Receta para robarle el corazón al Dr. Farel romance Capítulo 358

La Sra. Haro lo miró con una ceja levantada. —Vaya, sí que sabes proteger a los tuyos. —

Farel con toda seriedad le replicó, —Sólo sigo el ejemplo que tú y papá me dieron desde pequeño, ¿no es lo correcto? —

Esa sutil alabanza dejó a Victoria sin palabras.

Ella pensó que Farel nunca le diría algo así, después de todo, había visto su indiferencia hacia Olivia con sus propios ojos.

Al final, resultó que simplemente no le gustaba.

Con otra mujer, el corazón de Farel ya estaría volando.

—Bueno, ya que estás aquí, da una vuelta por la casa y quédate a comer al mediodía. —

La puerta del estudio se abrió y Federico salió, interrumpiendo la conversación en el momento justo.

Farel, aprovechando la oportunidad, pasó su brazo sobre el hombro de Evrie, mostrándose extremadamente cariñoso.

—Voy a llevarla a mi habitación a descansar un rato. —

Después de que se fueron, el rostro de la Sra. Haro seguía mostrando descontento.

—¿Realmente estás de acuerdo con que se case con una mujer así? —

—¿Qué otra opción hay? ¿Que se case con Olivia? —

Federico se masajeó el entrecejo con una mueca de resignación.

—Sus vidas son totalmente distintas, él al parecer no teme ser el hazmerreír de todos. —

La Sra. Haro frunció el ceño, se veía claramente disgustada. —Incluso sin la Familia Da Silva, mi hijo no debería casarse simplemente con cualquier mujer. —

—Él no se casa con cualquiera, él la ha escogido deliberadamente. —

Federico la interrumpió. —¿Crees que la Familia Da Silva cayó por sí sola? Tu hijo jugó un papel importante en eso. —

La Sra. Haro se quedó en silencio.

Ella sabía muy bien que Farel no quería a Olivia.

Pero con la gran diferencia entre las familias, no podía asimilarlo tan fácilmente.

Además, después de vivir tantos años y haber visto todo tipo de matrimonios en su círculo social, nunca había visto a una pareja desigual llegar a viejos juntos.

No quería que el matrimonio de Farel tuviera algún problema en el futuro.

—Al menos su familia ha sido campesina por tres generaciones, no viene de ninguna familia disfuncional, así que no debería hacerle ningún truco sucio a nuestro hijo. Si él la quiere, déjalo que se case con ella. —

—Buenos Aires, París, Nueva York, Río de Janeiro, Roma... has estado en tantos lugares desde pequeño. —

Evrie miró esas fotos con admiración.

—¿Reconoces todos esos lugares? — Farel se mostró sorprendido.

Evrie señaló hacia los edificios de fondo. —Son todos edificios emblemáticos, los he visto en películas y libros. —

Farel la miró y captó fácilmente el gran anhelo en sus ojos.

Extendió su mano, atrayendo a la joven hacia su pecho.

—En el futuro, te llevaré a todos esos lugares, poco a poco. —

Evrie asintió, con un brillo en sus ojos.

—Me encantaría. —

De repente, como si recordara algo, se giró hacia Farel y le dijo, —Te voy a hacer una pregunta, no te enojes, ¿eh? —

—Dime. —

—Tú y Olivia estuvieron juntos tantos años, ella me dijo que incluso vivieron juntos en algún momento, ¿ella fue tu primer amor? —