Vendiendo mi virginidad... AL CEO romance Capítulo 237

PDV Teresa

El cielo se volvió a oscurecer en cuestión de segundos, me quede con la vista fija en Tomas en todo momento mientras este terminaba de decir las palabras.

Estaba arrodillado frente a mí como lo había imaginado antes cuando era niña.

Dijo las palabras de forma suave y preste especial atención a cada una de ellas sin excepción.

Una vez que termino, me dio la pregunta mientras nos mirábamos fijo.

— ¿Quieres casarte conmigo, Teresa?

— ¡Si! —conteste con emoción.

Movió las manos y tomo una de las mías, la estiro y luego me fue colocando el anillo en el dedo de forma suave.

Después de colocarlo se levantó, pero seguí mirando mi dedo uno segundos más después de eso.

Estaba bastante emocionada… y no me importo algunas de las raras sensaciones que sentía allí abajo por el otro anillo que me trague.

Después de unos segundos fue que volví a alzar la mirada y mire a Tomas, estaba parado cerca de mí.

Me levante del asiento y le di un beso, fue bastante profundo, duramos así un corto tiempo antes de separarnos, allí fue que volvimos a escuchar fuegos artificiales allí en el cielo.

Mientras veíamos hacia arriba, pude sentir como Tomas me tomaba desde la cintura y me jalaba, me abrazo desde atrás con suavidad.

—Dime ¿Te gusto ese estilo tradicional? —me pregunto Tomas.

—Sí, lo hiciste bien, fue mucho mejor de esa forma que lo que hiciste con lo de la copa.

—Para algunas cosas te gusta el estilo conservador Teresa… aun tienes que regresarme ese anillo.

Me sonroje un poco al escuchar eso.

—Sera después, ¿Esos fuegos son tuyos también? —le pregunte.

—No, los míos terminaron ya, deben ser de los del evento, es lo más seguro.

—Entonces ya debe estar por terminar, vamos alli —le dije mientras lo tomaba de la mano y lo jalaba, aunque no se movió.

— ¿Por qué?

—Vamos, allí ya deben estar todos, si vamos a decirlo, ¿Qué mejor momento que ese? Vamos, no te hagas el difícil —le dije mientras lo jalaba de nuevo.

En esta ocasión si quiso avanzar, tomamos nuestras cosas y luego nos fuimos, vi a Tomas dar algunas instrucciones a algunas personas, quizás para arreglar la mesa y llevarse las cosas.

Quería contarle a mi familia y a los demás sobre el compromiso, corrimos rápido, aunque llevaba tacones y me tropecé algunas veces, Tomas me ayudo con eso, y logramos llegar al evento.

Al llegar allí vimos que había una gran pista y había gente bailando, parece que muchos ya estaban ebrios, había una barra libre y se llevaba bebidas de aquí para allá

Un cantante estaba bailando y cantando en un escenario arriba, el ambiente era animado, pero parecía que no faltaba mucho para terminar, ya que había algunas personas que se iban, otras estaban desmayadas.

Los demás estaban sentados o bailando o bebiendo, la fiesta había sido bastante buena, gire la mirada para buscar a mi grupo.

Solo llegue a ver a Mía sentada de forma elegante en la mesa mientras bebía una copa de forma tranquila, ella parecía ser la única sobria y controlada entre todos aquí, tenía algunos chicos cerca de ella tratando de hablarle.

No había rastros de los demás en la mesa, así que arrastre a Tomas en dirección a ella para ver donde se fue el resto de nuestro grupo, era más fácil que ponerse a buscar en los alrededores.

Llegamos a la mesa y Mía nos vio, despidió a los chicos que estaban junto con ella, no se quisieron ir al principio, pero luego con persuasión de Tomas se marcharon.

—Perdonen por eso, algunas tonterías que hizo hermano —dijo Mía mientras señalaba a esos chicos.

—Eso no importa, no te preocupes.

— ¿Dónde estuvieron ustedes 2? Se perdieron gran parte de la fiesta, y muchas cosas más, ¿Dónde estaban? —nos preguntó ella.

—Nos fuimos a otro lugar mientras tanto y nos tomamos un tiempo lejos —le dije Mía.

— ¿A otro lugar? ¿Tanto tiempo? ¿Qué hicieron allí? —nos preguntó.

…

Tuve unas cuentas dudas de decirlo por  la historia de Mía y Clara, pero después recordé que tarde o temprano lo iba a saber así que mande todo al diablo.

Alce mi mano y le mostré mi anillo a Mía, el anillo que me dio Vincent.

—Nos fuimos a un sitio apartado a comer solos mientras estaban aquí, y estando allí… ¡Nos comprometimos! —le dije a Mía con emoción al pronunciar las últimas palabras.

Mía se atraganto con algunos de los dulces que estaba comiendo cuando le dije eso, tosió un poco y tuve que ayudarla a que lo escupiera golpeando su espalda, luego de eso tardo unos segundos en poder recomponerse.

Nos miró a ambos.

— ¿Se comprometieron? ¿Cuándo? —pregunto.

—Ya te dije, fue mientras estábamos a solas y ustedes estaban en aquí sin nosotros —le dije.

— ¿Allí?... ¿Entonces los fuegos artificiales que fueron lanzados de primero…? —murmuro Mía mientras miraba a Tomas.

