La lectura abre puertas inimaginables. Podemos hacer y ser lo que queramos dentro de nuestra mente.
Sumergirse en una lectura caliente puede ser una calle de un solo sentido.
Es adictivo, emocionante ya menudo dramático. ¿Y a quién no le gusta un amor dramático de vez en cuando? Me encanta.
Es bueno tenerlos aquí, siguiendo las emociones que un libro como este puede brindar.
Gracias a todos los lectores que me han seguido hasta aquí, son mi motivación diaria para seguir escribiendo.
Espero que os haya gustado y que sigáis el segundo libro de esta apasionante historia, que verá la luz próximamente. Cuento con usted.
¡Un gran beso del sol!
Instagram: @autorasolrodrigues
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Los comentarios de los lectores sobre la novela: La hija de mi padrastro