Vendiendo mi virginidad... AL CEO romance Capítulo 80

PDV Teresa

Mi hermano y yo fuimos a la habitaciones de nuestra madre, cuando llegamos

pudimos ver a nuestra madre acostaba en su cama, estaba despierta mirando por

la ventana mientas tomaba un poco de agua.

Su nombre era María, ya estaba en la mediana edad y tenía más de 40 años,

pero no se veía tan vieja en realidad, aparentaba solo unos 30 años como mucho,

y eso era pesar del cáncer que padecía, 

el doctor nos había dicho varias veces que nuestra madre tenía un cuerpo

bastante resistente, y por eso pudo llevar de forma tan optima su situación.

De no ser por nuestra falta de dinero, ya se hubiera curado de su

enfermedad teniendo en cuenta su buena salud.

Se parecía mucho a mí, ambas compartimos muchos rasgos similares, entre

nosotras, a diferencia de mi hermano que era una mezcla de mi madre y mi padre.

Yo era más bien una copia más joven y algo diferente de mi madre.

Después de llegar a la habitación, Richard y yo nos miramos por unos

instantes antes de ir con nuestra madre.

—Mama —dijimos ambos después de entrar a la habitación.

Cuando nuestra madre nos escuchó, se giró para vernos, ella sonrió y nos

recibió alegremente.

Después de que los 3 estuvimos juntos, empezamos a hablar entre nosotros,

nuestra madre nos preguntó muchas cosas con respecto a nuestras vidas y que

cuales eran las ultimas noticias que teníamos para darles.

Tanto Richard como yo empezamos a contarles todo lo que nos había pasado

recientemente, mi madre escucho atenta, mentimos en varias ocasiones para poder

evitar cualquier cosa que pudiera hacerla sentirse mal y terminamos por

inventar muchas cosas solo para poder hacerla reir con historias absurdas y

graciosas.

Estaba todo el dia en un hospital, por lo que no tenía que hacer, así que

su manera de saber que pasaba en el exterior era por medio de Richard y yo.

Mi madre era muy curiosa, y de hecho me empezó a preguntar cómo estaba mi

situación amorosa, más específicamente me pregunto si había podido conocer a

alguien interesante recientemente.

Cuando me hizo esta pregunta, me dieron ganas de contarle sobre Vincent y

Tomas, esos 2 sí que eran dos 2 tipos bastante peculiares, pero no tenía nada

con ningún de ellos… bueno, no con Vincent, con Tomas tenía una relación

bastante rara en estos momentos.

Quise contarle sobre ellos pero decidi que mejor no lo hacia, mi relación

con esos 2 era muy rara, y no necesitaba que mi madre se entera, y menos mi

hermano quien estaba a mi lado.

Por desgracia el tonto de Richard aprovecho el momento para poder contarle

a mi madre acerca de Vincent al cual había visto el otro día, e incluso le

conto como fue que Vincent se quedó en nuestra casa y termino por quejarse con

nuestra madre sobre mi… “comportamiento” reciente y sobre el como conocí a

Vincent.

Richard me apuñalo por la espalda y termino por decirlo todo, mi madre se

mostró sorprendida de que conociera a alguien como Vincent, y empezó a hacerme

preguntas con respecto a èl mientras Richard observaba.

Maldito traidor, yo no contaba sus cosas, pero èl si las mías…

Le dije a mi mama que Vincent era solo un hombre que me ofreció trabajo y

que nuestra relación solo iba a ser de un jefe y empleada, Richard intervino

muchas veces diciendo que no se creía esto para nada y que Saint debía tener

otros motivos.

Yo también lo creía, pero no quería darle la razón a Richard y menos frente

a nuestra madre, por lo que negué cualquier cosa que él dijera.

De todas formas mí me aconsejo tener cuidado y que pensara bien las cosas

que hiciera con Saint, era mejor tener cuidado con esos tipos ricos que

terminaban ofreciéndole cosas a chicas de clase medio como yo.

También me aconsejo lo mismo que Daisy y me dijo que dejara esa relación

laboral por escrito de esa forma no pasaría malos ratos en el futuro.

También me dijo que le hiciera más caso a Richard, a fin de cuentas él era

el único hombre en esa casa y debería escucharlo más, me dieron ganas de

golpear a Richard al ver la expresión complaciente que este me hizo cuando mi

madre nos dijo esto.

Después de que nuestra familia se pusiera al día, el doctor llego y mi

hermano y yo nos salimos de la habitación para poder hablar con él.

El doctor nos empezó a decir las últimas noticias y nos dijo que el estado

de salud de nuestra madre seguía siendo optimo, pero necesitaba el tratamiento,

nos mantuvimos tranquilos mientras escuchábamos… o al menos así fue hasta que

nos dijo que el precio del tratamiento había aumentado a 100.000 dólares.

Cuando escuchamos esto, tanto Richard como yo nos aturdimos y nos miramos

fijamente por unos momentos.

— ¿Es en serio? Hace solo 2 semanas atrás nos dijo que el tratamiento

seguía costando 50.000 dólares todavía —le dijo Richard al doctor.

—Si, pero las ultimas noticias que recibimos con respecto al estado de su

madre nos indicaron que necesita un tratamiento mas complicado y debido a eso

el precio aumento, ya que el procedimiento medico es mucho mas complicado y

costoso —nos dijo el medico mientras nos miraba de forma imperturbable.

—¡¿Acaso nos quieres joder maldito infeliz?! —grito Richard, antes de

abalanzarse contra el médico y tomarlo por el cuello de su ropa, parecía muy

enojado, histérico de hecho.

—¡Richard! ¡Suelta al doctor! —le grite a mi hermano mientras tomaba sus

brazos y trataba de que los separara del cuello del doctor.

Este último parecía asustado por el arrebato de Richard, este último era

más alto y era más joven, por lo que debió sentirse bastante intimidado.

— ¡¿Cómo va a hacer que el tratamiento vaya a duplicar su precio en menos

de 2 semanas cuando se mantuvo así por meses?! ¡No trates de joderme maldita

sea! ¡¿Por qué quieres explotarnos de esa manera?! ¡¿Sabes lo que nos está

costando solo reunir los 50.000 original?! ¡¿Cómo quieres que consigamos

100.000 dólares?! —le grito Richard al doctor mientras lo miraba histérico.

—Y-ya le dije que las ultimas noticias arrojaron nuevos datos y ahora

necesitamos usar otro procedimiento más complicado y eso aumento el precio del

tratamiento —le dijo el doctor a Richard estando muy nervioso.

— ¡No trates de joderme! —le grito Richard al doctor.

— ¡Richard! ¡Ya suéltalo! —le grite a Richard mientras usaba mis manos para

poder hacer que me mirara a los ojos.

No era conveniente que el doctor empezara a pensar mal de nosotros, podría

ser malo a futuro, y además este nos había tratado bien durante la estadía de

mi madre en el hospital, por lo que no se merecía este trato por parte de

Richard.

Mi hermano me miró fijamente por unos instantes antes de soltar al doctor,

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Vendiendo mi virginidad... AL CEO