—Fue cosa mía, Mía —le respondió este.

—Con razón pensé que fueron lanzados antes de tiempo, no te creí tan romántico Tomas como para hacer eso, con Clara fue mucho más simple —le dijo ella.

—Quise hacer las cosas diferentes en esta ocasión en especial… diferente a la primera vez —le dijo Tomas.

—Ah, ya veo, bien por ti entonces, parece que fue algo bastante especial… aunque ese anillo deja que desear, parece algo que usaría Vincent y no se ve que es para chicas Tomas.

—Bueno… lo que paso es que... —murmuro Tomas mientras me miraba.

—Es un cuento largo, no importa, ¿Dónde están los demás? Queremos darles la notica a todos ¿En dónde están? —le pregunte a Mia.

Mía giro la vista y pareció mirar algo, le seguí la mirada para ver qué.

—Vincent le consiguió a tu mama un tipo que la sacara a bailar, esta allá al fondo ¿La ves?

—Sí, ya la vi —le dije con cierta alegría por ella.

—El resto está cerca, tu hermano está en la barra libre, se fue con Vincent y Daisy para que le abrieran camino con algunas extranjeras, Anna termino por perseguirlos, deben seguir juntos a menos que alguno tuviera suerte —nos dijo Mía.

Gire la mirada a la barra libre y después de un rato buscando, encontré a Vincent sirviendo las bebidas y suplantando al barman.

Cerca de èl estaba Daisy, hablando con 1 hombre algo mayor, no muy lejos estaba mi hermano, Anna estaba cerca de Vincent mirándolo con cierto resentimiento mientras bebia.

Después de ubicarlos me levante, y deje a Tomas en la mesa con Mia y luego me fui a buscarlos a todos para poder darle las noticias.

Primero fue por Vincent y los demás, quería darle un tiempo mas a mi mama para que se divirtiera con el tipo que le consiguió Vincent para bailar, los junte a todos cerca de la barra y luego fue que traje a mi mama.

Una vez todos estaban allí, Tomas y Mía decidieron levantarse de la mesa y fueron con nosotros, allí fue que les di la noticia.

Me fui después de eso y regrese con los demás, aunque Vincent tardo un tiempo en seguirme.

PDV Vincent

Mire a Teresa mientras esta caminaba, no le segui el paso sino hasta un tiempo despues.

Las cosas no me salieron bien.

Hubiera querido que Teresa siguiera lo que le dije y se lo propusiera a Tomas en publico como pensé, conociendo a este ultimo, lo mas seguro es que no le hubiera dado respuesta y en su lugar no le hubiera gustado lo que Teresa hizo.

A fin de cuentas, lo mas seguro es que se volvería una hazmerreir por eso, y èl lo sabia, y quizás hubiera dejado en “visto” a Teresa sin darle respuesta, eso quizás hubiera dejado algunas fracturas en su relación y hubiera retrasado lo de un compromiso entre esos 2.

No es que quería romper esa relación como hizo mi hermana con Tomas y Clara… no era más bien que queria hacer eso para ganar tiempo, si, era mas por eso, quería más tiempo para poner en mejor orden mis pensamientos y no tener esa presión de un posible compromiso.

Pero bueno… Tomas me la jugo sin que supiera… que forma de cagar las cosas.

Seguí a Teresa y llegue junto con el resto del grupo, la familia de Teresa término de darle su charla a Tomas, me coloque junto con Mía mientras veía a Teresa junto con ellos.

Mía estaba a mi lado, pero no dijimos mucho entre nosotros por un tiempo.

— ¿Qué paso? ¿Ya estas triste hermanito? —me pregunto con sarcasmo.

— ¿Triste? Yo jamás estoy así mi niña ¿Piensas que soy tu? —le devolví el sarcasmo.

—Si.

— ¿Por qué estaría triste Mía? Si realmente tengo todo para estar muy satisfecho, y además lo más seguro es que también tenga sexo esta noche, otra razón para estar alegre.

—Ah no sé, ¿Sera por qué tu niña va a casarse y quizás tener hijos sin ti?

…

—Oye Mía… auch, eso dolió.

—Lo sé…  ¿Y sabes que es lo más triste de todo esto?—me dijo mientras empezaba a comer.

— ¿Qué cosa?

—Que tu serás el padrino de Tomas en su boda… piénsalo,  no creo que haya nadie más aparte de ti para ese puesto hermano… ¿Te imaginas al lado de Tomas mientras le das el anillo para que él se lo dé a Teresa? —me dijo.

…

— ¡NOOOOOOOO! —Pensé en mi interior al imaginarme eso.

Mía se acercó a mí mientras pensaba en tal situación.

—Si… —me dijo cerca de mi oído, como si leyera mis pensamientos.

…

—Pero oye, lo importante es que serán felices… por un tiempo ¿No vale la pena tu sacrificio?

—Que cruel eres chica…

Estuvimos unos cuantos días más en el hotel y de viaje en la isla hasta que nos tocó regresar al país, una vez de regreso, los planes y preparativos de la boda se pusieron en marcha sin muchas demoras.

Justo como dijo Mía, al final termine por ayudar en todo eso, hubiera querido mantener mi distancia, pero Tomas me dijo para ser su padrinos como me advirtió Mía y ya al final no pude mantenerme lejos de la fiesta.