La Nueva Esposa de mi Marido (COMPLETA) romance Capítulo 62

Elisa se quedó perpleja, pues sabía que Sasha era sensible a este tema por la pérdida de su bebé, y había pensado que quizá ella estaba descansando y no la escucharía.

—Elisa... Jacob te dará los días que quieres.

Tanto Elisa como Jacob se sorprendieron por los que dijo Sasha, Elisa había imaginado a Sasha intentar hacerla cambiar de opinión, pero no fue así.

—Sasha, yo...

—No digas nada, sólo quiero que después de interrumpir el embarazo le digas a José que era su hijo —dijo Sasha y se puso a recoger los pedazos del vaso con mucho cuidado, lo que sorprendió a Elisa.

—¡Oh por Dios! ¡recuperaste la vista!

—Sí —dijo Sasha con una sonrisa que no engañó a Jacob, a Sasha le dolía la decisión de Elisa, pero la apoyaría como amiga, y también ambas mujeres dejaron el tema de José a un lado.

—¿Cuándo....

—Esta mañana desperté así.... Mañana le daré la sorpresa a mi familia, así que no le digas nada a Orlando —dijo Sasha, puso el dedo índice en sus labios y cerró un ojo.

—Claro que no, mi boca está callada —dijo Elisa y simuló que cerraba un cierre en su boca, y ya con la autorización de vacaciones, salió de la oficina Elisa.

—¿No le digas nada?

Sasha negó con la cabeza:

—Si ya lo decidió, no hay nada que le pueda decir para que cambie su decisión... pero me preocupa que esté tan deprimida.

Jacob le iba a decir algo a Sasha cuando se escuchó la puerta, eran las personas que mandó llamar Jacob, con esto Sasha se distrajo un poco mirando los diseños que tenían para personalizar un arma, y también se quedó algo confundida con el software nuevo que tenían, los dos hombres le dijeron que ellos apreciaron mucho este obsequio, el hombre encargado de la personalización en armas le dio algunas ideas a Sasha para personalizar el arma para Sánchez, pero Sasha escogió un diseño el cual podía ser cambiado si no le gustaba a Sánchez, el arma iba a llevar escrito Sánchez en la Corredera, la empuñadura tendría unas iniciales y hecha de un material flexible y cómodo a la hora de disparar.

Sasha escogió un color gris y las letras en dorado, aunque era un diseño sencillo, sólo era para que Sánchez la pudiera diseñar como a él le gustaba.

Después de que se fueron los hombres, Sasha se fue a revisar la revista y Jacob se puso a trabajar hasta que fue la hora de salir, en casa cenaron y le preguntaron a Naomi que si había dicho algo a mamá o alguien de la familia, y esta dijo que no, así que Jacob y Sasha le dijeron que no dijera nada y esta asintió, después Sasha y Jacob subieron a la habitación.

—Estoy muerta y no sé porqué —dijo Sasha dejándose caer en la cama.

—Anduviste caminando por toda la oficina todo el día y no quieres estar cansada... vamos a bañarnos, ojitos.

Sasha se levantó de la cama y ambos se bañaron, Sasha notó un poco extraño a Jacob, pero no dijo nada, cuando estaban acostados Jacob dio un suspiro.

—Sasha ¿cómo fue tu primer beso?

Sasha se le quedó mirando y luego pensó un poco:

—Asqueroso.

Jacob la miró aunque no había rastro de disgusto en Sasha más bien diversión.

—Como es un primer beso, en mi caso el segundo fue más asqueroso jajajaja.

—Ah ¿sí? y ¿porqué? —Jacob robaba que no hubiera olvidado otra cosa más.

—Porque fue con mi mejor amigo, ahora que lo pienso, quizá fue por eso que José al principio era sólo gay.

—¿José? —preguntó Jacob confundido y curioso.

—Sí, José no sabía besar y yo ya había tenido mi primer beso a los 7 años, así que me pidió que le enseñara —si Jacob le enseñó a besar a José indirectamente. ¿Pueden creerlo? ni yo. Bueno, Jacob se le quedó mirando a Sasha y entrecerró los ojos—, no me mires así, fue tan asqueroso igual para él, nunca nos hemos visto más que como amigo o hermanos, y me dijo el muy desgraciado después, que por mi culpa se había perdido de disfrutar más con mujeres.

—Entiendo, ¿quién te dio tu primer beso?

—No lo sé, recuerdas la foto y te conté de un niño mayor, bueno, pues fue él, me hizo llorar, le grité lo que se me ocurrió en ese momento, y después de que mi papá me calmó, le hice la pregunta incomoda a papá ¿cómo se hacen los bebés?, yo pensaba que con sólo besarse era posible, pero papá fue muy paciente y me explicó como pudo —Sasha sonrió al recordar.

—Tú ¿lo odias por quitarte la inocencia?

—No, al principio sí, pero cuando papá me explicó más o menos como se habían los bebés, no pude odiarlo y más porque era muy hermoso, parecía un ángel de ojos a verdes.... yo lo siento, Jacob, no es que aún me guste o algo así —dijo nerviosa Sasha al mirar serio a Jacob, sólo pudo pensar que se puso celoso.

—Yo odiaba que me dijeran así cuando niño y parte de mi adolescencia.... —Jacob se volteó y sacó un marco y la cajita de la mesa de noche—, esta es la foto que te dije.

Le entregó la foto a Sasha y esta pasó sus dedos por la foto y más por el rostro de papá:

—Era bastante guapo papá.

—Mira bien la foto, hay alguien más en ella.

Sasha se fijó mejor, miró a aquel niño que ahora miraba mejor y era un chico un adolescente aunque aún tenía aspecto de niño con facciones femeninas.

—¡Es él!... debe ser ahora muy guapo o quizá se parezca más a una mujer —Sasha dio un golpe directo a Jacob sin saberlo y este puso una cara fría, pero se tranquilizó diciéndose que ella no lo hacía para molestarlo.

—Sasha yo.... yo no soy una buena persona, te contaré algo.... —Sasha miró a Jacob y vio que tenía una cajita vieja en las manos y esperó a que él le contara—, cuando tenía 16 años yo me obsesioné con una niña de 7 años de edad después de besarla.

Jacob le entregó a Sasha la cajita, Sasha al inicio pensó que había hecho algo imperdonable cuando le entregó la cajita.

—Ábrela.

Sasha abrió la cajita y al ver el broche le pareció familiar, la foto le dio la respuesta, y empezó a unir piezas, pero Jacob terminó por aclarárselo, le señaló al adolescente de la foto:

—Ese adolescente soy yo —Sasha volteó a mirar a Jacob y luego al chico de la foto y su broche—, Sasha, yo lo siento...

—¿Qué clase de obsesión tenías?

—Yo.... quería todo lo que un adolescente lleno de hormonas quiere con una chica, sólo que era una niña.

—Eso quiere decir que te gustaba la niña, no era una obsesión.

Jacob miró a Sasha y luego pensó un momento:

—Supongo que sí.

Sasha dio un suspiro:

—¿Me hiciste un altar extraño?

—Claro que no.

—Me buscaste y me seguiste en secreto?