capitulo 56
Esam
Ver de nuevo a Nathalia siempre me ponía nerviosa, ansiosa y loca.
No sabía si ella vendría con ese diputado, y eso me puso nervioso e impaciente.
Cómo deseaba que todo hubiera sido diferente, que Enzo hubiera sido más eficiente y no la hubiera dejado escapar.
Los tres nos dirigimos a Sahriff, lo dejé para ir a última hora y acercarme lo más posible al baile.
Voy a llevar a Mia conmigo y parece perdida en sus pensamientos, así que es muy inteligente.
- Mia - me mira - Quiero un favor tuyo.
- Sí REY.
- Primero, no me llames REY delante de nadie.
- Lo siento, fuerza de la costumbre.
- Está bien - suspiro y me acomodo en el asiento del avión - Pero me gustaría que vigilen al diputado João Gilberto, y si es posible coquetear con él y ver cómo será su reacción.
- ¿Y si reacciona al coqueteo?
- Háblale, coquetea pero no hagas nada, quiero saber si de verdad le es leal a mi prima.
- Sí, sé cómo protegerme en caso de que él - nos miramos - Ya sabes.
Cuando mi avión aterrizó en Shariff, mi madre ya estaba esperándome en la pista privada y con su tía Sophie.
Probablemente vinieron a ver si había traído a alguien.
Abrimos la puerta del avión y vinieron corriendo, bajé, abrochándome el traje y poniéndome las gafas de sol.
- Hijo te extrañé mi amor - y miró las escaleras por las que había bajado y le sonrió a Mia que bajaba hermosamente con la nariz al aire - Veo que trajiste a alguien.
- Sí, esta es Mia Mom, una amiga mía.
- Bienvenida Mía.
"Gracias, señora", respondió Mia con una media sonrisa.
- Estoy muy seguro de que subiremos un buen valor en el baile, ¿por qué no viniste antes hijo?
Sabes que te extraño. Me tomó del brazo y comenzó a acercarme a la tía Sophie.
- Hola mi hermoso sobrino – miró a Mia y la observó por un largo rato – ¿Y quién es ella?
- Es amiga de Esam - mi madre la miró - No hace falta que digas nada.
- Nathi acaba de llegar también, por eso te pidieron que esperaras para bajar con el avión, llegaron ella y su novio, el Diputado, simpático él - señala el Hangar - Nos están esperando para ir a palacio.
Y allí estaba ella, hermosa con un vestido naranja que se mecía con el viento del desierto, cómo quería que esta mujer fuera mía.
Su cabello negro bailaba y se lo apartó de la cara con sus delicados dedos.
Pero su atención se dirigió directamente a la mujer a mi lado.
Se quitó las gafas de sol y fijó su mirada en Mia.
- Este es el diputado João Gilberto – nos presenta la tía Sofía.
- ¿Cómo estás?
– Aprieto su mano, que para mi sorpresa es firme y también aprieta la mía como si estuviéramos midiendo fuerzas – Esta es mi amiga Mia.
Las dos mujeres se pararon frente a frente, y Mia, que ya había visto fotos y cuando Nathi había estado en SEXO más que enmascarada, estaba paralizada.
Se miraron y levantaron las manos para saludarse, todos nos quedamos callados y los observamos a los dos.
¿Cómo estás?
Fue dicho.
Eran muy similares.
Mia era huérfana y Natalia también.
Pero Mia había vivido en el interior de São Paulo y Nathalia en Paraná, eran de edades diferentes.
Podría ser coincidencia y nada más.
- Bueno, ¿vamos al palacio?
- Mamá, Mia y yo nos quedaremos en el ala de invitados.
- Imagínate hijo mío, ya he ordenado tu habitación como siempre, como es la primera vez que traes a alguien a casa puedes dormir en la misma habitación, sin problemas hijo mío.
- No, señorita Helena, me quedaré en el ala de invitados - dijo Mia.
- Imagínate hijo, puedes dormir en la misma habitación, no somos tan heterosexuales, Nathi y el Diputado dormirán en la misma habitación - sonrió victorioso, probablemente ya sabe de nuestra participación.
- Estaba resolviendo problemas, perdón por dejarte solo.
- No salí de la habitación, solo me duché y descansé como no lo había hecho en mucho tiempo.
- ¿Te estás quejando de tu trabajo?
- No REY, solo eso.
- Estaba bromeando, pero en qué estabas pensando tanto cuando llegué aquí.
- Lo de tu prima Nathalia y lo parecidos que somos - respiró hondo - Esam, ¿realmente es adoptada por sus tíos?
- Sí, mi tío Pedro la encontró en el molino y luego la adoptaron.
- ¿Qué sabes de ti mismo?
- Que me dejaron en el orfanato de bebe, y nadie sabe nada, eso me dijeron - se enderezó en la cama - Tengo un recuerdo que me viene a la memoria, de una casa blanca con ventanas azules, ya sabes cortijo - la animé a hablar - no sé si es un sueño o cosas de mi cabeza.
- Le pediré a Enzo que investigue, ¿cómo terminaste en este orfanato, en qué ciudad vivías?
- Ribeirão Preto - Está tan lejos de la planta, pero no está de más intentarlo - Me llevo la mano a la barbilla pensativa - ¿Y si hacemos un ADN?
- ¿Será?
Sí, tomamos un mechón de su cabello y lo enviamos a analizar junto con el tuyo.
- ¿Pero cómo vamos a conseguirlo?
- Déjame hacerlo, montar un laboratorio - Me levanté - Voy a darme una ducha, cenamos.
- Voy a buscar el laboratorio, ¿y de verdad necesito ir a esa cena?
- Claro que eres mi escolta y no te olvides del Diputado, él esconde algo y yo lo averiguaré.
- Esam puede ser que él es una buena persona y realmente la ama.
- Ella es mi Mia, solo mía, y la recuperaré.
- Si tu lo dices.
Entro al baño y pienso en ella, los días que pasamos juntas y estuvimos bien, cuantas veces hicimos el amor, si pudiera la volvería a llevar ahí hasta que me perdone, ya no podría ni participar en el Summit si ella lo pidiera, podría dejar el SEXO si ella me lo pidiera, solo para tenerla conmigo y poder amarla.
Lucharé con armas más pesadas esta vez.
Y tengo un plan.
Que Allah esté de nuestro lado.
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