Ellos me miraban para que les diera una explicación, pero me había enojado mucho.
—No me miren, así que yo se fueron ustedes — los acusó.
—De qué hablas — me pregunta mi abuelo.
—Pues de que todos en casa tuvieran conflictos.
—No sé de qué hablas, alguien aquí tuvo algo que ver en esto — pregunta el abuelo mirando a mis tíos. Lo que vi y más me causo risa es que todos como niños pequeños señalaron a mi tía Lilit.
—Traidores, pero ellos también fueron — se defiende.
—Sí, pero tú fuiste la de la idea — la acusa mi tío Deilec.
—Me pueden explicar que hicieron— les pregunta.
—Solo fue una prueba — dice mi tío Black.
—Solamente una prueba — los miro — su prueba está causando que una pareja poco y se separe — estoy enojada con ellos.
—La mayoría pasó la prueba, a ellos los está separando las mentiras del lobo — explica mi tío Deilec.
—Y lo de Dalí, tía, tú debes saber lo que le pasa para que se pusiera tan triste, nada más por qué le dijeron inmadura — ella ve y veo que sí sabe por qué.
—Cariño, eso te lo tendrá que decir ella, yo no puedo hacer mucho aquí, pero tú sí y el enojo con su mate se le pasará — mi tía Luna, siempre con esa voz suave que la caracteriza.
—Dime tía querida porque le pusiste esa "prueba "como lo llamas.
—Quería saber si el lobo es bueno para mí, bebe— ruedos los ojos, por lo que dice a Dalec siempre lo trato como si fuera un niño que no sabe cuidarse por sí mismo.
—Claro tía y dime Lucifer, ya sabe lo que asiste— solo se lo digo para molestarla.
—No y no lo invoques, ya sabes cómo le gusta llamar la atención, aparte a él no le importa que su hijo tenga como para a un hombre — eso lo sé Lucifer es muy liberal, demasiado diría yo.
— Si lo sé, pero ahora como hago para Saíd y Ámbar se arreglen — miró a tía Luna porque eso es más su competencia por ser la diosa de los lobos.
—Cariño, tú no puedes hacer nada, eso le compete a ellos arreglarlo, solo así podrán afianzar su lazo de mates — me responde igual, creo que tengo más preguntas para ella.
—Lo sé, pero quiero ayudarlos.
—Hija, ya escuchaste, tú no puedes intervenir — me dice el abuelo.
—Está bien — le respondo aunque no pienso quedarme de brazos cruzados — otra pregunta tía porque la pareja de mi hermano Bastian tiene mate, aparte de eso uno muy malvado — le preguntó.
—Lo sé, pero no sé cómo sé tomar a qué lo alejé de su hermano.
—Yo creo que te entenderá — le digo— bueno porque ustedes saben que nos ayudarán a buscar a Ramzes — le digo a mis tíos.
—Está bien, pero lo que hablamos no te debes meter en lo del lobo y la humana, ellos deben arreglarlo solos — repite mi abuelo.
—Está bien lo que digan mejor me voy, he estado mucho tiempo aquí, no sé cuánto a de ver pasado, haya — la verdad no sé tal vez despierte y haya pasado una semana.
—No te preocupes por eso, arregle que cuando tú vinieras de visita el tiempo vaya más lento — dice mi abuelo, la verdad me alegra porque eso del tiempo me aturde mucho.
—Bueno, yo me voy adiós, los quiero, los amo, los adoro, no me extrañen, no me llamen que yo los llamo. — me despido de ellos y poco a poco voy desapareciendo antes hacerlo por completo escucho a mi tía Lilit susurrarle a mi tío Black *Ella no hará caso y se meterá* a lo que mi tío asiente y ríen, al menos ellos me conocen bien.
Poco a poco me voy despertando y siento mucho peso encima de mí, diría que es mi lobito, pero no es el sí, no que Yack, Nay, Ámbar y Yassi se han tirado encima de mí como que esto se les hará costumbre.
—No por los Dioses, ahora son más, ustedes me quieren asfixiar, quítense — les digo. Trato de sacarlos, pero se resisten.
—No nos gusta abrazarte, aparte hoy día te vamos a secuestrar — me dice Yack por los Dioses, ahora sé que llevamos la misma sangre, no sé cómo tratarlo. Bueno en teoría somos primos, ya que me refiero a que tenemos la misma sangre de los dioses.
—Como que me van a secuestrar les recuerdo que soy más fuerte que ustedes.
—Pues verás, somos más una guardiana fénix tu mano derecha para ser más exactos un príncipe vampiro y dos humanas, somos más que suficiente para levantarte o al menos que me ayuden hacerte cosquillas — me dice. Son crueles como me pueden hacer esto a mí, ruedo los ojos de manera dramática.
—Como odio que sepas lo de las cosquillas, ahora adónde me llevarán — Yack señala a las chicas.
—A la florería de las chicas. — sé que Yassi lo hace para huir de César.
—Si es que desde que estamos aquí no hemos ido y tenemos que ver las flores. — Ámbar también está huyendo de su mate, creo que no nos hará daño descansar un poco de todo este drama que están pasando.
—Está bien, pero lleven mucha comida. — les digo y ellos ríen por lo que digo. No sé, pero creo que hoy será un día lleno de sorpresas también creo que me estoy olvidando de algo.
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