Un contrato de amor romance Capítulo 11

Subí corriendo, antes de que ella llegara.

- ¿Helka? Tranquila,... Cuidado tropiezas - dice mientras me alcanza caminando. Llegué hasta mi habitación y él no estaba entonces fué cuando comencé a preocuparme. Necesito evitar que se topen.

- ¡MAMÁ! Ya vienes subiendo las escaleras - digo sin ningún sentido.

- Si hija - dijo gritándome, estaba al otro extremo del pasillo.

DRAKE

Estaba en el baño de la habitación de Helka, todo huele a ella, tan dulce, sus perfumes son de frutas y observó una crema de coco. Después me dirigí al pasillo, al fondo hay un balcón grande, me dio curiosidad y me dirigí hasta él. Siempre es bueno investigar dónde ando.

Escucho gritos de Helka y de la mamá, antes de entrar al pasillo tuve que meterme en un cuarto desconocido, era de una mujer, pero estaba completamente vacío, no había decoraciones, tan solo pintado de lila y manchas negras sin sentido ni dirección. El aroma era extraño pero no tenía mala presencia.

Decidí explorar, era grande la habitación, la cama estaba en el mismo estado, ordenado, con sábanas blancas y dos almohadas, la luz de noche y dos mesas al lado de la cama, con sus cajones, todo era impecable habían dos puertas dentro de esta habitación, pero estaban con seguro.

Me pregunto de quien será.

Cuando de pronto escucho las voces muy fuertes de Helka y la mamá, me río al notar que lo hacía para avisarme que estaba la mamá en el mismo lugar que yo.

Me apresuré y me metí en un armario del piso hasta casi el techo, me encerré a esperar a que venga a por mí a pesar que no se imagine que estoy aquí, solo que aún sigo desconcertado por la habitación extraña. Miro a todos lados dentro del armario, hay ropa, sí.

- ¿Vas a tu habitación? - Dice Helka con la voz muy alta, ella sabe lo que hace y me da gracia.

- Probablemente - Dice la mamá mientras la voz se acercaba a donde yo estaba.

- Entonces vas a la habitación de RossMery - la voz de Helka se noto un tan triste.

Deduzco que es su hermana pero ella nunca mencionó nada.

- Hija, ya hablamos de eso, no puedes entrar ahí - dice, no sé que oculta, y creo que son detrás de esas dos puertas dentro de ésta habitación.

Oigo entrar a la mamá de Helka, me quedo en completo silencio, observe por unas rejilla con un espacio para mirar muy fino. No me notarán.

Saque mi celular y lo puse en silencio notificaciones, llamadas y alarma. Mi entrenamiento funcionó.

Veo que se dirige a la habitación y un cuadro que está colgado en la pared lo abre, al parecer es una especie de seguridad, observo que ingresa una clave y para mi desgracia si ví los números que presionó, la puerta se le salió el seguro y con su mano la abrió.

No debo estar aquí, maldita sea, ojalá no me descubran

Salí con sumo cuidado, y me dirigí a su habitación, me metí en su baño y esperé a que apareciera en su habitación.

Quiero saber sobre su vida, aún hay cosas que desconozco de ella.

HELKA 

- ¿Dónde demonios estás Drake? - maldije por lo bajo, me quedé sin ideas de donde estuviera, en la habitación de RossMery, me detuve al llegar.

Si yo no pude entrar él tampoco.

Me dirigí a mi habitación... pido por lo bajo que se haya saltado la ventana.

- Carajo Drake - dije ya dentro de mi habitación posando mi mano izquierda en mi cintura y la otra haciendo un gesto de estrés en el puente de mi nariz.

- ¿Helka? - escuché esa bendita voz.

Lo miré y me le acerqué, no sabía como reaccionar, le dí un golpecito en el pecho.

- ¿Estuviste ahí todo el tiempo? ¿Cómo no se me pudo ocurrir? - dije mientras se me salían risas. - Tienes que irte ya. Mis padres también se van, a sí que te vas después.

- Pero si se van, tenemos la casa para nosotros solos, podemos hacer lo que quisiéramos.

