Todo resultó mejor de lo que esperaba. Jace es compatible con Matty. No tuve tiempo de preguntarle si estaba seguro de hacer esto porque cuando me enteré, él ya estaba en el quirófano realizando la dolorosa operación, en donde con una jeringa le extraen sangre medular de entre los huesos. Todo esto con anestesia claro, pero no deja de verse bastante doloroso. En verdad no sé si es así, pero que te saquen algo que está dentro de tus huesos y además en los huesos de la columna no debe ser para nada agradable.
La donación fue hecha con éxito. El cuerpo de Matty no rechazó nada, que era el mayor temor de los doctores. Ahora lo único que queda es esperar a ver si mi hijo mejora o sigue igual. Espero que este tratamiento funcione. No sé qué haríamos si no funcionara...
Mi vida ha estado bastante ajetreada. No he podido dejar de trabajar porque tengo cuentas, tanto médicas como de la casa, que tengo que pagar. Así que mi rutina es básicamente así. Mamá y Emma se turnan para cuidar a Mia mientras yo trabajo. La otra se queda en el hospital todo el tiempo. Cuando salgo del trabajo, a eso de las tres o cuatro de la tarde, voy al hospital y me quedo allí hasta las diez de la noche. Luego me voy a casa a cuidar de Mia.
Tengo mucha suerte de que Emma sea todo un genio y ya haya terminado este año de la universidad. Según dice, pasó todos los ramos sin problemas y ahora solo van a la universidad los que tienen que dar exámenes para ver si pasan el año. Sin Emma sinceramente no sé qué haría, se lo agradezco cada vez que puedo. Incluso creo que ya está bastante cansada de mí.
Josh suele acompañar a Emma algunos días, creo que él sigue yendo a la universidad por lo que no puede estar siempre al pendiente. Esos dos parecen tener algo. Su humor cambia radicalmente cuando están juntos, a veces para bien, a veces para mal. No he tenido tiempo de preguntarle a mi hermana que es lo que se trae en manos ella y Josh.
En cuanto a Jace... él está cerca de nosotros cuando puede. Hay días en que él cuida a Mia, pero hay otros días en los que no aparece mucho. Supongo que está trabajando. No le he preguntado mucho sobre eso. En verdad no hemos hablado mucho esta semana.
Hoy es sábado. Mamá está en el hospital con Matty y me pidió que pasara este día con Mia. Como la veo solo en las noches no estoy compartiendo mucho con ella así que no dude cuando le dije que cuidaría de mi pequeña hija todo el día. Emma iba a salir, aunque no me quiso decir con quien. Espero que, con Josh, esos dos hacen linda pareja.
Ahora estoy en casa con Mia, Alexandra y Cam. Sarah, la madre de la pequeña Lexie, me pidió que la cuidara todo el día. Es primera vez que lo pide. Normalmente solo se va y la deja sola, teniendo que rescatarla. Cameron aprovecha el día con su pequeña hija. Como había estado atareada con Matty no había tenido tiempo de cuidar de Lexie y si yo no la cuido él no la ve.
-Así que...- comienza Cam mientras juega con Lexie y yo con Mia- el padre volvió.
-Si, Jace volvió.
- ¿Un poco tarde no crees?
-Sabes que él no sabía de los mellizos, Cam.
La mandíbula de mi amigo se tensa. Ha estado así toda la semana, en verdad no entiendo mucho que le pasa.
- ¿Volverás con él? - pregunta.
-Para volver tendríamos que haber tenido una relación en algún minuto.
-Vamos, Madison- dice casi gritando, espantando a Lexie, Mia e incluso a mí- Sabes a lo que me refiero. Tus ojos no han dejado de brillar toda la semana.
Me sonrojo. Sé que he estado mejor de humor y físicamente y también sé que es gracias a la vuelta de Jace, pero decido que si quiero mantener la amistad que quiero tener con Cam, es mejor que él no sepa eso. No a menos que Jace y yo de verdad tengamos algo, aunque eso se ve bastante lejano ahora...
-Matty tiene posibilidades de estar mejor, ¿Cómo no estar feliz por eso?
Cameron parece como si fuera a replicar, pero en ese momento alguien toca el timbre de la puerta. Mi amigo se levanta del suelo, que era donde estábamos jugando, y va a abrir la puerta con Lexie en sus brazos. Me los quedo mirando, se parecen mucho. Alexandra sacó más cosas de su padre que de su madre. Tienen el mismo color de cabello marrón oscuro, casi negro. La misma nariz y los mismos labios.
Tomo a Mia en brazos y comienzo a caminar a la puerta detrás de Cam. Cuando llego siento su voz tensa y un poco molesta.
- ¿Quién eres tú?
Me asomo para ver quien está en la puerta. Jace, vestido de una manera muy formal está ahí, mirando a Cameron con una confusión gigante en la cara.
Yo no tengo que decir nada sobre la presentación de Jace a Cam. Mia lo hace por mí.
-Papi- grita ella en mis brazos, alargando de más la letra "i".
