Vendiendo mi virginidad... AL CEO romance Capítulo 105

PDV Mía

Pude ver como

Tomas se llevaba la histérica de Teresa de mi fiesta, mientras todos los demás

murmuraban a mí alrededor y algunas de ellos llamaban a Teresa como una maleducada

y otros comentarios negativos, yo solo me quede en silencio y mantuve una

expresión neutral.

Eso fue lo que

demostré en el exterior, pero en mi interior estaba bastante enojada.

¿Qué demonios le

pasa a Teresa?

¿Por qué demonios

tuvo que hacer un escándalo y en mi fiesta de cumpleaños?

Creo que escuche

que llamo a ese hombre con el cual estaba hablando Tomas con la palabra “papa”,

o no sé muy bien, no escuche realmente sino hasta que ella empezó a hacer un escándalo.

Cuando mi

atención estuvo fija en ella, vi cómo le salto a ese hombre encima y empezó a

golpearlo, Tomas tuvo que separarla y llevársela, ahora ella era el centro de

atención y había arruinado mi humor.

Todo había estado

marchado bien hasta ahora, y la tonta de Teresa tuvo que hacer un escándalo y

arrebatare mi centro de atención, ahora todos estaban murmurando sobre ella y

toda la atención fue quitada de mí.

Eso me enojo,

según Clara, ella era una cualquiera que estaba con Tomas por su dinero,

conocía a Clara y solo le creía parte de lo que dijo, pero tampoco debía estar

muy alejado de la realidad, y ahora una cualquiera había arruinado mi

cumpleaños justo cuando estaban a punto de cantarme cumpleaños.

Tuve que aguantar

mi enojo, gire mi mirada a Clara, y pude notar que esta estaba enojada, pero lo

oculto como yo, no sabía por qué se enojó, desde su perspectiva, debió ser muy

bueno el hecho de que Teresa se humillaran en público, por lo que no entendía

el por qué estaba enojada.

Vi como Clara se levantó

de su asiento y se iba.

— ¿A dónde vas

Clara? —le pregunte mientras la interceptaba.

¿Acaso se iba a

ir justo ahora?

—Lo siento Mía,

pero de repente me sentí mal y quiero descansar un poco ¿Puedo usar una de tus

habitaciones? —me pregunto.

¿Se sentía mal?

— ¿Qué es lo que

sientes Clara?

—Nada importante Mía,

por favor, ¿Puedes prestarme una de tus habitaciones en el 2 piso?

—Está bien Clara,

puedes ir, dile a una empleada que vaya y te abra la puerta, después iré

contigo.

—Gracias Mía,

eres la mejor, perdón por no cantarte cumpleaños, pero de verdad que necesito

estar a solas un momento.

—Lo entiendo,

puedes ir.

Después de decir

esto último, Clara se fue, fue acompañada por una de mis empleadas y esta la

guio hacia el 2 piso de mi casa, mantuve fija mi mirada en ella, no sabía que

estaba tramando, eso de irse justo ahora me pareció muy raro.

Después de

perderla de vista, suspire, y gire mi mirada de nuevo hacia mis invitados,

muchos de ellos seguían hablando sobre lo ocurrido con Teresa, y eso me

molestaba, el centro de atención debería ser yo, no una cualquiera escandalosa.

¿De dónde

consiguió Tomas una mujer así?

No tuvo ningún escrúpulo

para saltarle encima a ese hombre y hacer un escándalo, ¿Cómo podía salir con

ella?

Pude entender

cuando se relacionó con Clara en lugar de mí, eso podía entenderlo, pero no

podía entender por qué andaría con Teresa.

Ese hombre al

cual Teresa le salto encima, parecía muy avergonzado por lo que paso

recientemente, empezó a disculparse con todos, diciéndoles que esa chica al

parecer estaba un poco loca y lo confundió con alguien más.

Dijo varias

excusas, en especial culpo a Teresa por todo lo que ocurrió, y dijo que en

verdad no lo conocía y trato de decírselo, pero ella se negó a escuchar.

Pude ver que la

mayoría de los presentes creyeron en él, Teresa les dejo una muy mala impresión

recientemente, por lo que fue fácil convencerlos de que era ella la que tenía

la culpa de todo, aunque yo no creí nada de lo que se hombre dijo.

Alguien no reacciona

así solo porque si, y no me creía el cuento de que lo confundió con alguien más,

ninguna persona cuerda haría tales actos si no estuviera segura de lo que

estaba haciendo.

Aunque sabía que mentía,

no tenía ninguna razón para revelarlo, por suerte varios de mis pretendientes

empezaron a decir un par de palabras para que olvidáramos el asunto en cuestión

y que ahora deberíamos enfocarnos en mí.

Eso me saco una

sonrisa.

Por lo menos esos

SIMPS que tenía servían para algo.

La gente empezó a

hacerles caso a esos hombres que hablaron y de nuevo la atención estaba de

nuevo en mí, pero mientras nos recuperábamos del incidente anterior, alguien

llego.

— ¡Hola Mía! ¡Perdón

por la tardanza! —me grito el molesto de mi hermano en cuanto entro al gran

salón.

Debido al grito

que dio, todos los presentes giraron sus miradas en su dirección, incluida yo,

Vincent había llegado a mi fiesta y ahora se dirigía hacia mí.

Cuando lo vi, volví

a enojarme, yo no lo invite a mi fiesta y el imbécil se presentó sin

invitación, él lo sabía, solo podía ser que quería arruinar mi humor con su

presencia.

Vincent llego

junto conmigo, y fruncí el ceño en cuanto lo vi, pero estábamos en público, por

lo que rápidamente mi expresión cambio a una sonrisa leve.

— ¿Qué haces aquí

Vincent? ¿No dijiste que tenías otras cosas que hacer? —le pregunte mientras

los presentes nos observaban.

Vincent era

listo, por lo que debía entender que mis verdaderas palabras eran “¿Qué mierda

haces aquí en mi fiesta? Te dije que no vinieras”.

—Bueno Mía,

estaba yo a punto de ganarle al campeón mundial de ajedrez mientras tenía los

ojos vendados, cuando de repente me di cuenta de que no podía faltar al

cumpleaños de mi hermana y darles mi felicitaciones… ¡Felicitaciones! —me dijo

Vincent, mientras el bastardo se abalanzaba sobre mí y me daba un fuerte

abrazo.

Sentí repulsión y

las ganas de empujarlo para que dejara de tocarme, pero estábamos en público.

No podía

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