Sorpresas de la vida (SDLV #1) (COMPLETA) romance Capítulo 23

Matty tiene una cita con el médico hoy. Con Jace tenemos altas expectativas de esta cita. Matty ha estado mejor que nunca estos días. Ha dormido la cantidad normal que se supone que un niño de casi tres años debería dormir, no más como siempre. Ha jugado mucho con Mia y Lexie, de forma animada y constante, sin cansarse demasiado. Ha tenido apetito, mucho apetito. Pareciera como si quisiera comer todo lo que no ha comido estos últimos meses. Pero lo mejor de todo, es que no ha tenido recaídas. No fiebre, no debilidad, no sangrados extraños, no moretones... nada. No quiero tener demasiadas esperanzas, pero es claro que él está mucho mejor. Parece más vivo, no un zombi andante.

Jace nos quiere acompañar a Matty y a mí. Siempre está muy al pendiente de nuestro hijo y su salud. Se acuerda de la hora y el momento en que hay que darle la medicina a Matty, aunque sabe que yo también lo tengo muy claro. Se preocupa hasta cuando Matty tose por algo sin importancia. Es tierno y me alegro de que se preocupe de ese modo por nuestro bebé.

Emma y Josh cuidarán de Mia ese corto periodo en que los tres estaremos en el hospital. Esos dos parecen más felices que nunca con su relación. Me alegro por mi hermana. Por primera vez la veo enamorada de un chico como Josh. Normalmente eran chicos que pasaban sus horas en la calle drogándose. Menos mal que Emma siempre fue lo suficientemente inteligente como para no meterse en esos problemas.

Jace llega a buscarnos. Viene junto a Josh que saluda efusivamente a mi hermana que está muy sonrojada. Vamos caminando hacia el hospital. Es un bonito día de principios de verano y Matty está con la suficiente energía como para caminar ese corto trayecto hacia el hospital.

Nos sentamos en la sala de espera. Llegamos unos minutos antes así que el doctor aún no está preparado para atendernos.

-Necesito preguntarte algo- dice Jace un poco nervioso a mi lado.

Jace tiene a Matty en brazos que juega con un pequeño avión que le regaló Josh hoy. Parece que también siente el nerviosismo de su padre, porque se da vuelta ignorando el pequeño avión y lo ve interrogante.

- ¿Qué pasa Jace? - pregunto preocupada.

-No es nada malo- dice para calmarme- ¿Los chicos conocen la playa?

Frunzo el ceño. Es una pregunta extraña, aunque supongo que como me ha estado haciendo preguntas de los mellizos desde que llegó, esta es una de ellas.

Simple curiosidad sobre lo que han hecho sus hijos en su ausencia.

-No- contesto un poco triste- Nunca tuve el dinero o el tiempo como para llevar a los niños a la playa.

Jace asiente, pensativo. Parece que hay más en este asunto que simple curiosidad o al menos esa es la percepción que me está dando la actitud de Jace.

- ¿Por qué la pregunta? - trato de animarlo a hablar, darle un pequeño empujón de confianza.

-Es que...- dice un poco inseguro- Estaba pensando en que me gustaría llevarlos a la playa, Maddie. Quiero que los chicos tengan unas vacaciones conmigo.

Me quedo sorprendida. Principalmente porque pensaba que él no iba a tener vacaciones y así se lo hago saber.

- ¿Y tu negocio? ¿Qué harás con él durante las vacaciones?

-Papá y mi abuelo se ofrecieron a cuidarlo- dice Jace con más confianza. Probablemente porque no he desechado la idea de inmediato- Ellos fueron los que me dieron la idea, en verdad.

Voy a responder algo cuando una enfermera dice el nombre de Matty. Hace unos días le hicieron unos exámenes de sangre y ahora nos darán los resultados. Jace, con Matty en brazos, y yo entramos a la consulta del doctor.

- ¡Hola! - saluda Matty al doctor.

-Hola, pequeño Matthew- responde éste- Parece que estás con mucho más ánimo hoy, ¿verdad?

Los tres asentimos y nos reímos por la sincronía con lo que hacemos aquel gesto.

-Ha estado así toda la semana- dice Jace con una sonrisa en la cara.

Sé que él está igual de esperanzado que yo de que Matty muestre una gran mejoría. Aunque en verdad creo que él tiene muchas más esperanzas que yo. Suelo ser más precavida con el tema de Matty. Hacerme esperanzas y que al final todo salga mal solo hará que salga más herida de lo que ya de por si saliera.

-Pues, revisemos a este pequeño.

El doctor le hace un par de exámenes físicos a Matty. Mi hijo está un poco inquieto hoy así que Jace tiene que sostenerlo para que el doctor pueda hacer su trabajo. Como lo importante de la enfermedad de Matty está en su sangre, el examen físico termina en unos minutos y el doctor procede a contarnos lo que dicen los exámenes de sangre de Matty.

Eso es lo que Jace y yo estamos esperando.

-Muy bien- dice el doctor- Antes de darle los resultados quiero que me respondan unas pocas preguntas de cómo ha estado Matty esta semana.

-Claro- decimos Jace y yo al mismo tiempo.

- ¿Ha estado durmiendo más o menos que antes?

-Menos.

Respondo y Jace asiente con la cabeza para darme la razón.

- ¿Parece tener más energía que antes?

Como si estuviéramos sincronizados, Jace y yo miramos a nuestro hijo que está sentado en el suelo jugando con el avión.

-Solo mírelo- dice Jace con una sonrisa.

El doctor sonríe mientras mira a Matty jugar con tanta energía.

- ¿No ha tenido fiebre ni infecciones?

-No

- ¿Nada de sangrados o moretones?

-No- volvemos a decir.

La sonrisa del doctor se hace más grande de lo que antes era. Jace y yo suspiramos. Todo parece indicar que tenemos buenas noticias.

-Los exámenes indican que hay un mayor recuento de glóbulos blancos y rojos como de plaquetas en su sangre. Es decir, Matty está mejorando y por eso está así de bien. El alza no es tan grande, pero es un comienzo. La enfermedad parece ir en retroceso.

Una lagrima de felicidad comienza a caer sobre mis mejillas. No puedo evitarlo. He esperado tanto tiempo para escuchar esas palabras que ahora que las escucho parece surreal. Mi hijo está mejorando. Todo está mejorando. Nuestra vida ahora es mucho mejor y todo es gracias a Jace. Desde que él ingresó a la vida de mis hijos todo parece ir bien.

Me hace sentir que todo va a ir bien y más ahora que pone un brazo sobre mis hombros dándome ánimo. Le debo tantas cosas a este hombre...

-Matty aún tiene que seguir el tratamiento, obviamente. Hasta que ya no haya rastros de la enfermedad en su sistema.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Sorpresas de la vida (SDLV #1) (COMPLETA)