MÍ HUMANA FUERTE (COMPLETO) romance Capítulo 41

T I E M P O D E S P U É S

POV'S AS

Lo miro de pié a cabeza de forma disimulada, miro sus puños venir hacia a mí pero los esquivó, veo sus intenciones y sujeto de pierna en el aire, lo empujo y él trastabilla pero no lo detiene, vuelve arremetir contra mí, sonrío de lado, sujeto su puño y en un movimiento rápido agarró su muñeca lo doy vuelta; pegando su espalda contra mí pecho, trata de darme un codazo pero sujetó su otra mano contra su espalda, gruñe molesto, él se remueve molesto y trata de salirse de mí agarre pero hago más presión pero sin lastimarlo.

—Tranquilo, respira y piensa—susurro en su oído.

Él se relaja y se deshace de mí agarre, sonrío con orgullo, me doy la vuelta y comienzo a caminar hacia donde deje los palos, agarro ambos y le lanzo a un él, quien lo agarra fácilmente. Me pongo en posición de ataque y él hace lo mismo, pateo la tierra, haciendo así que se levante polvo y retroceda unos pasos y sin dudarlo lo ataco y él trastabilla al final cayendo al suelo.

—Eso es trampa—musita fulminándome con la mirada mientras se pone de pié.

—Tu enemigo nunca va jugar limpio—respondo sonriendo de lado. Me apoyo en palo y lo miró con una ceja enarcada.

—Lo mismo digo—murmura sonriendo

Lo miro confundida y él golpea mí palo, pierdo el equilibrio y trata de tumbarme pero lo pateo haciendo que retroceda, pero aún así me vuelve atacar, ruedo los ojos, terco

«Es tu karma mí Luna»

Maldito Pulgoso, tenía razón, pero nunca se lo iba dar.

—Aun te falta mucho por aprender—murmuro empujándolo—Suficiente por hoy—sentencio dándome la vuelta

—De acuerdo—responde bufando.

Recojo mí bolso, miro sobre mí hombro y veo que él alza su mochila, suspiro, ambos comenzamos a caminar hacia a la manada. Kraven ya tenía 17 años y Beth estaba por cumplir sus 22 años y aún no encontrado a su mate y su padre feliz por ello, suspiro, en cuanto a Deamon nadie a sabido nada él, aprieto mí agarre en el palo, la última vez que lo vi fue cuando apareció en el Consejo preguntando por Zoe, pero eso fue hace 17 años, ya que cuando supe de mi embarazo de Kraven fue un mes después de ello, pero  cuando se fue una opresión en el pecho se hizo presente pero no le di importancia, fui una tonta ¡Maldita sea!

—¡Mama!—exclaman, salgo de mis pensamientos y miro al responsable—¿Que sucede?—cuestiona preocupado.

—Nada, solo recordando unas cosas, disculpa, hijo—respondo sonriendo de lado.

—¿Cosas? Tu nunca recuerdas "cosas"—dice haciendo comillas con sus dedos la última palabra.

—¿Cuándo se irán?—pregunto cambiando de tema.

—En dos semanas por dos meses—responde con en tono serio.

&Sé que lo harás bien pero ¿Te puedo dar un consejo?—pregunto dejando de caminar y lo miro a él.

—Claro, mama—responde. confundido.

—Va llegar el momento en que vas a fallar en una misión pero eso no significa que te debas rendir y culparte o culpar a tu grupo. Tendrás que levantarte y seguir luchando porque afuera van ha seguir habiendo personas malas lastimando a inocentes y tú eres su única esperanza, ¿Si? —digo colocando mí mano sobre su hombro izquierdo.

—Tienes razón, mama—sonríe de lado—Yo no encontraba la respuesta a esa pregunta que me hacía desde que comencé en la academia, pero ahora tú me las dado—dice Kraven abrazándome.

Le correspondo gustosa, él no es una persona muy expresiva con sus sentimientos, el Pulgoso tiene razón , él es idéntico a mí en todas las formas posibles, nos separamos y continuamos caminando mientras íbamos hablando de cosas triviales. Pero mí mente se quedó en el momento cuando él comenzó crecer y empezó hacer preguntas, al principio sentí miedo pero luego todo ese miedo que sentí muchos años se esfumo cuando él dijo que no importaba, nosotros éramos su familia y se iba quedar con nosotros pero luego que él cumplió 15 años les conté a ambos quien fui en el pasado y desde allí decidió ser un cazador. Tanto como Beth y él ese día me abrazaron y me dijeron que se sentían muy orgullosos de ser mis hijos.

—¿Te puedo hacer una pregunta?–—cuestiona Kraven sacándome de mis pensamientos.

—Por supuesto—respondo llegando hasta entrada del bosque.