienso que somos un matrimonio por conveniencia, pronto nos divorciaremos, mantener una relación tranquila era lo mejor."
Una luz fría y amenazadora brilló en los ojos de Filemón, "Quieres estar con alguien más, ¿verdad?"
"No importa, piensa lo que quieras." Ella no quería explicar, su expresión era fría como el viento.
¿Y si eso es lo que ella quiere?
¡Estaba en su derecho!
¿No está él también saliendo con otras mujeres, pegados como chicle y cariñosos?
¿Qué derecho tiene de controlarla?
¡No hagas a los demás lo que no quieres para ti!
Filemón le agarró la barbilla, su voz tenía un tono de furia, "¡No desafíes mi paciencia!"
¡Esta mujer estaba a punto de volverlo loco!
Una sonrisa ligeramente triste apareció en su rostro, "¿Cómo me atrevería a desafiarte? Solo quiero mantenerme a distancia, ¿acaso eso está mal? Yo no soy como Sabina, pidiéndote atención y cariño todo el día. No somos siquiera amigos normales, por favor no pidas demasiado de mí, ¿está bien?"
Ella se liberó de su agarre y se dirigió hacia la habitación sin mirar atrás.
Cada palabra suya era como una bala golpeando su corazón.
Él la miraba fijamente mientras se alejaba, frunciendo el ceño, con los ojos ardiendo el pecho agitado pesadamente de rabia, como un soplador.
Avanzó rápidamente, la atrajo hacia él, sosteniendo su cabeza, sus labios dominantes la asaltaron como una tormenta, robándole un beso brutalmente, como si quisiera devorarla.
"Uh ..."
Ella golpeó sus hombros tratando de alejarlo, pero fue en vano.
Levantó la mano y lo abofeteó.
Un sonido crujiente resonó en el aire.
Dos huellas rojas aparecieron en su mejilla lisa.
Un fuego furioso ardía en su frente, haciendo que sus cejas se arrugaran.
Sus rasgos guapos se torcieron, su rostro estaba pálido como el papel, las huellas de los dedos y las manchas de sangre en la comisura de su boca resaltaban, eran rojas y llamativas.
Sus ojos se abrieron de par en par, mirándola fijamente, con furia, como si quisiera devorarla.
Nadie se había atrevido jamás a ponerle un dedo encima, ¡y ella fue la primera!
Abril también se asustó, retrocediendo inconscientemente hasta que la pared bloqueó su camino, su cuerpo temblaba como una hoja en el viento, sus manos instintivamente se llevaron a su vientre.
Abrió la boca, queriendo decir algo, pero debido al miedo extremo, su garganta se contrajo y no pudo emitir un sonido.
La mirada de Filemón cayó en su vientre, inhaló profundamente a través de sus dientes apretados, luego se giró y salió violentamente, dejando la habitación llena de frialdad e ira.
Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: ¡Jefe, Mis Gemelos, Tu Problema!
Suban más de 20 capitulo diarios 🤭 por favor 🙏🏼...
Ne encantan suban muchos capítulos por favor 💘...
Más capítulos por favor...
Ojala suban mas cap, esta buenisima:)...