Vendiendo mi virginidad... AL CEO romance Capítulo 207

PDV Mía

Clara seguía tratando de presionarme, estaba buscando saber algo, yo era lista, parece que sabía algo y estaba tratando de usar indirectas para arrinconarme… lo único que quería saber es… ¿Qué sabia Clara? ¿Y a donde quería llegar?

¿Qué tanto le había contando el papa de Teresa? Ese tipo no sabía nada acerca de mí, y tampoco tenía nada en su poder que lo relacionara conmigo o siquiera con los Saint… de principio a fin, yo no tenía que ver en nada con él…

Estaba limpia, recordar eso me hizo tranquilizar aún más.

—Vamos Mía ¿Vas a hablar o no? Vamos, cuéntame ¿Cómo es que conoces al papa de Teresa? ¿Por qué te alteraste tanto cuando lo mencione? Vamos cuéntame.

—Clara, ya te dije que yo no conozco a ese hombre, ese tipo no tiene nada que ver conmigo… y tampoco me interesan mucho esos documentos que tienes en la mesa, no tienen nada que ver conmigo.

—Mía…

—Clara, solo me altere un poco cuando te oí mencionarlo debido a que es el padre de Teresa, obviamente no voy a permanecer totalmente tranquila cuando mencionas al padre de una de mis amigas ¿No es natural?

—Vamos Mía, no seas así, te conozco, tú no te alteras fácilmente, tu padre te enseño a mantener la cara de “póker” siempre que pudieras, ¿No vas a decir que te vas a alterar tan fácilmente solo por escuchar sobre el papa de Teresa?

—Así es Clara, ¿Qué más quieres que diga?

—Mmm… bueno, ¿Qué tal si dices algo acerca de los documentos que me dio?

Nada de eso está relacionado conmigo.

— ¿Qué voy a decir acerca de eso? Úsalos como mejor te convenga, no tienen nada que ver conmigo.

—Nada que ver contigo… el papa de Teresa me dijo que recientemente… una mujer lo contacto para poder hacer un trabajo de… “edición” sobre ciertas áreas audiovisuales… me dijo algunas de las características físicas de esa mujer.

Clara se acercó a mí mientras decía eso.

—Ya veo ¿Qué importa lo que él padre de Teresa haga o no haga? Tiene que trabajar, no vaya a ser que abandone a su nueva familia como lo hizo con la anterior.

—Sí, pero la descripción que me dio de la chica…

Clara al decir eso último, se abalanzo sobre mí, antes de que me diera cuenta, sus manos estaban presionado mis pechos, los apretó bastante fuerte, tenía las manos llenas.

—Encaja en ciertas maneras con tu cuerpo Mía —dijo Clara, terminando su oración anterior

— ¿A qué te refieres?

—Bueno, la talla de tus pechos por ejemplo, cuando el padre de Teresa me hablo de la mujer con la cual se puso en contacto y con la cual firmo todos esto documentos, me conto con entusiasmo sobre lo atractiva que era, y también sobre todos sus atributos, la talla de sus senos concuerda con la tuya.

¿La talla de mis pechos? ¿Qué tanto vio ese tipo mientras estaba junto conmigo? ¿De verdad se puso a analizar mis medidas mientras estaba junto conmigo?

—Clara, no sé qué quieres insinuar, pero déjame decirte que hay muchas, es decir millones de mujeres con la misma talla y copa que yo, no sé a dónde quieres llegar.

Moví mi cuerpo y me quite el agarre de Clara de mis pechos, tome cierta distancia de ella.

Clara frunció el ceño.

—Además de la descripción física que me dio de esa mujer, también me dio algunas otras cosas, cosas que podrían relacionarse con… cierto sector en el cual tu estas involucrada en tu grupo familiar Mía.

¡¿Cómo?! ¡Imposible!

Clara debe estar tratando de joderme, no sé por qué de repente está haciendo esto, pero debe estar tratando de joderme de alguna forma, ¿Qué diablos fue lo que le dijo el papa de Teresa? ¿Qué le dijo?

No más bien, incluso si el papa de Teresa hubiera hablado, no hay forma de que tuviera la suficiente información para relacionarse conmigo… ¿Entonces como…?

—Mía, ¿Podemos…? —me dijo Clara mientras se acercaba a mí.

Esto huele mal, mis alarmas se dispararon de golpe, sabia reconocer una situación desventajosa.

No tenía suficiente información para actuar, y además estaba en la casa de Clara, decir cualquier cosa aquí podía ser riesgoso… ¿Quién sabe si me están grabando?

Era el momento de correr.

Al tomar esa decisión, me levante de inmediato del sofá donde estaba sentada junto con Clara.

— ¿A dónde vas Mía? ¿Por qué te levantas?

—Recordé que tengo cosas que hacer, cosas importantes que debo resolver, lo siento Clara, pero nuestra reunión tendrá que posponerse para otro momento… adiós.

Después de decir eso último, Salí disparada hacia la puerta.

— ¡Mía! ¡Espera! ¡Aún no hemos terminado de hablar! ¡No me dejes hablando sola!

