Yo, una Actriz Bien Relacionada romance Capítulo 265

Siempre quiso tener una charla con Julieta. Pero, ella lo bloqueó, incluso si se encontraban, ella no quería tener nada que ver con él.

Julieta lo miró de reojo, con una ira intensa en su interior. Al ver a Bruno tan desdichado, Joan habló por él, "Mamá, míralo qué triste está, déjalo explicarse al menos una vez".

Ella no esperaba que Joan defendiera a Bruno. Aunque Joan siempre decía que no necesitaba un padre, ya había estado con Bruno por más de tres años, no podía no tener sentimientos por él.

Joan extrañaba mucho a Bruno estos días, incluso escuchó a Joan llamando a su "papá" en sueños varias veces durante la noche.

Después de un par de segundos de reflexión, Julieta finalmente habló: "Está bien, te haré algunas preguntas, tú solo respondes. Si tus respuestas no me satisfacen, te pido que te vayas inmediatamente".

"De acuerdo". Bruno aceptó sin dudarlo, como si temiera que ella pudiera cambiar de opinión. Julieta lo miró durante un rato y luego preguntó: "Dime, ¿no tienes a ninguna otra mujer además de mí?".

Bruno respondió: "Lo juro, que no hay ninguna otra".

Julieta continuó: "Si no andas con otras mujeres, ¿qué pasó esa noche?".

Bruno finalmente explicó: "Me drogaron, esa noche no estaba consciente. Cuando desperté al día siguiente, tú ya te habías ido. Así que no sabía que la mujer de esa noche eras tú. Si lo hubiera sabido, ¡no estaríamos reconociendo esto ahora! Hasta quizás ya tendríamos un segundo hijo".

Julieta dijo furiosa: "¡Descarado! ¿Quién quiere tener un segundo hijo contigo?". Luego le lanzó una mirada: "Dime, ¿Noches trabaja para ti?".

Bruno dijo sorprendido: "Sí, ¿hizo algo mal?".

"¡Eso pregúntaselo a él!". Julieta se enfadó al recordar cómo Noches la había insultado sin motivo. Justo cuando iba a seguir hablando de Noches, su teléfono sonó. Era un número desconocido.

Julieta hizo un gesto para que Bruno y Joan se quedaran callados, luego contestó la llamada: "Hola, buenas".

"Julieta, soy Karina". Se escuchó la voz de Karina, Julieta alzó una ceja, esa mujer se movía rápido. Aún no había arreglado las cuentas con ella por lo de ayer y ya estaba persiguiéndola.

Julieta dijo: "Ah, eres tú. ¿Qué pasa?".

"¡Bruno!", Julieta apretó los dientes, "No seas desvergonzado".

Al ver que Julieta estaba a punto de explotar, él solo retrocedió rápidamente: "Está bien, no voy".

De todas formas, aunque ella no lo llevara, él podría ir por su cuenta. No debería ser difícil encontrar el lugar.

Julieta le lanzó una mirada despectiva y luego se puso en contacto con Sombrío. La noche definitivamente prometía ser crucial, ella tenía que estar totalmente preparada, tenía que prevenir antes de lamentar.

Estaba a punto de sacar su móvil para llamar a Sombrío, pero él se adelantó y la llamó primero. Al contestar, de inmediato escuchó a Sombrío gritar al otro lado del teléfono: "Capo, Dios mío, ¡ha pasado algo terrible! ¡Teodoro ha vuelto!".

Julieta se quedó perpleja: "¡Dios mío! ¿Dónde está?".

Sombrío: "Según el localizador... ¡está en la puerta de tu casa!".