DOS HERMANAS, UN ALFA romance Capítulo 101

CAPITULO 15

El nerviosismo del lobo se hace presente, Camila ve una oportunidad de quitarle la máscara, intenta abrir la boca para lanzar un grito.

Oscar cubre la boca de Camila, no quiere que pronuncie el mínimo ruido que pueda delatarlo

—¿Estas ahí mi amor?— pregunta Bella que siente algo extraño en su corazón.

—¡Ya salgo Bella!— exclama con el corazón latiendo a gran velocidad mientras suspira nervioso.

—¿Porque no le decimos de una buena vez que somos amantes? que quieres estar conmigo — Camila lo presiona, quiere que esto se revele y le dé un lugar de reina en su vida.

Oscar niega con la cabeza, le pide que se vaya del baño cuando el logré salir de la habitación con su esposa.

— Tenemos que hablar, solo ayudame en esta oportunidad — pide Óscar susurrando y Camila acepta.

El lobo sale y deja el baño con seguro, para evitar que Bella entre, Camila se acerca a la puerta, quiere escuchar la voz de Óscar diciendo que la prefiere a ella.

No lo ama, quiere repetir esa frase en su cabeza para dejar de sentir que su plan de dejar atrás sus sentimientos por el, es lo mejor para no perderse en su meta principal , la ambición.

Bella toma las manos de Óscar, el se arrodilla y la ve a los ojos, llora.

—¿Que te pasa Óscar? ¿porque lloras?— Bella toma con sus dos manos las mejillas de Óscar que suspira al verla.

— Solo que no te he valorado lo suficiente, recuerdo cuando te conocí, fui un cobarde para luchar y creo que hoy es igual — Óscar coloca su cabeza en las piernas de Bella.

Ella le da un beso y acaricia sus cabellos, pasando sus delicados dedos tras su oreja.

— Nos amamos, y yo voy a luchar por ti en esta y mil vidas, solo dame la oportunidad de recordarte lo que te trajo a mi — Bella suspira.

Oscar levanta la mirada, ve la hermosa sonrisa en su esposa que es acompañada de una lágrima, le da un suave beso en los labios.

Ese calor del que Lucius tanto hablaba, que crecía en su pecho y que opacaba la llama de esa pasión mal sana de su corazón.

— Yo soy quien te jura, que voy a luchar por ti, que no voy a descansar un solo día de mi vida para demostrarte que eres mi gran amor — Óscar besa a Bella y decide sacarla rápidamente de la habitación para que Camila no se la encuentre.

Espera que sus palabras sean claras, y que con ellas, Camila entienda que está es la despedida.

Camila llora en el baño, se coloca su ropa y sale de la habitación para encerrarse en la suya, no lo puede perder todo, es lo que se repite una y otra vez.

Se propone recuperarlo, siente que ella es superior a Bella, que ella puede ser más loba para Óscar.

*** Llega el día de la ceremonia***

Miranda llega con todo si séquito, de encuentra en la entrada de la manada con el caballo que cabalga Lorenzo.

—¿Seguimos con el plan en pie?

Miranda habla sin mirarlo, como si no quisiera verlo, solo de reojo.

— Si, es lo que hemos planeado — Lorenzo suspira.

Lorenzo y Miranda se habían reunido en el transcurso de la semana, el le había ofrecido su ayuda para desenmascarar a Lucius.

La idea de aquella mentira y que la loba que amaba estuviera en medio le causaba una gran angustia, sentía que el debía liberarla.

— Creo que es lo mejor, mi hermana debe saber quién es el, pero tenemos que saber cómo hacer las cosas, no quiero que mi hermana me odies — Miranda tenía un aliado, alguien que odiaba a Lucius, con tanta fuerza y se nublaba su juicio.

Los dos llegan y son recibidos como los demás invitados, Lucius gruñe al ver a Lorenzo, pensó que no tenía las agallas de venir después de aquella pelea.

Bianca los recibe con una corona de flores en el cuello, y un abrazo, con esa sonrisa que la caracteriza.

La gente de la manada y los invitados se ponen de pie en señal de respeto al ver llegar a Romeo y Aurora.

Aurora busca a sus hijos, los abraza, y sonríe al ver que aún están bien, la idea de aquella maldición le vuelve loca la cabeza.

No quiere que a ellos llegue la tristeza de la que un día fueron víctimas Romeo y ella.

—¿Donde esta Bella? Vine a verlos a los dos.

Romeo abraza a Aurora mientras le da un beso en los labios.

— En unos momentos estará lista — Responde Bianca, que sabe lo que ocurrirá.

— Te dije que haría todo por amor a ti — Bella sonríe mientras recibe el abrazo de su familia, y un beso en los labios de su esposo.

Después de tanto tiempo sus piernas funcionan.

Oscar le da un beso en la mejilla

— Nunca olvides que te amo, que eres lo más importante para mí.

La ceremonia inicia, Miranda bajo los rayos de la luna decide ser la madrina de la primera niña

— Siempre cuidare de ti Paulina.

Aurora hace lo mismo, y con la un beso en la frente — Siempre cuidare de ti, Perla.

La manada aplaude es momento de felicidad.

Miranda se acerca a Lorenzo que ha estado apartado, que ha intentado mantenerse alejado de esta situación, para no hacerse visible.

— Creo que llegó el momento, debemos quitarle la máscara a Lucius y a su familia perfecta.

Maria Antonia llega a la fiesta, su invitación fue forzosa, pero no podía dejar marginada su manada, ella solo esperaba un momento de debilidad para atacar.

Bebía una copa observando cada detalle, esperando un error de Romeo que lo único que hacía era bailar con su esposa con una gran sonrisa al ver su vida idealizada.

Miranda decidido acercarse a la mitad de la manada, Lorenzo estaba ahí para confirmar lo que ella decía.

Darío y Lucius abrieron los ojos no sabían que esperar de esa loba que solo era una mala brecha en la vida del Alfa.

— Quiero darles una noticia, en especial decirle algo a Bianca.

Miranda se toma un poco de agua, quiere aclarar la garganta, soltar la bomba que contiene en su voz.

Cuando va a decir la verdad, quien se acerca corriendo es Camila que empuja del centro a Miranda.

—¡Soy la amante de Óscar! ¡diles que los dos tenemos varios Meses de relacion — Camila derrama una lágrima mientras delata su relación en medio de toda la fiesta.

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