"No necesito decir más para que entiendas el significado de mis palabras", le soltó Jimena a Priscila con una risita burlona.
Priscila ya estaba de capa caída, luchando por recuperar a Orson, y ahora veía que Jimena no solo no estaba triste por el zarpazo que le había dado antes, sino que le estaba tirando unos comentarios con un tono medio raro.
Esto hizo que Priscila se sintiera insegura y furiosa a la vez.
"¡Deja de hablar con enigmas, Jimena!" Priscila le espetó con los dientes apretados.
"¿Soy yo la que habla con enigmas o eres tú la que se siente culpable?" replicó Jimena con una sonrisa, cruzándose de brazos, como quien se prepara para disfrutar de un buen espectáculo.
"Dices que Orson fue quien te llevó a la cama, entonces deberías saber bien cuánto dura él en la batalla. ¿Por qué no nos cuentas cuánto tiempo duró contigo esa vez?" Jimena no era de esas chicas que no se atrevían a decir las cosas.
Si Priscila había sido tan directa y explícita antes, no había razón para andarse con rodeos ahora.e2
No importaba el lugar, Jimena iba a decir lo que quisiera, y nadie podría callarla.
Priscila se puso pálida al oír la pregunta, y le echó una mirada rápida a Orson, notando que él estaba serio y su cara se oscurecía por momentos.
Con algo de nerviosismo, Priscila respondió: "Ha pasado ya mucho tiempo, ¿cómo voy a recordarlo?"
"¿No es que estás tan loca por Orson? De la única vez que estuvieron juntos, ¿ni siquiera recuerdas como fue el proceso? Aunque no te acuerdes de los detalles, ¿tampoco recuerdas cuánto duró?" La sonrisa no abandonaba los labios de Jimena.
Orson se sentía tan mal, que una sensación de pesadez se instaló en su corazón.
"¡Una hora cada vez, es muy bueno! ¡Ese día me tuvo enredada por mucho tiempo!" Priscila, con la cara cambiando de color entre rojo y pálido, se armó de valor para responderle a Jimena.
Jimena soltó una risa ligera y dijo: "¿Una hora cada vez? Ay, por favor, ¿qué hombre aguanta una hora cada vez? ¡Ni que fuera Superman! Además, tú llegaste a la habitación del hotel casi al amanecer, ¿no? Si Orson te tuvo entretenida por tanto tiempo, entre una hora del preludio, el acto otra hora, y luego mínimo media hora de cariñitos después. Contando así, ustedes debieron haber dormido hasta por lo menos las diez de la mañana. Pero yo me desperté a las ocho, y ya ustedes estaban roncando. Eso no cuadra, ¿verdad?"
"¿Quién dijo que llegué casi al amanecer?" Priscila replicó con el cuello tieso.
"¿Vas a seguir negándolo? Anoche mismo Orson y yo pasamos por ese hotel, y la chica de la recepción dijo que te llamaron a tu habitación unos minutos después de llegar y que te la pasaste un rato lidiando con la policía antes de volver. Además, ella recuerda bien a qué hora llegaste: justo antes del amanecer. Dijiste que Orson aguanta una hora cada vez, pero eso no encaja con el tiempo, ¿o sí?"
Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: ¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia
excelente cada capítulo es mejor amo esta historia...
suban mas capitulos por favor es excelente la historia...
Suban más por favor 🙏🏼 muy buena historia 💝...
Suban más capítulos 🙏🏼...