¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia romance Capítulo 2083

Max invitó a todos a retirarse, dejando el espacio solo para Asier y Elia, para no interrumpir su momento.

No fue hasta que salieron del cementerio que Cecilia se atrevió a expresar su descontento.

"De verdad que Asier se pasa, para mostrarle su amor a Elia, dijo que él y mi hermana solo tenían una relación de hermandad. Siempre estuvieron juntos, uno al lado del otro, todo el mundo sabe que eran una pareja."

"No hables sin saber, Cecilia. Asier es quien vive la situación, ¿acaso no va a saber más que tú?" Maximiliano interrumpió a Cecilia para que no siguiera hablando sin fundamento.

Con esas palabras, ya estaba claro que él estaba del lado de Asier y Elia.

Si esa era la explicación que daban Asier y Elia, él les creía.

La mala suerte fue para su hija mayor, Aurora, que en la flor de la juventud, tuvo un accidente que la llevó a dejar este mundo.e2

Cecilia replicó, aún molesta, a las palabras de Maximiliano. "Papá, ¿cómo puedes decir que estoy hablando sin saber? Mamá me dijo que Aurora y Asier se amaban, y que era un amor profundo. Si no es así, ¿por qué mi hermana siempre estaba pegada a Asier? Eso solo lo hacen las parejas, ¿no es así?"

"Y esa Elia sí que sabe cómo hacer las cosas, se ganó el corazón de Asier en poco tiempo, hasta el punto de hacer que él negara su relación con mi hermana." Cecilia seguía quejándose sin parar, hablando mal de Elia.

Justo cuando terminó de hablar, alzó la vista y vio a Bruno apoyado en un carro negro.

Su mirada estaba fija en ellos, como si estuviera mirándola específicamente.

Al ver a Bruno, el corazón de Cecilia dio un vuelco, instintivamente se calló, dejando de hablar y bajando la mirada para evitar seguir encontrándose con la de Bruno.

Parecía temer ver desprecio en los ojos de Bruno y que él pensara mal de ella por hablar a espaldas de los demás, aunque eso era precisamente lo que estaba haciendo.

Si alguien más la descubría, no le importaba, pero la idea de que Bruno la descubriera le resultaba especialmente insoportable.

¿Por qué sería?

¿Sería por esa vez que Bruno le dijo que ella merecía ser amada?

Entonces tomó un taxi hacia ese lugar.

La "esposa" a la que se refería Bruno, por supuesto, era Elia.

Antes, si Cecilia hubiera escuchado a alguien referirse a Elia con ese título, seguramente se habría sentido mal.

Pero en ese momento, no tenía ninguna reacción.

Después de la impactante escena en la que Asier se arrodilló ante Elia para proponerle matrimonio en público, los demás detalles, para Cecilia, eran apenas como el roce de una libélula en el agua, incapaces de provocar la más mínima onda.

"Bruno, eres bien dedicado, no solo te encargas de los asuntos de la empresa del Sr. Griera, sino que también te ocupas de sus asuntos personales."

Cecilia se rio, pero sus palabras estaban cargadas de sarcasmo.