Casado dela noche a la mañana romance Capítulo 378

—¡Ya está! —Tras dejar escapar un largo suspiro de alivio, el técnico de mantenimiento se limpió el sudor de la frente y abrió rápido la puerta del ascensor que estaba cerrada a cal y canto.

Una vez abierta la puerta del ascensor, Vivian se apresuró a avanzar mientras rezaba para que Finnick estuviera bien y no le ocurriera nada malo. En los segundos que siguieron a la apertura de la puerta del ascensor, Vivian vio una silueta pasar a su lado. Cuando volvió a mirar, solo vio el bolso de una señora en el ascensor vacío. Evelyn y Finnick no aparecían por ninguna parte.

—¡Deprisa, contacten con el hospital para pedir una ambulancia! —Tras oír la voz de Finnick por detrás, Vivian se giró y lo vio dirigirse a grandes zancadas hacia la esquina de la escalera con Evelyn, que ya estaba inconsciente.

A Vivian se le encogió el corazón cuando vio que Finnick se marchaba con Evelyn en brazos y ni siquiera la miró tras salir del ascensor. Sin embargo, pensó que el estado de Evelyn debía ser muy crítico ya que se había desmayado, por lo que era normal que Finnick la atendiera. Aunque no fuera Evelyn, ella creía que Finnick haría lo mismo. Vivian se sintió un poco mejor al pensar en eso, y luego corrió tras Finnick. Sin embargo, cuando bajó, vio que Finnick ya había seguido a la ambulancia y se había marchado. Mientras Vivian se preguntaba cómo llegar al hospital, vio a Noah salir del aparcamiento.

—¡Noah! —Vivian gritó mientras corría en dirección a Noah.

Noah dio la vuelta a su coche de inmediato al oír la voz de Vivian y detuvo su vehículo junto a ella. Luego se asomó a la ventanilla y preguntó:

—¿Qué le pasa, señora Norton?

—¿Sabes a qué hospital fueron Finnick y Evelyn? ¿Puedes llevarme allí? —preguntó Vivian con ansiedad.

—Resulta que me dirijo hacia allí en este mismo momento. Suba al coche, señora Norton. —Cuando Vivian subió al coche, Noah corrió hacia el hospital.

La cara de Vivian se puso pálida y se le revolvió el estómago al asustarse por la velocidad de conducción de Noah. Sin embargo, aguantó su malestar y no dijo nada porque quería llegar al hospital lo antes posible.

Llegaron al hospital en poco tiempo. Tras bajar del coche, Vivian sintió un repentino mareo y casi se cayó al suelo. Noah la abrazó de inmediato al ver eso.

—Lo siento, Sra. Norton. Antes tenía mucha prisa.

—Está bien —Vivian respondió con una sonrisa tensa. Después de que Noah ayudara a Vivian a recuperar la compostura durante un rato y de que su mareo desapareciera, los dos entraron en el hospital.

—No estará en peligro entonces, ¿verdad? —preguntó Vivian nerviosa. A pesar de que Vivian veía a Evelyn como una rival en el amor y no le gustaba mucho como persona, seguía esperando que Evelyn estuviera a salvo.

—Ella mencionó antes que su condición es inveterada, así que no debería estar en peligro. —Finnick tampoco estaba seguro.

En silencio, ambos esperaron a que terminara la operación.

—Por cierto, ¿se ha notificado a Benedict? —La idea se le ocurrió de repente a Vivian. Como Benedict era el único pariente de Evelyn, debía ser informado para que viniera rápido.

Finnick asintió y dijo:

—Le he pedido a Noah que le informe, debería llegar en cualquier momento...

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