MÍ HUMANA FUERTE (COMPLETO) romance Capítulo 42

POV'S AS

Ella me sonríe con nerviosismo, mí expresión es seria, no estaba de buen humor para rodeos. Se hace a un lado y entro a su casa para ir directamente donde al living

—Se porque estas aquí—habla ella a mis espaldas.

—Llámalo—ordeno seria.

Ella suspira pero comienza a llamarlo, suspiro, no me gusta ser así con ella pero se lo merece por encubrirlo durante todos estos años. Me giro sobre mis talones y miro la neblina que comienza hacerse presente en la sala

—¿Que pas...

Su pregunta queda suspendida al verme a mí, se tensa, lo puedo notar. Mí expresión no cambia en nada, él suspira y mira a Blanca, ella asiente y va hacia otra parte. Aun así sé que va a escuchar la conversación.

—Sé que tienes motivos para hacer lo que hiciste—hablo seria mirándolo a los ojos.

Podía ver en su mirada que estaba cansado, dolido, furioso, muchos sentimientos juntos.

—Si—suspira—Sé que debía volver cuando ella cumpliera la mayoría de edad pero se han complicado las cosas en el inframundo y si iba por ella en estos momentos iba estar en peligro.....

—No es a mí quien tendrás que dar explicaciones—suspiro—No te voy a negar que me molesto que no fueras por ella pero en mí interior sabía que algo grave estaba pasando para que hayas desaparecido así como así. Deamon, no se contra que luchas pero ella te va aceptar—me acerco y coloco mí mano en su hombro derecho—Hazlo antes que sea demasiado tarde—dicho eso salgo de allí.

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Ambos son buenos pero se contienen, suspiro, Beth se ha vuelto buena en combata de ambas formas pero aun así, ella sigue entrenando. En cuanto a Kraven junto con su equipo se han vuelto los mejores, es decir, que ahora son de la Élite, siempre lo fueron pero ahora es oficial, aunque aún no nos superan a las chicas y a mí, cierro los ojos y dejo que la brisa me acaricie suavemente, la preocupación y enojo por Deamon no desaparecen, suspiro, como dije anteriormente, sé que debe tener sus motivos pero aun así no logro despejar mí mente de esos sentimientos.

Un toque en mí pierna hace que salga de mis pensamientos, miro al culpable, Lobo Negro, me agacho y comienzo hacerle cariño. Su presencia es un misterio para mí, ya que Blanca se niega decirme el motivo de su presencia, lo único que me dijo que yo era su dueña y el mí guardián, suspiro, al principio fue algo estresante porque ambos compartimos un lazo y me olvidaba por completo. Una vez ataco a Dominic, yo estaba furiosa y discutimos tanto hasta que él entro a la habitación y salto sobre él, ante ello tuve que aprender a manejar mis emociones.

—¿Qué sucede?—preguntan sacándome de mis pensamientos.

Cuando dije que fue estresante compartir un lazo con el Lobo Negro es porque también comparto uno con Dominic y tener a ambos preocupados por mí es algo extraño y a la vez gracioso.

—Lo vi—suspiro—Algo está sucediendo en el inframundo—murmuro mientras me enderezó.

—Zoe está a punto de cumplir 32 años—habla con cierta molestia.

Si, veintitrés años han pasado desde que Deamon se fue, suspiro, desde entonces Zoe se ha dedicado en ir manada en manada en búsqueda de su mate luego de cumplir 20 años.

—Dominic entiendo tu enojo pero no podemos decirle nada por ahora—suspiro—Si le decimos, querrá ir por él, pero como te dije, el inframundo tiene problemas y sería peligroso—musito mirándolo a los ojos.

—Han pasado 23 años—masculla mirándome irritado.

—No tengo ánimos de discutir Dominic—murmuro con cierto cansancio dándome la vuelta.

—¡Te importa más él que tu propia familia!–exclama mientras me sujeta mí brazo y me giro para que lo vea a la cara.

La ira comenzó a correr por mis venas, Lobo Negro estaba tenso. Sin dudarlo lo golpeo, una lágrima cae por mí mejilla, no voy a negar que sus palabras me duelen y él lo sabe.

—¿Quieres la felicidad de tu hermana? Entonces piensa cuidadosamente las cosas. El inframundo no es juego—digo soltandome de su agarre y me giro sobre mí talones.

—Lo siento, sol.....

—Lo se, pero lo único que nos queda hacer es que las cosas fluyan a su manera. Zoe va entender en su debido momento, bueno, eso quiero creer yo al menos—suspiro—Pero si las cosas se salen de control le diremos todo.