Mia se remueve en mis brazos y yo la dejo en el suelo. Corre hacia Jace y éste la toma en sus brazos. Ya tuvimos con Mia la conversación de que Jace es su papi, como Cam es el papi de Lexie. No creo que haya entendido mucho, solo la parte en que tiene que llamar a Jace papá. Al menos se llevan bien, eso es un gran inicio.
-No sabía que vendrías, Jace- le digo invitándolo a pasar dado que Cam no lo hará.
Jace, sorprendiéndome, se acerca a mí y me da un sonoro beso en la mejilla. Éste dura más de lo que debería y Cam lo nota. Se pone aún más tenso.
-Pasé después del trabajo- dice. Eso explica su ropa formal- Quise venir a ver a Mia, pero si están ocupadas puedo irme si quieres...
-No- lo interrumpo con demasiado entusiasmo-Sabes que puedes venir a ver a Mia cuando quieras.
Jace parece feliz, en cambio, Cam parece estar a punto de echar fuego por sus oídos. Creo que es el momento de las presentaciones.
-Jace, ellos son Cameron y Alexandra. Cam es un compañero de trabajo y papá de Lexie, amiga de Mia.
Cameron hace una mueca. Supongo que Jace no necesita presentación. Él sabe exactamente quien es. Jace en cambio, con una sonrisa en la cara, le da una mano a Cameron para saludarse. Mi amigo a regañadientes se la da.
Se siente tenso el ambiente. Incluso Mia y Lexie lo sienten. Ellas son unas niñas muy animadas. Hablan, balbucean y juegan por todas partes cuando están juntas. Ahora no hacen más que quedarse calladas en los brazos de sus respectivos padres.
Aunque el que parece más incómodo es Cam.
-Creo que llevaré a Lexie con mi madre hoy- dice mi amigo- Hace un mes que no la ve y como Sarah dijo que la cuidaras toda la noche, creo que es un buen momento.
Sé que en verdad él no quiere llevar a Lexie donde su madre. No se llevan bien, aunque ella ama a su nieta. Solo quiere escapar de aquí.
Y yo no soy nadie como para retenerlo. Incluso me duele admitirlo, pero me sentiría mucho más cómoda si solo se va.
-Claro- digo- pásenla bien.
Nos despedimos y Cameron sale por la puerta, dando un portazo. Mia se asusta, pero Jace la mece en sus brazos, tranquilizándola.
-No quería incomodar a tu novio- dice Jace con una sonrisa en su cara. Parece divertido con la situación.
-No es mi novio- apresuro a decir.
Cuando Cam vuelve tiene una expresión decidida en la cara. Frunzo el ceño justo al momento de que junte sus labios con los míos. No tengo mucho tiempo para reaccionar, para evitar que me bese, pero si tengo tiempo a rechazarlo. Por más que me duela, tengo que hacerlo. Debo serle fiel a mis sentimientos y éstos no van hacia Cam, sino que a Jace.
-Lo siento, Cam- digo cuando él entiende la negativa a responderle el beso y lo alejo un poco de mí- Sabes que no siento más que amistad por ti.
Esta enojado, puedo sentirlo. Asiente y comienza a irse. No lo detengo.
Antes de que se vaya se detiene frente a la puerta y sin voltearse me dice:
- ¿Es por él verdad?
No me mira, pero asiento. Prefiero quedarme callada. No quiero romperle más el corazón. Sigue siendo mi amigo...
-Llámeme cuando tengas a Lexie de nuevo.
Y se va.
En ese mismo instante me sorprendo de ver a Jace con una sonrisa socarrona en sus labios.
- ¿Qué haces aquí? - pregunto- Pensé que te habías ido.
-Se me quedo mi chaqueta- dice y se acerca una silla en donde la había dejado colgada.
Comienza a irse, pero se da vuelta para mirarme en el último segundo. Tiene los ojos brillantes y una sonrisa victoriosa en sus labios. Parece feliz. Parece como si hubiera salido primero en una carrera.
-Vaya forma de rechazar al pobre muchacho, Maddie- dice y su felicidad aumenta. Pero después se pone un poco más serio- Es mejor que sepa que no lo quieres. No te sientas mal. Hiciste lo correcto.
-Estoy intentando hacer las cosas de una forma correcta esta vez...
-Lo haces- me interrumpe- Lo estás haciendo. Comienzo a ver a mi Maddie de nuevo y cada vez se me hace más difícil estar molesto contigo.
Con una sonrisa se da media vuelta y cruza la puerta. Cuando ya parece estar en el pasillo, comienza a gritar:
- ¡Nuestros hermanos se están besando en el estacionamiento!
Río. Minutos después llega Emma con una sonrisa enorme en sus labios. Tiene sus dedos en sus labios y mantiene los ojos cerrados. Parece feliz. No la había visto así en unos tres o cuatro meses.
-Así que...- digo y ella me mira con sorpresa. No parecía que supiera de mi presencia- Tú y Josh, ¿eh?
Emma se sonroja y procede a contarme su día. Parece que estoy recuperando a mi hermana. Parece que estamos recuperando nuestra vida.
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