Además, lo que Orson acababa de decir confirmaba lo que Jacinta sospechaba: ¡ese niño definitivamente no era suyo!
Siempre y cuando Orson no tuviera otros hijos por fuera, no habría más obstáculos entre él y Jimena.
Jacinta pensaba férreamente que esos dos deberían estar juntos.
Los niños necesitaban a su papá y a su mamá biológicos, y ellos dos se amaban el uno al otro.
No había nada más que rechazar.
"Listo, eso está decidido. Mañana, ustedes dos se llevan el documento a la notaría." Jacinta dio su conclusión directamente.
"¿En serio? ¡Qué buena noticia!" Orson no pudo ocultar su sorpresa, afortunadamente había insistido y había conseguido ese regalo inesperado.e2
"¡Mamá!" Jimena estaba en shock, mirando increíblemente hacia su madre.
"Sé que estás ansiosa, tranquila, ahora mismo voy a buscar el registro familiar para ti." Jacinta interpretó a propósito las palabras de Jimena de otra manera.
Se levantó de su silla y le dijo a Jimena: "Ven conmigo a buscar el documento."
Dicho eso, se adelantó hacia la habitación.
Jimena lanzó una mirada furiosa a Orson.
Orson le sonrió y le dijo: "Vamos por ese documento, que mañana nos vamos."
Jimena, moliendo dientes de rabia, siguió a regañadientes a su madre hacia la habitación.
Le decía que lo olvidara, pero no podía.
Con solo un poco de coqueteo de su parte, ella ya perdía la cabeza.
Era realmente frustrante.
"Ya tienes treinta años, no eres una niña para hacer berrinches. En el mundo de los adultos no hay nada perfecto, siempre hay que aguantar y aceptar. Aprender a ser tolerante es la única manera de vivir feliz. Hazme caso, no hagas algo de lo que te puedas arrepentir." Jacinta trató de aconsejar a Jimena.
"Pero, ¿y si me arrepiento después de casarme con él?" Jimena seguía con la misma idea, caer dos veces en el mismo hoyo era una tristeza.
"Si no te casas con él, te arrepentirás toda la vida. Si te casas, aunque haya momentos de arrepentimiento, solo serán temporales. Mujer, en esta vida te cases con quien sea, siempre habrá momentos de arrepentimiento, pero la vida sigue. Casarte con alguien que amas te permite superar cualquier dificultad. Casarte con alguien que no amas, el arrepentimiento te llevará a pensar en divorciarte. No quiero ver cómo eliges el camino equivocado con mis propios ojos."
Jacinta rara vez le daba un sermón a Jimena, pero cuando lo hacía, siempre era compartiendo las lecciones de su propia vida.
Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: ¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia
excelente cada capítulo es mejor amo esta historia...
suban mas capitulos por favor es excelente la historia...
Suban más por favor 🙏🏼 muy buena historia 💝...
Suban más capítulos 🙏🏼...