THE RISE OF THE KINGDOM OF THE SUN romance Capítulo 16

Dantalian se levantó un poco mareado, la panza le rugía como si no hubiera comido en días. Miró a su alrededor y encontró a su mamá durmiendo a su lado. Sonrió y no tuvo ganas de levantarla, parecía profundamente dormida.

Bajo con cuidado de su cama y se topó algo extraño en el suelo. Casi grita al ver al hombre que lo asustó en sus sueños, pero esto no era un sueño. Las personas no dormían en el suelo en los sueños. Dantalian pateo un poco al señor en el suelo y este parecía muerto por completo.

La panza volvió a rugir.

El hombre seguramente los tenía cautivos, como en los cuentos que le leía mamá. Ella era como una princesa y ese hombre era un monstruo feo que los tenía atrapados.

Así que salió de la habitación en puntillas, iría por alguna arma o tal vez alguna piedra. Atacaría al hombre para darle tiempo a su mamá para escapar. Se dio cuenta que estaban en una casa muy parecida a la casa de su amigo Kenny. Bajo al primer piso intentó no hacer ruido y fue hacia la cocina. Tomó una silla para poder alcanzar los cajones que seguramente tendría por ahí algún cuchillo.

Cuando lo encontró y alzó victorioso el cuchillo más grande que encontró vio algo que desvío totalmente su mirada. Envuelto en papel de manera decorativa, un jamón enorme y delicioso lo miraba.

Dantalian había comido jamón muy pocas veces en su vida. Solo cuando su mamá traía restos de emparedados del restaurante donde trabajaba. Siempre traía algún que otro trozo pequeño que Dantalian disfrutaba mucho.

Su boca estaba muy abierta viendo ese robusto Jamón, su estómago hizo eco en la cocina. Por el hambre tomó una decisión, comería un poco de jamón para cargarse de energía y así poder enfrentarse con el hombre malo.

Dantalian primero bajo el cuchillo al suelo, después bajo el jamón. Se sentó en el suelo y cortó el cordón que envolvía al jamón, después de desplegar el papel y colocar con cuidado el Jamón, con algo de temor empezó a trozarlo con el cuchillo. Cuando se metió el primer pedazo a la boca se le olvidó donde estaba y empezó a cortar generosas tajadas de jamón y a devorarlo de a pocos.

Ya iba por la cuarta parte del jamón cuando Liana entró a la cocina limpiando sus lentes. Dantalian se detuvo cuando metió un pedazo de jamón en su boca. Liana pasó por alto a Dantalian ya que en medio de su mala vista pensó que era una silla o algo así en medio de la cocina. Fue directamente a la refrigeradora y frunció el ceño al darse cuenta de que esta solo estaba llena de encurtidos, logró ver algunas botellas de lo que parecía jugo, pero no tenía alguna etiqueta que le indicara que era.

—¿Qué es esto? —Liana miraba con sospecha la botella—, ¿Tendrá fecha de caducidad?

—Es jugo de manzana —respondió Dantalian—, la señora Kaya nos sirvió eso a Kenny y a mí, es muy delicioso. Me contó que lo hacen aquí en la manada.

Liana se colocó bien los lentes y miró al niño. Quedó algo perpleja al ver al hijo de Bael en el suelo, con un cuchillo enorme, cortando a un jamón del tamaño de su cabeza.

Intento no entrar en pánico.

—¿No prefieres hacer emparedados con ese jamón? —pregunto Liana—, ¿Quieres que te haga uno?

El niño la observó por largos segundos con el ceño fruncido, determinando si la extraña era de confiar o no.

—¿Eres amiga del hombre monstruo?

Liana pestañeo.

—¿No?

—Está bien —Dantalian asintió con la cabeza—, quiero un emparedado por favor.

Liana hizo que se sentara en la mesa, quitándole el cuchillo con paciencia.

—Tienes que devolverme el cuchillo después —dijo Dantalian—, necesito atacar al hombre monstruo.

Liana asintió pensando que posiblemente era un amigo imaginario o algo así.

Agradeció de encontrar hogazas de pan y junto a los encurtidos le hizo algunos emparedados. Dantalian le agradeció cuando Liana le sirvió sus emparedados en un plato y un poco de jugo.

El niño parecía disfrutar su desayuno y Liana sonrió, al menos existía alguien en el mundo que le gustaba lo que cocinaba.

—¿Cómo te llamas? —pregunto Dantalian.

—Liana —sonrió la joven—. ¿Tu?

—Dantalian —dijo mordiendo su emparedado.

—¿Cuántos años tienes? —pregunto Liana,

—Tengo cinco —dijo el niño tomando un poco de jugo—, pronto cumpliré seis años.

