"¿Puedes por favor dejar de escuchar mis audios y no responder?"
"¿Dónde pasaste la noche? Es en serio, Alyssa. Ya fui a tu departamento, a la casa de tus padres, al nightclub, a la casa de Chyler y a la de Joshua. Estoy empezando a preocuparme"
"A la mierda, no aguanto más. Voy a ir a la mansión de Philip"
—Mierda, va a ir donde Philip —me senté sobre el sofá tapándome el rostro nerviosa.
—Deberías contestarle los mensajes para que no se preocupe —Bellamy se sentó a mi lado con una taza de té.
—No quiero hablar con él —admití—. La verdad no sé qué hacer. Me siento extraña.
—Bueno, esperemos que no se pelee con Philip entonces.
—¿Te puedo hacer una pregunta? —la miré mordiendo el interior de mi mejilla. Asintió—. ¿Por qué habiendo tantos hombres que te desean, sigues estando soltera?
—No necesito a hombres que me deseen, necesito a hombres que no quieran cambiar lo que soy —se encogió de hombros.
—¿A qué te refieres?
—Hace muchos años me enamoré de alguien —hizo una pausa. Se acomodó en el sofá y suspiró—. Era perfecto, hasta que supo que trabajaba en un club nocturno. Comenzó a desconfiar de mí, a controlarme...
—¿Y qué pasó? —le pregunté expectante.
—Me hizo elegir entre él y mi trabajo —dejó su taza de té sobre la mesa de centro y rió—. Pero yo jamás dejaría de hacer lo que me hace feliz por estar con un hombre.
Asentí lentamente.
¿Qué pasaría si Mikkel me hiciera elegir entre él y mi trabajo en el nightclub?
—Creo que no fue lo mejor contarte eso... —Bellamy rió nerviosa al ver mi expresión temerosa.
—No sé qué haría si Mikkel me hiciera eso. Siempre he dicho que no voy a dejar el nightclub por culpa de un hombre, pero ahora es todo muy diferente —dije mientras veía cómo la pantalla de mi celular se prendía, dejándome ver la llamada entrante de Hummel—. Estando enamorada de él se me hace muy difícil pensar en dejarlo.
—Lo sé, pero también sé que sería una lástima que dejaras el nightclub —hizo una mueca y prosiguió—. Siempre he pensado que tú eres la chica a la que debería dejarle mi club nocturno cuando yo ya no pueda seguir haciéndome cargo de él.
—¿Hablas en serio? —abrí mis ojos como platos y ella asintió—. Eso sería una responsabilidad muy grande, Bellamy. La verdad no sé si podría hacerlo.
—Estoy segura de que podrías hacer eso y más.
Sonreí agradecida, pero no estaba de acuerdo con ella.
¿Qué tanto podría hacer alguien que tiene que ocultar cómo realmente es y lo que gusta hacer?
NARRA MIKKEL:
—¿Qué haces acá? —entré a la casa ignorando completamente a Philip. Miré hacia todos lados con sentimientos encontrados. Quiero encontrar a Alyssa para saber que está bien, pero a la vez espero que no esté aquí, porque si así es sé que no voy a poder controlarme.
Philip no saldrá vivo de acá si le hizo algo.
Subí al segundo piso sin pedirle permiso. Entré a todas las habitaciones, pero no la encontré.
—¿Le hiciste algo a Alyssa? —le pregunté al bajar. Me miró con el ceño fruncido y negó.
—Te dije que no los iba a molestar más. ¿Por qué le haría algo?
—¿Crees que yo voy a creer lo que tú digas? —reí irónico—. Jamás confiaría en ti, Philip.
—Te ayudé con Alyssa cuando se sintió mal. ¿Por qué sigues pensando que soy una mala persona?
—Porque lo eres —solté con dureza—. Que hayas hecho por una vez en tu vida algo bueno, no quiere decir que seas una buena persona.
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