¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia romance Capítulo 1797

Al escuchar estas palabras, Elia se quedó perpleja. ¡La competidora número dos resultó ser su colega Natasha!

¡Los trabajos de Natasha eran idénticos a los de ella!

¿Cómo es posible?

Natasha, emocionada, le dijo a López: "López, llevo varios años en el diseño, conoces bien mi capacidad, ¿cómo podría copiar? Esas obras son mi creación original, tampoco entiendo por qué los diseños del tercer competidor son iguales a los míos".

Después de hablar, miró instintivamente hacia la entrada y al cruzar miradas con Elia por un segundo, su mirada vaciló, luego miró a Asier en la silla de ruedas y rápidamente desvió la vista.

Como si al ver a Elia, viera a un molesto desconocido.

La mirada de Elia hacia Natasha, por otro lado, fue de sorpresa.e2

¡Jamás habría imaginado que la diseñadora con trabajos idénticos a los suyos sería la colega que tanto admiraba!

Antes de que López pudiera decir algo, notó que Elia y Asier habían entrado.

Inmediatamente sonrió y se acercó a Asier, diciendo: "Sr. Griera, con tantas responsabilidades, ¿cómo encuentra tiempo para preocuparse por estas pequeñeces? No se preocupe, definitivamente investigaremos a fondo, no vamos a inculpar a ningún diseñador injustamente, y mucho menos vamos a pasar por alto a aquellos con intenciones maliciosas".

Elia pudo ver que este López, frente a Asier, parecía sonreír, pero esa sonrisa era demasiado falsa, incluso con un toque de crueldad.

No parecía tomar a Asier en serio, pero tenía que fingir que sí lo hacía.

¡Qué hipocresía más obvia! ¿Es que López era demasiado audaz, o es que Asier ya no tenía la misma autoridad de antes?

López hablaba con una sonrisa forzada y una mirada siniestra.

Al oír esto, Elia se enfureció aún más. ¿Qué quería decir López con eso, insinuando directamente que era su culpa?

Elia no se iba a hacer cargo de la acusación de plagio y argumentó con razón: "López, entregué mi trabajo a los organizadores ayer, y específicamente pregunté si se garantizaría la seguridad del mismo, si no habría problemas. El personal me aseguró que no habría inconvenientes. Que el incidente de hoy haya ocurrido, debería ser responsabilidad de los organizadores, ¿acaso no comparan los diseños antes del desfile?"

"Dices eso con mucha libertad, pero cada diseño tiene su originalidad única. Incluso nosotros, los organizadores, no tenemos el derecho de comparar las obras. Las piezas de cada diseñador se desempaquetan media hora antes del desfile y se colocan directamente en los modelos. Así que es imposible que la organización tenga alguna responsabilidad", aseguró López con firmeza.

No había terminado de hablar cuando se produjo un revuelo en la entrada trasera, una presencia dominante se hizo sentir.

Bruno apareció con un grupo de guardaespaldas vestidos de negro y se acercó a Asier, diciendo con respeto: "Sr. Griera..."

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