"Jaja." Al principio, Selena solo admiraba la apariencia de Julieta, ¡ahora realmente se había enamorado de su personalidad!
Otis quería decir algo más, pero la mirada de Julieta pasó por encima de él.
Esa mirada fría como el hielo lo congeló en un instante, bajó la cabeza y ya no se atrevió a decir otra palabra.
¡Si hubiese sabido que Julieta era tan dominante, no se habría atrevido a molestarla ni siquiera con toda la valentía del mundo!
"¡Preparación en el set!" La voz de Alfonso llegó desde no muy lejos, todo el mundo la escuchó como una melodía celestial.
Todos vieron con cautela a Julieta, al ver que no tenía ninguna expresión, se fueron rápidamente.
Para ser honestos, la gente se atrevía a hablar de Julieta solo porque parecía fácil de intimidar, ¿quién podría imaginar que parecía tan inofensiva, pero era realmente fuerte, lista para demandar sin lugar para negociar?
Después de las demandas, la actitud del equipo de producción hacia Julieta cambió drásticamente.
Todos la evitaban, nadie se atrevía a acercarse a ella. Con Otis como advertencia, nadie se atrevió a difamarla a sus espaldas, por miedo a terminar como él.
La vida en el set de filmación era ajetreada pero plena, aunque Julieta no dormía lo suficiente, se sentía muy feliz.
Ser actriz había sido su sueño desde pequeña.
Hay algunos momentos satisfactorios que el dinero no podía comprar.
Hacer lo que amaba era hermoso, mucho mejor que volver a casa para heredar la fortuna familiar. De todos modos, no le faltaba dinero.
Julieta estaba ocupada, pero hablaba con Joan por video todas las noches.
Hablaba más fluido, sonreía más, se veía adorable, parecía haber engordado un poco.
Realmente quería abrazarlo y besarlo...
Bruno soñaba con Julieta todas las noches, la extrañaba tanto que casi se volvía loco, pero al ver la mirada condescendiente de Joan, dijo con desdén: "No me importa, ¿quién dijo que la extraño?"
Tan pronto como terminó de hablar, Joan soltó el botón de voz que estaba presionando y luego dijo a la iPad: "Srta. Mendoza, ¿lo escuchaste? Bruno dijo que no te extraña. ¡Yo soy quien más te quiere!"
"¡Joan!" Bruno no esperaba que el niño aprendiera a ser manipulador, inmediatamente comenzó a gritar.
Él se dio cuenta de que su situación era mala, abrazó su iPad y se apresuró a salir de la escena del crimen, gritando mientras corría: "¡Auxilio! ¡Bruno me va a pegar!"
Bruno no habló.
Antes, Joan no hablaba mucho, lo que le preocupaba. Ahora que su elocuencia mejoró, Bruno preferiría que hablara menos para evitar enfadarse todos los días.
Pero no podía permitir que las cosas continuaran así, parecía que Julieta tenía muchos pretendientes, no podía permitir que otros aprovecharan la oportunidad.
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