La Nueva Esposa de mi Marido (COMPLETA) romance Capítulo 80

Sasha despertó en los brazos de Jacob y este la miraba con amor y le sonrió:

—Buenos días, pequeña.

—Buenos días, general —dijo Sasha y Jacob la besó, después Sasha se acurrucó en el pecho de Jacob, era día primero de noviembre fecha que se recuerdan a los niños que fallecieron y Sasha parecía haber olvidado el día, así que Jacob la abrazó suspirando aliviado—, Orlando y Azul están aquí, es bueno tener visitas que se quedan a dormir.

—Sí, es verdad aunque no podré hacerle el amor a mi esposa todo el día como había planeado.

Sasha se sonroja y sorprende al mismo tiempo, voltea a ver a Jacob y le da un empujoncito.

—¡Jacob!... —Sasha desvía la mirada y se pone más roja, cosa que le causa ternura a Jacob—, hacemos el amor casi todos los días cuando podemos y donde podemos... ¿tú aún quieres hacerme el amor todo un día?

—Nunca podría sacarme de hacerle el amor a mi bella y pequeña esposa —Jacob le acaricia la mejilla a Sasha—, pero también entiendo si mi pequeña está cansada, ¿qué tal salir en parejas con Orlando y Azul?

Sasha sonríe y mira a Jacob.

—Sí, me gusta la idea —dice muy animada, el salir para Sasha es lo mejor, aunque sólo sea a dar un paseo por el centro comercial, siempre y cuando sea a lado de Jacob, eso siempre la hará sonreír. Jacob la abrazó y se volteó con todo y Sasha dejándola sobre él.

—¿Qué tal ir a la playa?

Sasha lo miró muy ilusionada.

—Sí, sí, quiero ir a la playa —dijo y comenzó a llenar de besos la cara de Jacob, llegó a sus labios y el beso se hizo más profundo. Jacob le acarició los glúteos a Sasha y luego hizo a un lado la panty, es tan suave y delicada la tela con la que está hecha que la mete en la división de los glúteos de Sasha y también entre sus labios vaginales, al jalar un poco hace fricción en el clítoris haciendo que gima Sasha, pero es ahogado el gemido, ya que aún siguen besándose.

—¿Cerraste la puerta con seguro?

Sasha miró a Jacob:

—No.

Jacob se giró dejando a Sasha debajo de él.

—Iré a cerrarla, no quiero que vean lo que hacemos —dijo Jacob y se bajó de la cama.

Sasha por su parte en lo que Jacob regresaba de desnudo y sólo puso sobre su cuerpo desnudo la sabana blanca, aunque la verdad es que Sasha sólo se quitó la panty y el babydoll, ya que usualmente no usaba brasier para dormir, cuando Jacob la miró, sonrió y aquella excitación creció al igual que la erección que tenía, fue directo a la mesita de noche por un preservativo, el cual se puso de inmediato, Sasha suspiró al verlo ponerse el preservativo, ya con el preservativo puesto Jacob quitó la sabana despacio haciendo que el recorrido de esta en el cuerpo de Sasha fuera como una caricia.

—Quitar la sabana me recordó algo —dijo Jacob y comenzó a besar las piernas de Sasha.

—¿Ah sí? ¿qué cosa? —preguntó Sasha con la respiración entre cortada por la excitación y después mordió su labio inferior al sentir cómo Jacob llega a su entrepierna.

—Aquella noche que te dije que te deseaba y vuelto loco por el deseo sin pretenderlo, te hice llorar —dijo Jacob y luego comenzó a besar toda aquella zona llena de estimulación para Sasha.

—Mmm sí, lo recuerdo, en ese momento yo ya sabía que te quería, pero no quería salir herida por tus palabras, ahhh —gimió Sasha cuando Jacob mordió con suavidad su clítoris, y luego miró a Sasha.

—¿Cuándo lo supiste? —preguntó Jacob y volvió a lamer al rededor del clítoris.

—Mmm ahh ¿qué cosa ahhh? —Sasha terminó la palabra en un gemido cuando Jacob le volvió a morder el clítoris.

—No me hagas preguntarte de nuevo, pequeña, esta será penúltima vez si no te daré un castigo —Sasha sabía que se refería a que la iba penetrar sin previo aviso y lo iba a hacer fuerte—, ¿cuándo supiste que me amabas?

Sasha se mordió el labio inferior al sentir cómo Jacob le daba placer con la lengua en toda su zona íntima.

—Aquella vez... esa misma noche que me abrazarte.... supe que sentía más que cariño por ti... y José me lo confirmó... cuando vino... al día siguiente.... —decía Sasha entre gemidos y pausas, ya que el placer que sentía le impedía hablar con fluidez, al escucharla Jacob no dejó de darle placer a Sasha, ya que estaba feliz por saber cuándo su pequeña esposa empezó a sentir amor por él, después de provocarle un orgasmo a Sasha, se colocó entre sus piernas y la penetró suavemente y tomó las manos de Sasha.

—Te amo Sasha, contigo a mi lado soy el hombre más feliz.... eres mi complemento y te amoldas a mis necesidades, y eso me fascina de ti, mi pequeña y amada esposa.

—También te amo, Jacob... Jacob, siento que fui hecha sólo para ti...

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: La Nueva Esposa de mi Marido (COMPLETA)