- Estas loco, mejor voy donde mi mamá, o vendrá a buscarme y te verá y no quiero más preguntas por hoy - me dirigí a la puerta y antes de no verlo le lanzo una mirada.

Llegué hasta su habitación.

- Mamá,... - no vi nada - ¿Mamá? - entré la baño pero tampoco obtuve respuesta alguna.

Cuando salí vi a ella entrando con la cara agachada.

- Mamá - dije para llamar su atención.

Ella brinco de un susto. Alzó la mirada y sonrió al ver que era yo.

- Helka, hija - dice volviendo a su armario y dándose un repaso en el espejo que tenía al frente de su cama.

- Mamá, quiero hablar sobre,.... Esa relación con ese hombre... Drake - dije nerviosa.

- Hija, no hay vuelta atrás, ya lo hablamos.

- Pero no puede ser después de unos meses, 12 meses después que termine de salir de la U, quiero graduarme y tener vacaciones antes de pensar qué hacer con mi vida - dije alzando la voz.

El tener una relación con él no es malo, pero no quiero nada que interrumpa mi futuro, quiero superarme y ser la mejor abogada de la ciudad.

- Hija - suspiró - esa boda se va a hacer y será la mejor, tú y él tendrán que planear cuando se hará, será pronto.

- Nunca demostré eso contigo cosita y discúlpame si lo hice, pero créeme que las personas que me conocen de verdad no dicen lo mismo, dicen lo contrario y no es por creerme mucho pero hablan muy bien de mí.

- Si - dije gritando un poco mas - que chica enamorada tuya y de tu dinero diría lo contrario, sería una falta de respeto para el señor - dije sarcásticamente.

- ¿Eso es lo que piensas? - dijo al otro lado de la puerta.

- Eso es lo que dicen - dije indiferente.

Sentí que abrieron la puerta, era él, no me deje caer, se agacho quedando a mi altura.

- Enserio, te digo que he sido muy diferente contigo, soy muy sincero contigo, más de lo que debería serlo con alguien, Helka siento que me estoy enamorando de tí...

- Eso sí lo sé, hacerme dormir en el hospital es buena onda, vas progresando - dije más sarcástica que antes, quizás más enojada - y no, no estás enamorado de mí, solo sientes que soy alguien con quien puedes jugar.

- Lo hice porque me dijeron que no te gustan los hospitales, eso no me agrado y mi única opción fue hacer eso - luego borró su sonrisa - tienes eso diferente, no estás a mis pies... y eso me parece divertido.

- ¿Entonces te doy las gracia? - dije mirándolo, estaba a escasos centímetros de mi cara.

- Si... Quieres - sus ojos azules se clavaron en mí, su boca se fue acercando a la mía, me estaba preparando para lo siguiente, pero un grito de mi mamá me hizo reaccionar.

-¡Helka! - grita mamá desde la sala.

- Tengo que... irme - dije mientras me levantaba y no despegaba su vista de la mía, hasta que me alejé, lo miré desde arriba, enserio ahora se veía tan indefenso y solo parecía un alma triste.

Bajé las escaleras lo más rápido posible y limpié mis rostro por seguridad.

- Nos vamos amor - dice mientras me daba un beso en la frente

- Bien mamá. Con cuidado por favor - mi papá ya estaba en el coche. - despide me de mi papá y habla con mi prima, me disculpas y le podrías decir que iré a visitarla.

- De acuerdo, solo recuerda que nos puedes llamar alguna cosa. - se alejó por la puerta y la cerró. Ahora estaba a solas con Drake, corría peligro.

- Adiós mama - dije en su ausencia, en completo silencio, me quedé parada...

Sentí unas manos cálidas rodearme por la cintura, me aleje de inmediato.

- No te quiero ver - ya estaba cansada, agotada del día de hoy, siento que he pasado mucho en un día que en un año.

Suspiré.

- Helka - sus brazos me rodean protegiéndome de la realidad - eres una chica especial y única, eso lo descubrí - acaricia mi espalda - solo quiero que estés tranquila.

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