Secreto. romance Capítulo 18

Me sentía tranquila y eso me hizo feliz.

—llegamos por fin —Dax detuvo el auto frente a una enorme casa de color azul y todos la miramos con atención.

Es hermosa, con el jardín lleno de flores, es una casa un poco apartada de la ciudad, supongo que siempre es así por si ocurre alguna transformación inesperada o algún ataque.

—entren, estaremos aquí un tiempo —sentenció mi hermano Jack.

Suspire aliviada y nerviosa, mientras pensaba en sí en verdad sería capaz de empezar de nuevo.

—el lugar es muy bonito —susurro Ivonne a mi lado.

—si, mucho —conteste.

Jack tomo mis maletas y yo solo le di una mirada rápida, aún tenía sus palabras presente pero después de todo el tenía razón.

Leroy había elegido a su esposa hace mucho tiempo.

—este territorio es controlado por vampiros pero nuestra manada tiene convenios con ellos, así que no les harán daño —Dax nos miraba seriamente lo cual denotaba que era importante saberlo.

—muy bien, entremos ya —dijo mi madre dándome una sonrisa.

La casa era muy hermosa y acogedora, no era tan grande como la mansión de Leroy y eso me gustaba, se sentía como si estuviera en casa otra ves, llegando todos los días después de la escuela para hacer mis tareas.

Las paredes eran de color beige con muebles color café y una cocina muy bien equipada.

—¿de quien es esta casa? —pregunto Ivonne.

—eran de mis padres —contestó Dax con la mirada vacía.

Se me encongio el corazón pues sabía que el estaba pensando en sus padre.

—es una casa muy hermosa —dije dedicándole una sonrisa cálida.

Dax asintió levemente y todos nos acomodamos en aquella casa que ahora sería nuestro hogar.

—podría acostumbrarme a esto —dijo Jack apareciendo en la sala.

—tu podrías acostumbrarte a cualquier sitio —respondió Ivonne en tono burlon.

Jack río y segundos después fijo su vista en mi.

—Amelie yo... —se interrumpió.

—lose, esta bien —conteste y le dedique una débil sonrisa.

—no debí haberlo dicho, de verdad lo lamento —sonaba arrepentido.

—no hay problema hermanito —Jack me sonrió agradecido y yo solo le dedique mi mejor sonrisa.

La tarde transcurrió de manera perfecta, todos nos juntamos en el jardín trasero para jugar juegos de mesa, Dax aventó sus cartas de manera dramática al ver como Ivonne ganaba sin esfuerzo, mientras que todos nos reímos al ver su reacción.

Después Jack comenzó a contar chistes muy malos que daban risa gracias a eso, mi madre después comenzó a avergonzar a Jack contándoles historias de niño.

Fue un momento único y especial, ver la sonrisa de todos mis seres queridos y por primera ves en varios meses sentirme completa y feliz.

El sol comenzaba a ocultarse dándonos los últimos rayos de Luz, cuando de repente sentí como algo en mi interior se partía o se desprendía de manera dolorosa.

Caí al piso al sentir aquel dolor traspasar cada centímetro de mi cuerpo dejándome sin aliento.

—¡Amelie! —grito Jack mientras corría a mi auxilio.

—es el vínculo Dax, necesita otra pocion, ¡pronto! O no resistirá —la angustia en todos era evidente.

Yo no podía articular ninguna palabra pues el dolor era muy intenso, es como si desprendieran algo desde mi interior.

—resiste Amelie, ¡haré todo lo posible! —Dax me miro estupefacto y salio corriendo fuera de casa.

Jack me cargo en brazos y yo solo convertía mis manos en puño mientras trataba de controlar el dolor.

—Jack... No puedo más —susurre apenas.

—no Amelie, por favor, un poco más —susurro el.

—Amelie, no quiero perder mi vínculo con Leroy... No por favor —me suplicaba mi loba.

—haré todo lo que pueda te lo prometo —dije segura.

Esmee me miró asustada y asintió no muy segura.

—Amelie, ¡por favor Amelie! No podré resistir si rompes nuestro vínculo —escuche esa voz en mi cabeza

—¡me perteneces! No puedes hacerme esto... No por favor —suplicaba con todas sus fuerzas.

Podía sentir su agonía y el también podía sentir la mía, había cortado la conexión para ya no volver a escuchar su voz en mi cabeza y ahí estaba otra ves... Su voz era como volver a ver su rostro perfecto.