—Yo cumpliré pronto 18 años —sonrió Liana.

Dantalian terminó de comer muy rápido, cuando Liana le ofreció más comida entraron Theo y Taylor a la cocina.

Liana los presentó.

—Ellos son mis amigos —los señalo Liana—, chicos, este es el pequeño Dantalian.

—Por la diosa —Theo se acercó sonriente—, es… es como ver a Bael otra vez de niño, es tierno.

—Y algo escalofriante —acotó Taylor algo somnolienta.

Dantalian los miro algo contrariado.

—¿Quién es Bael? —preguntó el niño.

—Supongo que tu mamá aun no habla contigo —chillo Liana evitando que Taylor le contestará.

—Mamá está atrapada con hombre monstruo —gruñó Dantalian—, tienen que ayudarme a matarlo.

—¿Hombre monstruo? —Theo lo miró confundido.

En ese momento, a paso lento y gruñendo por levantarse temprano, Estefan entró a la cocina.

—¡Hombre monstruo! —grito Dantalian.

El cuchillo que estaba al lado del jamón salió volando directo a la cara de Estefan. Este lo esquivo con facilidad.

Dantalian saltó de su asiento, le arrancó la cuchilla que Taylor tenía en el cinturón de su uniforme de cazadora e intentó arremeter contra Estefan. Todo pasó tan rápido que los mayores no tuvieron tiempo para reaccionar.

Estefan se elevó en el aire para evitar que su pequeño sobrino le acuchillara las piernas. Este abrió mucho la boca al ver que el hombre monstruo levitaba. El cuchillo salió de sus manos y levito nuevamente a su dueña.

Estefan hizo que Dantalian levitara también mientras él se ponía de pie en suelo firme.

—Atacándome con la guardia baja —Estefan sonreía de oreja a oreja—, es todo un Hoffman.

—¡Ya bájalo! —le gritó Liana al ver a Dantalian dando vueltas en el aire—, acaba de comer, va a vomitar.

Jessy intentó sujetar a Dantalian, pero este dio tal pisotón en el suelo que toda la casa vibró. Como si el niño hubiera causado un breve temblor.

—Ahora que me doy cuenta —Estefan dejó de disfrutar la situación—, nosotros jamás tuvimos acceso a nuestro poder de pequeños.

—Detente —se escuchó una voz de alfa.

Liam ingresó totalmente despeinado y con ojeras.

Dantalian paró de inmediato, pero se soltó a llorar.

—Ya mi Osito precioso —Jessy lo cargo instintivamente—, mi niño precioso, iremos donde Kenai, pero después ¿bien?, él debe estar ocupado en este momento.

—¿El provocó el temblor? —preguntó Liam confundido y aún medio adormilado.

—Sí y también usa telequinesis —habló Theo.

—Iré a cambiarlo —dijo Jessy mirando a Bael mientras Dantalian lloraba aferrado a ella.

—Te acompaño —respondió el semidemonio.

Los dos desaparecieron hacia las escaleras.

—¿Por qué todos tienen esa cara de idiotas? —se preguntó Taylor—, su padre es en parte demonio y el niño parece su fotocopia, ¿no es normal que también heredará sus poderes?

—Nosotros no experimentamos nuestro poder hasta los 16 o 17 años —le explicó Estefan entre fascinado y consternado—, el niño es todo un prodigio si ya puede utilizar sus poderes a tan temprana edad.

—Es poderoso —Liam suspiro—, puedo sentirlo, su poder es muy intrigante.

—Bael, Estefan y Gabriela tuvieron poderes más desarrollados que los de mi tío Alan —Theo se encogió de hombros—, tal vez su generación es más especial.

—Oh por la diosa luna —Liana, que hasta ahora se había mantenido callada, se desplomó en su asiento—, es él.

Todos se miraron entre sí al ver a Liana en un estado de trance profundo.

—¿Él es quién? —Estefan gruño—, no todos estamos en tu cabeza, cara de rata.

—Es el niño demonio completo —Liana levantó la mirada—, el de quien hablo Belial, su esencia de poder parece más a la de Belial que a las de ustedes, él es el demonio que estábamos buscando.

Todos los hombres lobos de la habitación se concentraron en rastrear la esencia de poder de Dantalian.

—Oh carajos —Estefan abrió mucho los ojos—, carajos.

—¿Cómo…? —Theo estaba tan confundido como lo mostraba su rostro—, ¿Cómo ha sucedido esto?

—Debemos acabar esto rápido —Liana miro a Liam—, tenemos que llevar de inmediato a Dantalian al Reino cuando acabemos nuestra labor aquí. Dantalian corre peligro todo el tiempo fuera de nuestro territorio.

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