¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia romance Capítulo 2031

Al escuchar la cruda verdad salir de la boca de Priscila, toda la tensión acumulada en Jimena se desvaneció.

"Tú... ¡ustedes han confabulado para fastidiarme! ¡Voy a decirles a mis papás para que los hagan pagar!", dijo Priscila con lágrimas en los ojos y furia en su voz.

Jimena la agarró del cuello y la empujó contra la pared, con su rostro reflejando una ira feroz le dijo: "¿Aparte de chismear, qué más sabes hacer? ¿Vas a hablar o no? Si no lo haces, te juro que aquí mismo te asfixio".

Priscila era de esas mujeres que todo lo que tenían era el físico, y nada en la cabeza, no solo eso, sino que además no podría hacerle daño a una mosca.

Era tan flaca que parecía un esqueleto.

De esas que parecían que se las llevaría el viento, ¿cómo iba a enfrentarse a alguien?

Si no fuera por el apellido y la plata de su familia, su arrogancia y su actitud de que no le importaba nadie, ya la habrían dejado hecha una calamidad.e2

Jimena, que antes era gordita, no solo había adelgazado con dieta, sino con ejercicio. Aunque ahora estaba más delgada, seguía teniendo fuerza en los huesos, y los músculos listos para la acción.

Cuando Jimena agarró a Priscila del cuello, era como si estuviera retorciendo a un pollito, lo hizo sin el menor esfuerzo.

Al ver la determinación en los ojos de Jimena, Priscila sintió un miedo real.

Sus amenazas solo funcionaban con los ricachones sin calle, pero Jimena era diferente, a ella no le importaba nada la influencia de la familia Guzmán.

Jimena era una mujer de armas tomar, y si se decidía a actuar, Priscila sabía que su vida podría terminar ahí mismo.

Con el cuerpo temblando, Priscila dijo: "Voy a hablar, voy a hablar, pero suéltame primero, y te cuento toda la verdad de lo que pasó hace tres años".

Al ver que Priscila se rendía, Jimena la soltó de un manotazo y gruñó: "¡Habla de una vez!".

Al oír eso, no solo Jimena quedó boquiabierta, sino también Orson.

¿Qué estaba diciendo Priscila?

¿Que aquella noche de hace tres años, en realidad, había estado con Jimena y no con ella?

¿Que Priscila solo se había acostado a su lado después del hecho para hacer parecer que habían estado juntos?

¿Así que todo había sido un malentendido y desde el principio había sido Jimena la que estuvo con él?

Esa noticia era tan sorprendente y repentina que el corazón de Orson latió con fuerza por la emoción.