Ignore las palabras de Clara y llegue a la puerta, la abrí y Salí, Clara se mantuvo persiguiéndome tratando de hacer que me quedara, pero ni loca iba a seguir en esa casa donde no tenía la ventaja.

Nunca debía dejar que me llevaran fuera de mi zona de confort, llegue rápidamente a mi auto, me monte en él, me despedí de nuevo de Clara y Salí de allí.

Dentro de poco llegue a la carretera, en el camino no pude evitar dejar salir mi rabia por lo que paso recientemente.

Clara sabía algo, ¿Qué sabia? No lo sé, pero algo sabia, ¿Qué hizo el padre de Teresa a mis espaldas? Tenía que ir a mi casa, reposar y después pensar que es lo que iba a hacer a partir de ahora.

Estaba en zona delicada.

PDV Clara

Vi como Mía se fue volando de mi casa después de que continúe presionándola de la forma en la cual me dijo Vincent que lo hiciera, después de terminar, llame a este último para contarle lo que paso.

Lo que me dijo no fue lo que espere.

— ¿Y que estas esperando mujer? ¿Una invitación? Ve por ella, persíguela.

— ¿Cómo? ¿Estás hablando en serio?

— ¿Piensas que no lo hago? Hazlo, no debemos darle tiempo para que se prepare, tienes que seguir dándole duro a esa pendeja, ve allí y hazlo, hazlo por mí, por Vincent.

— ¿Qué tienes que ver tu aquí? ¿Se te olvida que esto se trata de mí?

— ¿A ti se te olvida que a mí fue al que desheredaron?

—Sí, lo recuerdo bien, en ese momento actuaste mal Clara, ¿Por qué lo mencionas ahora?

Apreté con más fuerza los puños.

—Dime… ¿Tu tuviste algo que ver con eso?

— ¡¿Qué?! ¿Es una broma? ¿No querrás echarme la culpa a mí de tus propias acciones Clara? Vamos, se una persona responsable y no quieras tratar de echarme el “muerto” a mí.

—Si recuerdo bien, Tomas y yo empezamos a pelearnos unos pocos unos meses antes de que todo pasara, y si recuerdo bien… yo estuve contigo cuando ocurrió todo eso… dime con sinceridad… ¿De verdad que no tuviste nada que ver con nuestro rompimiento? Dime la verdad… ¿No somos amigas?

Mía mantuvo su cara de “póker” sin mostrar cambios, pero segundos después se giró.

—Sabes Clara, tengo algo de calor… ¿Qué te parece si nos vamos a dar un baño juntas?

— ¿Un baño? ¿Justo ahora?

—Sí, se me antoja, vamos, te esperare en la piscina, ya sabes dónde queda.

Mía se fue después de decir eso último, la mire unos momentos antes de entender todo.

Obviamente a ella le preocupaba que pudiese tener alguna grabadora conmigo con la cual pudiera grabar todo lo que ella dijera en la conversación… por lo que quería ir a un lugar donde debía estar desnuda y totalmente expuesta.

Estábamos en su casa, y sin nada de ropa que me cubriera, no iba a poder utilizar nada que me permitiera utilizar lo que dijera en su contra…

Bueno… por lo menos ahora parece que de quería hablar con honestidad conmigo, eso era algo, perseguí a Mía y pude ver su ropa en el suelo, poco después, yo me empecé a desvestir y deje todas mis cosas en las afueras, quede totalmente desnuda y sin nada puesto.

Después de eso abrí las puertas y entre a la piscina de Mía, la cual también servía como una especie de bañera.

La busque con la mirada y la pude encontrar no mucho después.

Camine hacia ella de la forma más visible posible de forma que pudiera ver que estaba desnuda y sin nada a mí alrededor.

—Ya llegue —le dije cuando estuve cerca suyo.

—Tienes un cuerpo muy bonito Clara… ¿Por qué no das una vuelta para poder verte mejor?

Parece quería comprobar que no tuviera nada en la espalda, le hice caso y di varias vueltas frente a ella, no deje ninguna parte que no fuera visible.

—Tus nalgas siguen siendo firmes como siempre, eso da envidia…

— ¿Ahora si puedes hablar sin miedo Mía?

—…

—Vamos, escucha, eh hablado con el papa de Teresa y también eh podio obtener información de otros medios, sé que te asociaste con él… ya no sigas mintiendo, estoy desnuda ante ti, no tengo nada que pueda grabar lo que digas, puedes hablar con normalidad, ya se todo sobre lo que has hecho con el papa de Teresa a espaldas de todos… vamos, ¿Puedes decirme porque te has molestado en hacer todo eso?

—… y solo para tenerlo claro… cuando dices que lo sabes todo ¿A qué te refieres exactamente? —el tono de Mía parecía indicar que lo que yo decía eran puros delirios míos.

Recordé lo que Vincent me dijo, acomode todo en mi mente antes de enfocarme en Mía de nuevo, la cual seguía sonriente.

Historial de lectura

No history.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Vendiendo mi virginidad... AL CEO