Un contrato de amor romance Capítulo 72

Nana Mery, Aisha y yo platicamos sobre mi vida mientras comíamos. Todos los sucesos extraños, pasados y recientes.

- Siempre te tuvieron vigilada, mi familia siempre te cuido, ¿No te alegra saber eso? Evitaron que siempre algo malo te pasará.

- ¡Pero el peluche! Eso no creo que viniera de tu padre - alcé un poco la voz.

- Quizás fue la mafia que secuestró a tu hermana, ella lo dijo, ¿No?

- Si, pero... ¿Por qué?, ¿Qué quieren de mí?

- Eso tenemos que averiguarlo - Aisha recogió su plato - ah, y por cierto,... Creo que mi viaje se retraso, pasaré mas tiempo aquí - fue hasta la cocina.

Sonreí, esto no lo hacía por que se retraso su vuelo, lo hacía por mí.

Después de dejar arreglado salimos hasta la casa de mis padres.

Mamá estaba en el jardín con Itzy, estaban sentadas encima de una manta celeste con libros.

Entré y notaron mi presencia.

- Hermana - Itzy se paro enseguida.

Sonreí. Extendí mis brazos hacia ella y me abrazó

- Hola Itzy - se separó de mi.

- Hola - saludó a mis acompañantes.

- Itzy, ellas son, Aisha Benedict.

- La hermana de tu esposo,... Mucho gusto - Itzy extendió su mano hacia Aisha, esta la atendió con gusto

- Yo soy Mery más conocida como Nana Mery.

Después de las presentación mamá nos invitó a entrar.

Un charol con galletas recién hechas fue puesto por Itzy en la mesa en la que estábamos.

- Así que Itzy, entraras a la universidad, ¿La misma que Helka?.

- Eso espero, necesito aprobar, estos 6 meses me prepararé para entrar en el próximo ciclo.... Estoy agradecía por tus padres Itzy... En verdad - me recosté en la silla al escuchar esas palabras.

- Si, mis padres a veces solo salvan vidas - sentí un disgusto por parte de Aisha.

- Así que Aisha, eres un año menor que Drake.

- Si, pero no tengo ningún privilegio, nuestros derechos y amor fueron los mismos, a excepción de Phil, el consentido, el Don Juan de los hermanos, tuvo más suerte que Drake y yo... Ahora solo, va de fiesta en fiesta con chicas, disfrutando de cada color y sabor.

- No conocí a Phil como a Drake o a ti, pero se que el tiene un corazón lleno de amor, y el solo trata de llamar la atención.

Nana Mery se paro y se alejo hacia afuera, mamá la siguió, fueron hablando y sonriendo.

- ¿Qué? Imposible, Phil tiene toda la atención de mamá y papá, hasta creo que no se preocupan por nosotros.

- ¿Estás celosa? - me atreví a decir.

- No, solo que, Phil tiene toda su vida hecha, y el así no aprenderá a valorar cada pedazo que puede experimentar ganándosela... Es decir, solo intento ser una buena hermana mayor.

- ¿Por qué no hablas con tus padres? - preguntó Itzy.

- Ellos "escuchan", dicen si o no y luego solo hacen que escucharon e inventan excusas sobre no ir o si.

- ¿Qué?.

Aisha parece darse cuenta de sus palabras.

- Ah.. - no sabe como excusarse.

- Esta bien, creo que tengo vagos recuerdos cuando era pequeña - presté atención a Itzy - yo también era celosa, con Helka, ella quien podía subirse a juegos a los que yo no, y creí que era preferencia, pero entendí que sólo me protegían porque podía salir herida, o aun peor.

- ¿Entonces mis padres creen que Phil puede salir herido si ellos no lo cuidan a la edad que tiene?.

- No, solo intento decir que, Phil es diferente a ustedes, y tus padres notaron en lo que ustedes les hizo falta, y ahora lo intenta compensar con Phil.

- OK, saben, creo que debemos de dejar de hablar de personas ausentes - comenté.

- ¿Qué tal si salimos? - propuso Aisha.

- Creeme que la última vez no me fue de maravilla.

- Ouh.

- Además, mañana mi agenda está ocupada con el tema de la boda.

- Ey, existen pastillas para eso.

- No creo querer salir a una fiesta.

Llamadas entraron en el celular de Aisha.

- Un momento.

Se para y se aleja de nosotras.

- Y dime, ¿Que tal te va aquí?, ¿Sigues en tu habitación?.

- Si, pronto, ahora duermo en la tuya, esta toda vacía,.. Al llegar, creí encontrar casi como la última vez que la vi, o al menos llena.

- Todo tiene su fin Itzy.

- De las cosas buenas y malas.

- Si...

- Debemos irnos - dijo Aisha sería.

Salí de la casa, me despedí de mamá y mi hermana, nana Mery decidió quedarse.

- ¿Qué pasa? - un carro se estacionó brusco frente a nosotras, bajo el vidrio.

- ¿Las llevo? - pregunto Phil con gafas negras puesta.

Subimos al carro.

- Te explico en el camino.

Una vez montadas en el carro, Phil arrancó, y como siempre, se pasaba los rojos y rebasaba.

- ¿Me pueden decir que esta pasando?.

- Tenemos pistas de tu madre - soltó Phil.

Me quedé en silencio, esta podría ser mi oportunidad para encontrarla. Al fin podría estar con mi familia, pero, ¿Quiero eso?

- Tuvieron un avistamiento cerca del puente Rilfild, la vieron unos vagabundos, la policía tuvo suerte al estar cerca y seguir con la búsqueda.

- Oh por Dios - no lo podía creer.

- Iremos donde Eduardo.

- ¿Quién es él?

- Tenemos que tener refuerzos... Y Eduardo es uno de mi padre... El ha trabajo con mi padre desde hace antes de subsistir nosotros... Es como Drake y Hugo.

Y no queremos pensar en que Drake sea como su papá, y mis hijos sean justo como ellos.

Llegamos a una ciudadela, todo parecía ser marginado, todo sucio, paredes manchadas con latas de pinturas, el suelo lleno basura en las esquinas, carros de compras y botes grandes y apestosos.

Llegamos a un lugar, una casa parecía.

Bajamos del carro, Aisha se había puesto una chaqueta al bajarnos.

- ¿Crees que Eduardo debería verla? - pregunto Aisha a Phil.

- Creo que si, por ahora poco debe saber.

- ¿Saben que los escucho?.

Ambos siguieron, tocaron una puerta que parecía construida desde hace ya más de una década. Esta fue abierta por un hombre que parecía guardaespaldas: calvo, grande, ancho, músculos en los brazos, tatuajes, cigarrillo, arete, un arma en su pantalón y unas gafas que completaba su parentesco a un luchador.

- Hola Roca - dijo Aisha saludando al tipo.

Pasamos en silencio.

Subimos unas escaleras delgadas y altas.

Al llegar caminamos por un pasillo de madera, hasta llegar a la izquierda a una puerta.

- Eduardo - tocó la puerta Phil.

- Adelante.

Phil empujó la puerta hacia adentro, habían unos hombres sentados, otros parados con unas chicas, el humo del cigarrillo y el olor a alcohol barato abundaba en el ambiente del lugar.

- Hola Chico,... Creemos que tenemos pistas de la mamá de Helka, y queremos que nos ayudes.

Este se cruza de brazos pensando cual será la condición de el.

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