Lin Xichen se echó en sus brazos y podía sentir su pecho temblar, por lo que extendió sus brazos para abrazarlo. Sin importar si él amaba a mami o no, la ansiedad y la culpa que estaba sintiendo ahora eran reales.
-Vamos a buscarla. —Zong Jinghao hizo que el niño lo mirara-. ¿Me acompañas?
-Sí —respondió Lin Xichen sin dudarlo y luego, con cautela, dijo—: ¿Qué hay de Ruixi? Si mami y yo no estamos aquí, hará un escándalo.
-Papi.
Sin saber cuándo Lin Ruixi había visto a Zong Jinghao, salió corriendo de la casa hacia él extendiendo sus regordetes y blancos brazos para envolverlos en la pierna de Zong Jinghao.
-Papi. -Miró hacia arriba e hizo un gesto con sus labios rosados-, Papi, ¿puedes soltar a Xichen y abrazarme a mí en su lugar? Xichen es un niño grande, no necesita
abrazos, ¡abrázame! -dijo mientras parpadeaba.
Lin Xichen se quedó sin palabras mientras que Zong Jinghao se agachó y la estrechó entre sus brazos. La pequeña niña estaba vistiendo un vestido rosa y tenía su cabello atado en una cola de caballo con algunos mechones alrededor de sus orejas y en su frente, pero todavía se podía contemplar su rostro. Sus ojos eran grandes e ¡nocentes mientras se aferraba al cuello de Zong Jinghao y frotaba su rostro con el de ella.
—Papi, regresaste. ¿Por qué no está mami contigo? No la he visto en días. Nunca nos hemos separado, la extraño.
Zong Jinghao miró a lo lejos mientras presionaba las dos pequeñas cabezas sobre su pecho.
-Irán conmigo a buscarla. -Hizo su mejor esfuerzo para sonar tranquilo.
—¿En verdad? —Lin Ruixi estaba emocionada—, ¿Mami está jugando al escondite con nosotros? ¿Por eso tenemos que buscarla?
-Sí.
—Vaya, estoy muy emocionada.
Lin Ruixi se agitó emocionada en sus brazos, pero Lin Xichen no compartía su optimismo.
—Es bueno ser un niño.
Cuando Lin Ruixi escuchó sus palabras, se dio la vuelta para verlo.
-Solo eres mayor que yo por un par de minutos, no eres mucho mayor, incluso la abuela dice que naciste como un extra.
-La abuela dijo que tú eres el extra. -Lin Xichen arrugó su rostro al fruncir el ceño.
En ese momento, Zhuang Zijin había salido de la casa vistiendo un delantal y puso sus manos frente a ella.
-Vengan, es hora de comer.
—Abuela, Xichen es el extra, ¿cierto? —Para probar que ella tenía razón, Lin Ruixi se apresuró a preguntarle a su abuela antes que Lin Xichen lo hiciera, como si fuera a tener razón si era más rápida que él.
Era fácil saber lo que pensaba la pequeña niña, pues era mucho más sencilla que su hermano y rara vez pensaba demasiado.
—Tú eres el extra. —Zhuang Zijin se rio y la molestó.
—¿Por qué no es Xichen el extra? Es muy cruel —gritó Lin Ruixi molesta.
Él le robó sus abrazos de papi, así que era cruel.
—Fue porque mami solo tuvo un bebé al principio, después se enteró que había otro. ¿El extra no sería el que vino después? -Lin Xichen miró a Zhuang Zijin antes de hablar.
—Ese debería ser Xichen, él es el extra. —La pequeña no quería admitir su derrota.
—Pero Xichen fue el primero en nacer... -¡No importa! ¡Xichen es el extra! -Lin Ruixi insistió mientras se aferraba con fuerza al cuello de Zong Jinghao
Papi, ¿Xichen es el extra?
—Ambos son igual de importantes. —Zong Jinghao la tomó en brazos y palmeó su cabeza.
-Vayamos dentro a comer. —Zhuang Zijing sostuvo la mano de Lin Xichen.
-Estaba planeando llevarlos, Lin Xinyan debe extrañarlos. -Zong Jinghao aprovechó la oportunidad para decirle a Zhuang Zijin que iba a llevarse a los niños.
—Está bien —replicó Zhuang Zijin.
Ella sentía que había algo mal en sus palabras, pero pensó que tal vez ella lo estaba pensando demasiado. Parecía que Zong Jinghao les agradaba a los dos niños, en especial a Lin Ruixi. Zhuang Zijin se alegró que estuviera dispuesto a formar una familia con Lin Xinyan.
-¿Cuándo regresarán? -preguntó Zhuang Zijin.
-No tengo una fecha definida. Quiero traerlos conmigo y que no nos contacten para que podamos disfrutar. —Zong Jinghao no sabía cuándo podría encontrarla.
Shen Peichuan se agarró para ver mejor a la pequeña niña, quien era blanca y con brillantes ojos que cuando parpadeaban, parecían centellantes estrellas. Se estiró para pellizcar sus mejillas, pero antes de que sus dedos tocaran su rosto, lo tomaron por la muñeca; al alzar la mirada, vio la fría expresión de Zong Jinghao.
-Quiero pellizcar sus mejillas. Tienes una hija, no puedes ser tan mezquino, ¿o sí?
¿Jugar con niños no consistía en pellizcar sus mejillas, besarlos y abrazarlos? Ni siquiera había empezado aún con besarlos y abrazarlos.
-No puedes tocarla con tus manos. -Zong Jinghao le apartó la mano.
A él no le gustaba que otras personas tocaran a Ruixi porque era una niña, en especial si eran hombres. Entonces, tomó a su hija en brazos y sostuvo la mano de su hijo.
—Si ya terminaste de empacar todo en el auto, entonces vámonos.
Así, caminó hacia el auto. Shen Peichuan permaneció agachado en el mismo lugar con una mirada de asombro; luego, bajó la cabeza y miró su mano que no estaba sucia. «Entonces ¿por qué Zong Jinghao estaba siendo tan mezquino?» Se apresuró a seguirlo.
-Zong Jinghao, necesito hablar contigo. -Él no era un predador, así que no entendía su recelo—. Amas a tus hijos, lo entiendo. Después de todo, solo los encontraste cuando ya eras mayor, pero no puedes ser así de mezquino...
Zong Jinghao giró la cabeza.
—¿Qué dijiste? ¿Solo los tuve cuando ya era mayor?
¿Acaso ya estaba viejo?
—No mayor. —Shen Peichuan se golpeó los labios; aun así, lo insultó para sus adentros. «Ya está en sus treinta, casi cuarenta, ¿eso no es ser mayor?» Después, se acercó—.
¿Por qué no tengo un hijo? ¿Y comprometemos a nuestros hijos?
«Si no me dejas tocarla, entonces voy a tener un hijo que se case con tu hija. Ella será mi nuera. Ja, ja, ja», pensó Shen Peichuan.
La expresión de Zong Jinghao se ensombreció, así que reaccionó rápido; antes de que Zong Jinghao pudiera hacerle algo, corrió al interior del auto.
-Papi, ¿qué es compromiso? —Lin Ruixi parpadeó.
Zong Jinghao no sabía cómo explicárselo, por lo que dio palmaditas en la cabeza de su hija y la llevó al auto en sus brazos.
—Solo está diciendo tonterías.
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